EL PRESIDENTE ELECTO SE MOSTRÓ REFLEXIVO
Clima tenso en Paraguay tras denuncias por fraude electoral
El presidente electo, Santiago Peña, prometió que su gobierno tendrá “previsibilidad”, reclamó “una transición suave” de parte de la actual administración y calificó como “anarquistas” las protestas por presunto fraude electoral.
Tales planteos son impulsados por el excandidato presidencial paraguayo “Payo” Cubas, que quedó tercero en los comicios del domingo.
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Peña, del oficialista Partido Colorado, brindó una conferencia de prensa para medios locales y extranjeros en la que intentó mostrarse como un futuro presidente reflexivo y desapasionado, con la mira puesta en una gestión destinada a la creación de fuentes de trabajo, el combate a la corrupción y la integración de la región, más allá de las ideologías de los demás gobiernos.
El economista, que asumirá el 15 de agosto, hizo una introducción en la que aclaró que no se apurará en nombrar futuros colaboradores, porque elegirá a quienes considere los mejores para cada función, para lo cual aplicará un método de selección que respetará el “mandato popular” -teniendo en cuenta la procedencia de los funcionarios en base a los votos obtenidos por el oficialismo en sus ciudades-, la pericia profesional para cada caso y la identidad partidaria.
No mencionó en ese tramo las protestas con cortes de ruta empujadas por “Payo” Cubas en reclamo de un presunto fraude electoral, pero cuando se lo consultó al respecto las calificó de actos “anarquistas” y le pidió al actual mandatario Mario Abdo Benítez medidas que garanticen la libertad de circulación, ya que ayer a la mañana los micros de media distancia no pudieron salir a causa de los ataques que habían recibido en lugares alejados y sin seguridad.
“Contra el odio”
Ante una pregunta de Télam acerca de si encontraba similitudes en estas denuncias de fraude electoral con las de Donald Trump en Estados Unidos y Jair Bolsonaro en Brasil, evitó mencionar a ambos expresidentes, pero dijo que acciones como las de Cubas “impulsan políticas de odio, que son las que en mi gobierno vamos a desterrar, porque el domingo la mayoría del pueblo votó contra el odio”.
Añadió que uno de sus “mayores temores” antes de las elecciones era que podrían surgir esas denuncias, ante la gran diferencia de votos que obtuvo (15 puntos porcentuales por sobre el segundo candidato, Efraín Alegre), porque en su “fuero interno” sabía que iba a ganar por un ancho margen.
“Me preguntan si me sorprendió la ventaja que sacamos y yo digo que no, porque nos preparamos para sacar esa ventaja, porque presentamos la mejor opción para la mayoría del pueblo”, enfatizó. (Télam)