El fotoperiodista Pablo Grillo, quien resultó gravemente herido en marzo durante la represión a una protesta de jubilados frente al Congreso, presenta “una muy buena evolución” tras su octava operación, según confirmó su padre, Fabián Grillo.

El joven de 35 años había sufrido un grave golpe en la cabeza por una granada de gas lacrimógeno lanzada por un gendarme durante la marcha del 12 de marzo. Tras la intervención quirúrgica más reciente, Fabián Grillo aseguró al programa “Sin corbata” de Splendid AM 990 que su hijo está “mucho más animado, más despierto” y que ya habla casi con normalidad, pese a los efectos previos de la hidrocefalia que había padecido.

El padre agregó que los médicos indicaron que la operación salió bien, que no hay infecciones y que los análisis son positivos, aunque todavía queda por observar la evolución neurológica. Además, informó que la semana próxima se realizará un festival para celebrar la vida y la militancia de Pablo y honrar su trayectoria como fotoperiodista.

Fabián Grillo también hizo un llamado a la sociedad para que recuerde que la lesión de su hijo fue producto del protocolo “antipiquetes” implementado por las fuerzas de seguridad. Según señaló, este protocolo es “una excusa, un argumento falaz, como si no hubiera derecho a protestar”, y agregó que ya realizaron una presentación ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por este caso.

En el marco de la causa judicial, el cabo de la Gendarmería Héctor Jesús Guerrero fue procesado por la jueza federal María Servini por el delito de abuso de armas agravado, al disparar seis veces con su pistola lanza gases contra Grillo, violando los protocolos para el uso de este tipo de armas.

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