Se conocieron en una cervecería y los terminaron asaltando
Se hicieron “amigos” bebiendo en una cervecería y les pidieron que los acercaran en su vehículo a la casa. En el trayecto, uno sacó un cuchillo y se lo apoyó en el cuello a una de las víctimas. "Quédate quieto porque te voy a abrir la panza y te voy a dejar tomando suero", amenazó. El tatuaje en el rostro permitió rápidamente identificar al asaltante, quien también fue reconocido por otro atraco previo.

A través de un juicio abreviado ventilado por el Tribunal Oral Criminal 1, se conoció la suerte procesal de una pareja que había quedado señalada en un par de sucesos delictivos. El primero de ellos por el atraco a punta de pistola contra un joven que caminaba por la calle. El otro ilícito, cuando compartieron una noche en una cervecería con dos gesellinos a quienes le terminaron robando sus pertenencias, cuchillo en mano.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailA más precisiones, según consta en el expediente, se acreditó que en la noche del 9 de noviembre y madrugada del día siguiente de 2019, Sergio Emanuel Morón Cabrera y Sabrina Micaela Ortiz, se conocieron con Javier Abad y Andrea Guillermina Coronel, pareja entre sí y oriundos de Villa Gesell, en la cervecería de Avenida España 713. Aproximadamente las 4.10, Javier Abad junto a su pareja se ofrecieron a trasladar en su utilitario a los antes mencionados hasta su domicilio. En tales circunstancias, a pocas cuadras de haber iniciado el viaje, Morón Cabrera extrajo de entre sus ropas un cuchillo y colocándolo en el cuello a Coronel, le expresó a Abad: "quédate quieto porque te voy a abrir la panza y te voy a dejar tomando suero", obligándolo a continuar su marcha mientras se iba apropiando del teléfono celular, una billetera, tarjetas bancarias y documentación personal, al tiempo que se lo entregaba a Sabrina Ortiz para que lo guardara.
Al llegar a la esquina de Patagonia y La Movediza, le ordenaron al conductor detenerse y hacen descender del vehículo a las víctimas, momento en que Morón Cabrera -siempre con el cuchillo que portaba en el cuello de Coronel- se apoderó de la llave de la combi, obligando a la pareja a subir a la caja de carga del vehículo privándolos ilegalmente de la libertad al cerrar con llave dicho sector, para luego emprender la fuga junto a Ortiz