En el barrio El Hornero
Un hombre ingresó en una vivienda mientras una mujer y su bebé dormían
Un delincuente forzó una puerta ventana e irrumpió en la propiedad donde sus moradores dormían.
La inseguridad golpeó al barrio El Hornero. En este caso, un solitario delincuente ingresó a una propiedad mientras sus moradores, una mujer y un bebé de 10 meses, dormían y se llevó un celular, dinero y perfumes.
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El hecho fue descubierto por la damnificada cuando escuchó un ruido por la caída de un elemento que habría producido el intruso en plena retirada. Al despertar, observó marcas de barro en el piso que llegaban hasta su cama y en seguida entendió lo que había sucedido.
En diálogo con el ciclo radial “Último Bondi” (104.1 Tandil FM, EcoTV y El Eco Streaming), Andrea, una vecina de la calle Entre Ríos, confesó que se sintió “absolutamente ultrajada respecto de mi intimidad”.
Proveniente de la ciudad de Buenos Aires, dijo que eligió Tandil por su tranquilidad, por lo que reclamó más acciones para evitar nuevos episodios e hizo referencia a la falta de iluminación y de cámaras de la Red de Monitoreo.
El relato, en primera persona
El episodio sucedió en la madrugada del domingo, alrededor de las 2.30, según refleja el registro de las cámaras de seguridad privadas.
Tras merodear por la calle, un hombre irrumpió en la propiedad luego de saltar la reja del frente y de violentar una puerta ventana.
Según el relato de la damnificada, que reconstruyó a partir de evidencias que fue reuniendo, el intruso revisó las habitaciones, en una de las cuales se encontraba durmiendo junto con su bebé, y el baño, para llevarse un teléfono celular, algo de dinero y perfumes.
Si bien reconoció que “lo que menos me interesa es lo material”, confesó sentir “temor y el sabor amargo que me dejó haber tenido a un extraño en mi casa forzando la entrada”.
Andrea contó que se dio cuenta de la presencia del intruso cuando escuchó que se le cayó un perfume “cuando estaba saliendo”, de acuerdo a lo que pudo reconstruir. El sonido le generó desconcierto “porque lo que menos me imagino es que alguien había ingresado a mi casa”.
Poco después, observó que había huellas de barro que llegaban hasta su habitación, al lado de su cama, que podrían ser de alguien que había llegado desde afuera. “Me pregunté qué era porque yo no había entrado con los pies sucios. Cuando me levanto para limpiarlo, veo que la puerta ventana estaba abierta, que había un perfume roto tirado y me doy cuenta que faltaba mi celular, dinero, que había tirada una tarjeta de crédito y el DNI de mi hijo”, describió.
Independientemente del mal momento y la angustia por saber que ingresaron a su vivienda, agradeció que “por suerte no me hicieron nada, pero no deja de ser una intromisión violenta en mi hogar. Me dio miedo”.
Por otro lado, relató que la policía “se comportó muy bien” y que los efectivos de la comisaría Cuarta se presentaron en su domicilio al igual que los de Policía Científica.
En principio, de acuerdo a la información aportada por los uniformados, habría actuado solo y sería alguien del barrio “porque estaba deambulando” por la zona. “La policía se ocupó, no puedo decir nada, se portaron muy bien conmigo”, resaltó.
“La inseguridad es cada vez peor”
“Estamos viviendo momentos complicados a nivel nacional, no solamente en Tandil”, observó y justificó su decisión en hacer público su caso para evitar que vuelvan a suceder.
Dijo que eligió contarlo “para que nos cuidemos entre todos, para que se sepa que esto está pasado. Nos merecemos vivir tranquilos. En el barrio somos todos trabajadores y es una lástima que pasen estas cosas”.
“La inseguridad en el barrio es cada vez peor”, contó Andrea. En su relato, hizo referencia a las herramientas implementadas por los vecinos para estar en alerta ante cada situación que genere sospecha y las medidas que cada uno utiliza para evitar este tipo de episodios.
De todos modos, sostuvo que “nos cuidamos entre nosotros” ya que consideró que es “la mejor manera de generar seguridad”, y llamó a “tomar conciencia”, a “estar atentos y a tomar todas las precauciones para que no sucedan estas cosas”.
La elección de Tandil
En otro pasaje de la entrevista radial, contó que es oriunda de Quilmes, pero que estaba viviendo en Capital Federal antes de tomar la decisión de mudarse a Tandil.
Hace un año y ocho meses “elegimos esta ciudad, que conozco hace mucho tiempo, porque una de las cosas que amo es la tranquilidad que tiene y la seguridad”.
“Ahora estoy observando que, cuando empiezo a contar lo que me pasó, empiezo a encontrarme a otras personas a las que también les pasó lo mismo”, relató, con preocupación.
En efecto, mencionó que ese mismo día ingresaron a garajes de otras casas y al día siguiente robaron una máquina de cortar pasto”.
Si bien “la policía está circulando, claramente no puede estar en todos lados al mismo tiempo. Entiendo que la cantidad de patrulleros no alcanza, pero me parecía importante que se supiera para que cuidemos y evitar que siga sucediendo”, insistió.