Con el boleto en debate, el Ejecutivo elevará en 15 días al Concejo el nuevo pliego del transporte
Así lo indicó el concejal de Juntos, Cristian Cisneros. La concesión del servicio funciona con una prórroga, que tiene vigencia hasta junio. Estimó que en ese plazo podrán hacer los ajustes necesarios a la propuesta de funcionamiento de los micros para la próxima década. En paralelo, analiza los números ante el pedido de la Cámara de Transporte de llevar el boleto plano a casi 80 pesos.
El Concejo Deliberante se prepara para afrontar el análisis del pliego de bases y condiciones para concesionar el servicio de transporte público de pasajeros por los próximos diez años ante la expectativa que, según se estima, en los próximos 15 días el Gobierno comunal elevará la propuesta.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailAntes, deberá atender otras demandas vinculadas al sector, como el renovado pedido para llevar el boleto a casi 80 pesos impulsado por la Cámara de Transporte fundado en el incremento de los insumos y con la presión sobre el límite de la reserva de combustible para poder funcionar, en medio del faltante de gasoil.
Mientras avanza en las conversaciones en ese sentido, el Deliberativo aún cuenta con cierto margen para enfrentar la discusión sobre la concesión, ya que la última prórroga concedida vence en junio.
Sin embargo, consideran que ese plazo será suficiente para analizar el expediente, hacer las correcciones e incorporaciones pertinentes con miras a generar la propuesta integral sobre el servicio de la próxima década.
En diálogo con El Eco de Tandil, el presidente de la comisión legislativa, Cristian Cisneros (Juntos), dijo que “tenemos expectativa que en los próximos 15 días el Ejecutivo suba el pliego para que podamos discutirlo”.
“Lo estamos esperando para hacer las incorporaciones que consideremos necesarias. Vamos a volcar todas las necesidades que creamos convenientes para priorizar al usuario”, remarcó y evitó brindar algún detalle sobre los lineamientos que planteará el expediente a partir de la participación en las reuniones de trabajo convocadas para el diseño del pliego.
En tanto, aclaró que tienen potestad para extender el plazo de la vigencia de la actual concesión, pero consideró que no será necesario.
El marco regulatorio indica que se puede extender hasta un tercio del tiempo que se entregue el servicio, es decir, poco más de tres años (hasta noviembre de 2022).
La primera extensión del contrato fue en diciembre de 2019, que aprobó por unanimidad un aplazamiento de hasta doce meses para renovar la concesión del transporte público de pasajeros -la original caducaba en febrero de 2020- tal cual lo solicitado por el Departamento Ejecutivo en ese entonces, ante la falta de certezas en torno a la política de subsidios para el sector.
En julio de 2021, por unanimidad, se extendió por seis meses más la concesión de las seis líneas de transporte urbano nucleadas en la Cámara de Transporte de Tandil. Antes de su vencimiento, en enero de 2022, el Legislativo dio otros seis meses de margen.
Los pliegos se renuevan cada 10 años. Dado el avance y crecimiento que tuvo la ciudad en la última década, el debate anticipa la necesidad de rediscutir el sistema de transporte, con miras a optimizarlo de acuerdo al perfil actual, las demandas y la aplicación de la SUBE.
El boleto, en análisis
Al retomar el tratamiento del pedido formal que elevó la Cámara de Transporte, con la renovada propuesta que busca llevar el boleto plano a casi 80 pesos, el concejal indicó que en los últimos días se reunieron con los empresarios del sector. “Estamos conversando para ver cómo podemos avanzar”, indicó.
El 4 de febrero, la entidad presentó un pedido de incremento en el cuadro tarifario, que había sufrido el último ajuste en diciembre pasado. Pero ante el nulo avance en el tratamiento legislativo, reiteraron la solicitud pero con una propuesta superior de llevar el boleto plano a 79,90 pesos.
En febrero, los transportistas ya habían pedido un aumento del orden 65 por ciento, aproximadamente, que se traducía a 78,49 pesos. En la actualidad, la tarifa plana es de 47,54 pesos.
Poco después de presentado el pedido, mantuvieron un primer encuentro con los transportistas, a los que les solicitaron el aporte de algunos datos para incorporarlos a la evaluación. En simultáneo, consideraron adecuado aguardar el cierre de las paritarias que llevan adelante los distintos sectores y postergar unas semanas la negociación.
En estos últimos días reanudaron el intercambio, en el que además la entidad que nuclea a las seis empresas del sector presentó el estudio de costos correspondientes que apunta un valor sugerido del boleto a partir de los precios de los insumos que utiliza para funcionar.
Reconoció que la urgencia en torno a la reserva de gasoil con que cuentan las empresas, se tiene en consideración a la hora de evaluar la demanda y analizar los números que se presentan para sustentar el esquema propuesto.
En ese sentido, Cisneros indicó que “no hablaríamos de un incremento en los costos si no hubiera una inflación que supera el 50 por ciento”, por lo que calificó de “innegable” el incremento de los insumos que se trasladará al boleto.
A la par de consultas y estudio, rechazó que lleven adelante un trabajo contrarreloj e insistió que “estamos conversando y trabajando para ver qué es lo más conveniente”.
Expectativas por la SUBE
Frente a este escenario, se presenta como un punto a considerar la implementación de la SUBE, que reemplazaría a la actual tarjeta SUMO que se gestiona a través del Municipio.
En ese sentido, el concejal del Frente de Todos, Nicolás Carrillo anunció el compromiso de la Nación para que el sistema nacional desembarque en Tandil antes de fin de año, trayendo consigo todos los beneficios que contempla.
El edil mantuvo una reunión con el director de Implementación y Seguimiento del Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE), Marcelo Torres, que ratificó la aplicación en las unidades de la ciudad.
“Esto nos acerca un poco más a mejorar la movilidad urbana”, dijo y analizó que en la ciudad “tenemos un boleto que no siempre es accesible, con menos beneficios de carácter social, cuyo sistema se ve rechazado hasta por los centros de recarga de saldo”.
Además, “perjudica a los empresarios del transporte al recibir menor porcentaje de subsidios que el que podrían recibir por parte del Estado y, por el elevado valor del boleto, tienen menos pasajeros”.
Carrillo definió este acercamiento como “un puente”, por lo que “ahora convocaremos y articularemos una reunión entre el Municipio y la Nación para poder avanzar en este sentido y que la SUBE llegue antes de fin de año a Tandil”.