Por José Di Bártolo“No tenemos plata, esas obras pueden ser entregadas al sector privado. Que las termine el sector privado. No tenemos plata”. El próximo presidente de la Nación, Javier Milei, fue tajante en sus declaraciones sobre lo que hará a partir del 10 de diciembre.&nbsp;<a href="https://www.eleco.com.ar/interes-general/ya-hay-despidos-en-el-sector-de-la-construccion-aseguraron-autoridades-de-la-camara-de-construccion">Estiman que la paralización y eliminación de proyectos de obra pública en la Argentina pone en riesgo 500 mil puestos de trabajo</a>: 250 mil que trabajan en proyectos que se encuentran en marcha y otros 250 mil empleados de empresas del sector privado que son contratistas del Estado y que indefectiblemente se verán afectadas en el corto plazo. En la actualidad, según datos oficiales, hay 2308 obras en ejecución que involucran $310.000&nbsp; millones.Milei propone un sistema como el que funciona en Chile. Allí conviven el sistema de licitaciones y el de concesiones. El primero es idéntico al que funciona en Argentina. Consiste en abrir una búsqueda de empresas para la realización de tareas, sortear a la ganadora en base al proyecto y el precio sugerido y se abona la contratación directamente a las empresas privadas. El segundo, y es al que Javier Milei hace referencia, tiene que ver con un mecanismo por el cual el Estado le entrega al privado la responsabilidad de poder generar una inversión, entendiendo que las prioridades las define el Gobierno. A cambio de las obras, el privado recibe el derecho de explotar la inversión. Por ejemplo, si una empresa hace una autopista, puede recibir el derecho a cobrar peajes por los siguientes 20 o 35 años. Finalizado este tiempo, el Estado puede hacerse cargo del servicio o iniciar una nueva licitación para su explotación y mantenimiento.&nbsp;La drástica decisión del nuevo presidente pone en jaque a Miguel Lunghi: ¿por qué?&nbsp; Porque muchas de las obras que ven los vecinos a diario en la ciudad y que consideran que son realizadas por el Municipio, dejarán de existir como tales y habrá una parálisis de obras de gran envergadura, salvo las que llegan con fondos del gobierno de Axel Kicillof. La motosierra libertaria pone en alerta al lunghismo.&nbsp;Como bien señaló El Eco de Tandil durante la semana: "<a href="https://www.eleco.com.ar/politica/obras-publicas-coparticipacion-y-los-interrogantes-de-como-el-nuevo-mapa-politico-afectara-a-tandil">El jefe comunal ahora deberá gobernar con Axel Kicillof en la Provincia y Javier Milei en la Nación</a>, dos modelos de gestión diametralmente opuestos. Con el mandatario bonaerense de Unión por la Patria anduvo muy bien durante estos cuatro años y, al ser reelectos ambos, continuarán con el diálogo y las gestiones. Es conocido que el pediatra ha tenido mayor recepción con los gobiernos justicialistas que con los de sus propio partido. El desafío actual es el clivaje que se plantea con el gobierno libertario en la Presidencia y la manera en que goteará fondos hacia las provincias y el interior".Tandil recibe varios millones de programas nacionales para ejecutar obra pública, muchos de ellos destinados a obras de urbanización como pavimento, cloacas y demás servicios básicos. Y por citar algunos &nbsp;ejemplos, la cisterna de La Movediza, las luminarias del estadio San Martín, todo lo atinente al corredor vial de la Ruta Nacional 226, la Terminal, los Consultorios Externos del Hospital Ramón Santamarina, obras de infraestructura del Parque Industrial, entre otros.Hace una semana, el Municipio difundía que el Estado Nacional había aportado 168 millones para obras en el PIT. También, remarcaba el Plan de Pavimentación en diferentes zonas de la ciudad y las localidad rurales con fondos nacionales. En una visita reciente de la actual ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, el intendente agradeció los 46 millones de pesos enviados por el área nacional para el Polo Productivo y Social, un desarrollo realizado a partir de un acuerdo con Nación.&nbsp;Los ejemplos sobran, el intendente Lunghi estará frente a un escenario inédito en sus 20 años de gestión: no podrá hacer obras públicas más allá de las que consiga con fondos privados o los que vengan de Provincia de la mano de Kicillof.&nbsp;<a href="https://www.eleco.com.ar/la-ciudad/lunghi-pidio-por-la-union-el-dialogo-y-el-trabajo-conjunto-en-la-diversidad">En un comunicado emitido tras conocerse el triunfo de Milei</a>, Lunghi sostuvo: "Desde Tandil continuaremos fortaleciendo las políticas de estado, la gestión asociada y el trabajo conjunto con todos los espacios políticos y los niveles del estado, dialogando y buscando acuerdos, respetando las diferencias, potenciando el gran crecimiento de nuestra ciudad y la mejor calidad de vida para nuestra gente". El crecimiento exponencial de Tandil en los últimos 20 años, durante los 5 años de gestión del intendente Lunghi, siempre estuvo acompañado por la llegada de obras públicas de Nación y de Provincia. Durante los cuatro años que gobernó el macrismo, la obra pública fue más promesa que realidad: vale recordar los proyectos de urbanización de diferentes barrios que quedaron truncos y que luego la actual gestión tuvo que encarar los mismos para finalizar. Ni que hablar del sistema de PPP, que prometía un cambio radical sobre el trazado urbano Tandil de la Ruta Nacional 226 que quedó en la nada.&nbsp;Bien es conocida la "cintura política" del intendente Lunghi: supo coquetear con Néstor Kirchner, fue íntimo de Daniel Scioli, tuvo idas y vueltas con María Eugenia Vidal y luego de la pandemia, una excelente relación con Axel Kicillof intermediada por el diputado Rogelio Iparraguirre. Ahora, Milei y los libertarios, abren un interrogante para el lunghismo. La llegada de Julio Elichiribehety al gabinete de Lunghi es un síntoma de lo que se viene: la necesidad de tener un equipo que responda al intendente y que lo blinde en un escenario que asoma como uno de los más complejos que le tocará transitar al jefe comunal al frente del Municipio. CASTA QUE TE QUIERO CASTA<figure class="image"><img src="https://cdn.eleco.com.ar/media/2018/08/caputo-1.jpg" alt="caputo"></figure> Pasó tan solo una semana de que Javier Milei haya ganado el balotaje presidencial ante Sergio Massa y ya quedó más que claro algo: la promesa de "chau" a la casta política era una farsa. ¿Por qué? La llegada al gabinete nacional de personajes como Luis "Toto" Caputo, Patricia Bullrich y Florencio Randazzo.¿Dónde quedó la promesa de terminar con la casta? ¿Qué piensan los millones de argentinos y argentina que depositaron su voto pensando que era verdad todo lo que había repetido hasta el hartazgo?Detrás de todo aparece la figura de Mauricio Macri, a quien públicamente Milei agradeció en su discurso de victoria en la noche del pasado domingo. El expresidente se inclinó por el libertario tras las elecciones generales de octubre pero también había coqueteado con él durante todo el año y eso le valió el reproche de los socios de Juntos, sobre todo, de la UCR y de la Coalición Cívica."Milei al gobierno, Macri al poder". Esa vieja frase usada para "Cámpora al gobierno, Perón al poder", vuelve a cobrar vigencia. Parece que la influencia de Mauricio Macri es demasiado pesada para Javier Milei o que el pacto que alcanzaron a las horas de los resultados de las elecciones generales es más fuerte de lo esperado.Luis "Toto" Caputo está apuntado para ser el próximo Ministro de Economía de la Nación. Caputo es exministro de Finanzas y expresidente del Banco Central de la gestión de Mauricio Macri, recordado por ser el creador del "bono a 100 años", por los paraísos fiscales revelados en los Paradise Papers y por la liquidación de dólares tras el préstamo con el FMI. Macri convocó a "Toto" para su gestión en la Casa Rosada al señalarlo como el "Messi de las finanzas".&nbsp;¿Qué decía Milei sobre Caputo? "Caputo se fumó más de 15 mil millones de dólares. Se terminó en el Fondo Monetario Internacional, lo echaron a (Federico) Sturzenegger acusándolo de manejar mal la mesa, y se fumó u$s15.000 millones de reservas irresponsablemente, ineficientemente. Y nos deja este despiole de la Leliq". Declaraciones a un programa de TV en 2018.Patricia Bullrich, excandidata a Presidenta de Juntos, aliada de Macri, llegará al Ministerio de Defensa, lugar que ocupó durante la gestión Cambiemos. Recordemos que en plena campaña, Milei acusó a su futura ministra de Seguridad de haber puesto "bombas en jardines de infantes", un comentario que llevó a la entonces candidata presidencial a denunciar penalmente a su rival por calumnias. "Es una montonera tira bombas que puso bombas en los jardines de infantes", lanzó Milei durante una entrevista televisiva el 2 de octubre. La casta al poder. Las decisiones de Milei generaron un cimbronazo en el interior de La Libertad Avanza y hombres cercanos de siempre al electo presidente, dejaron de acompañarlo. Así, entre otros, Carlos Rodríguez se fue de La Libertad Avanza tras las versiones sobre quiénes asumirán en Economía: el economista había sido mencionado por el libertario como uno de sus consejeros en materia económica.¿VOLVIÓ LA INSTITUCIONALIDAD?<figure class="image"><img src="https://cdn.eleco.com.ar/media/2023/11/milei_7.jpg" alt="milei"></figure>De la semana que pasó si hay dos sucesos para destacar, que pueden marcar el fin de una época, al menos, hasta el momento de escribir estas líneas: tanto Alberto Fernández como Cristina Kirchner, recibieron a quienes serán sus sucesores.El dato no es menor: la última transición de un gobierno peronista a uno de diferente concepción política había sido un caos, ¿recuerdan? Cristina dejando el poder la noche del 9 de diciembre luego de haber colmado la Plaza de Mayo, Federico Pinedo asumiendo por unas horas la presidencia de la Nación y luego traspasando en el mando a Mauricio Macri ante la Asamblea Legislativa.&nbsp;Ahora, primó la institucionalidad. Un síntoma que sería interesante mantener en el tiempo, más allá de las banderías políticas y que habla de la madurez de los diferentes sectores.El presidente Alberto Fernández se reunió el martes durante dos horas y media en la residencia de Olivos con el mandatario electo Javier Milei, en un encuentro que dio inicio formal al proceso de transición hacia la asunción del nuevo Gobierno, el próximo 10 de diciembre.Según informaron fuentes oficiales, el encuentro "fue amable, respetuoso e institucional" y, durante la reunión, Fernández y Milei repasaron "los temas de Estado y la agenda internacional", y se aclaró que "no hubo ningún pedido particular de ningún tema"."Fue dar inicio a los equipos de transición con enlaces en todas las áreas. Duró dos horas y media. Fue amable, respetuosa e institucional", explicaron las fuentes sobre la reunión.En tanto, la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, recibió este miércoles en su despacho del Senado a Victoria Villarruel, dirigente de la Libertad Avanza electa para sucederla desde el próximo 10 de diciembre al frente de la Cámara alta, en una reunión que la compañera de fórmula de Javier Milei describió como “cordial” e “histórica”.El encuentro se llevó a cabo durante una hora y, al finalizar, Villarruel hizo declaraciones en la puerta de ingreso de los senadores, sobre la calle Hipólito Yrigoyen, a la vez que la oficina de la Vicepresidenta emitía un comunicado a través de la red social X.Un dato positivo y para destacar.&nbsp;&nbsp;

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