Construcción
Imepho, la empresa líder en fabricación y venta de hormigón llegó a Tandil con sus materiales para la construcción
En el local ubicado en Av. Falucho 1337, los clientes podrán encontrar el mejor hormigón pero también sanitarios, griferías, cerámicos y otros productos para la construcción en seco y tradicional, tanto de origen nacional como importado. La empresa oriunda de Mar del Plata ofrece distintas facilidades de pago como descuentos y ofertas y la posibilidad del abono en cuotas y tiene además una atractiva política de acopio para inversión.
Con casi cinco décadas en el mercado de la fabricación, colocación y venta de hormigón elaborado, la empresa marplatense Imepho acaba de desembarcar en Tandil con un local ubicado en la Avenida Falucho 1337 que ofrece a sus potenciales clientes una enorme variedad de materiales para la construcción.
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En el negocio que la firma comparte con la pinturería Ámbito, los compradores podrán encontrar -además de hormigón- sanitarios, griferías, cerámicos y otros productos para la construcción en seco y la construcción tradicional, tanto de origen nacional como importado.
Imepho posee, también, la planta de acopio para inversión más importante del sudeste de la provincia de Buenos Aires.
“Imepho es la única empresa de Mar del Plata, y me atrevería a asegurar que es la única de la provincia de Buenos Aires, certificada con normas ISO para la fabricación de hormigón”, contó el gerente de Marketing y Ventas de la firma, Adrián Merlo.
En diálogo con El Eco de Tandil, Merlo señaló además que “ahora estamos avanzando con los trámites para certificar con normas ISO todo el proceso de administración y de ventas”.
La empresa que lidera el mercado hormigonero atraviesa actualmente un proceso de expansión tanto geográfica como comercial y se encuentra en la búsqueda de socios estratégicos para ofrecer y entregar mercadería en toda la región.
Por eso, a las dos sucursales marplatenses -una ubicada en la Avenida Juan B. Justo y Don Bosco y la otra en Independencia y Quintana- se suman el negocio inaugurado hace pocas semanas en Tandil y el local que la empresa comparte con Ámbito en Olavarría, y que en ese caso funciona como punto de entrega de los materiales que los clientes compraron previamente a través de la página web.
“Estamos desarrollando un mercado a 300 kilómetros a la redonda de Mar del Plata, donde somos competitivos, con un sistema de atención al público, buscando socios estratégicos y lugares donde hacer picking de mercadería”, dijo Merlo.
Como parte de su notable expansión comercial, la firma inauguró recientemente en esa ciudad balnearia la Nave 5, un galpón de 5 mil metros cuadrados para acopiar materiales, especialmente cerámicos. Para el traslado a destino, cuenta también con una flota integrada por más de 50 camiones.
Imepho planea instalarse próximamente en las ciudades de Balcarce, de la mano de FAVA Hogar, y en Pinamar.
En la actualidad, vende materiales en los locales, desde su tienda online -imepho.com.ar-, a través del Marketplace del Banco Provincia y próximamente con el del Banco Nación.
Como estrategia de fidelización de sus clientes, ofrece distintas facilidades de pago, como descuentos y ofertas en ciertos productos y la posibilidad del abono en cuotas.
Acopio como inversión
Imepho es famosa en la región por su política de acopio como forma de inversión. “Nosotros diferenciamos el acopio común del de inversión porque en éste último caso es un acopio financiero”, explicó Merlo y puntualizó: “así como algunas personas compran dólares, realizan un plazo fijo o compran acciones, otras también pueden hacer un acopio de materiales y retirarlos en el momento en que lo requieran”.
En este punto, el gerente de Marketing de la firma aseguró que el material que se acopia puede ser canjeado en el momento en que el cliente lo desee, sin importar la cantidad de tiempo que haya pasado desde la compra, y aclaró que el canje está vinculado al monto en dólares que costó el o los artículos almacenados.
Por eso -explicó-, al momento de canjearlos, se puede hacerlo por productos diferentes a los acordados al inicio de la transacción.
“Se puede acopiar hormigón y hierro pero si, cuando empieza a construir, la persona se da cuenta de que necesita productos para hacer el baño, se realiza un cruce con lo que vale ese baño y se le entregan sanitarios, griferías o cerámicos -lo que requiera- al valor de ese día”, sostuvo.
En ese sentido, aclaró que “si el cliente acopia un inodoro y lo pide después de pasados cinco años, por ejemplo, no se lleva el mismo modelo, sino otro más nuevo”.
Merlo destacó las ventajas que conlleva este tipo de inversión: “el acopio es un activo que no genera gastos; por ejemplo, si una persona se compra un departamento, inmediatamente empiezan a correr los gastos de las expensas y las tasas e impuestos, al margen de que el departamento se va, naturalmente, devaluando”, indicó.
Y consideró que “el metro cuadrado terminado es un activo que genera gasto; el acopio, en cambio, es un activo que no genera gasto y que se va revaluando constantemente”.
El responsable de las ventas sostuvo finalmente que la práctica del acopio es muy habitual entre empresas constructoras, inversores y arquitectos pero también entre particulares que están construyendo su propia casa.