Arsenal de Sarandí ha caído a la Primera B Metropolitana, la tercera categoría del fútbol argentino, poniendo fin a una estadía de 33 años fuera de ese nivel. El club del Viaducto consumó su descenso tras perder 2-1 frente a Deportivo Madryn.

Este resultado borra de un plumazo las glorias recientes del club, como el recordado título de la Copa Sudamericana de 2007, el Clausura de 2012 y la Supercopa Argentina de ese mismo año, todos conseguidos bajo la influencia de la familia Grondona.

En el encuentro decisivo, la balanza se inclinó a favor de los locales. Maná abrió el marcador a los 48 minutos, y Crego amplió la ventaja a los 62. Si bien González descontó siete minutos más tarde, el tiempo y el fútbol de Arsenal no fueron suficientes para revertir la historia.

La derrota 2-1 ante Madryn, sumada al triunfo de Güemes y el empate de Almagro, hizo que el destino de Arsenal se sellara de manera directa, sin chances de llegar con vida a la última fecha. En la actual temporada de la Primera Nacional, el equipo dirigido por Darío Franco finalizó como el colista de la Zona A con apenas 31 puntos, reflejando una campaña caracterizada por la falta de consistencia y los constantes cambios de nombres tanto en el plantel como en el cuerpo técnico.

Mientras en Sarandí lloran el descenso, la alegría fue total en la Patagonia. Deportivo Madryn, que cerró una campaña impresionante bajo la dirección técnica de Walter Erviti, se metió en la final por el ascenso a Primera División, donde se medirá con Gimnasia (M). El aurinegro se destacó por ser uno de los equipos más ganadores y menos perdedores de la PN, además de ser el más goleador. Por otro lado, Ferrocarril Oeste también celebró, ya que ganó su partido clave ante Los Andes y logró salvar la categoría.

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Roger Rotonda

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