Cae Palermo, el primer club europeo de Mariano González
Desapareció tras haber sido declarado en bancarrota. Con nueva denominación, jugará en la Serie D italiana.

La Unione Sportiva Cittá di Palermo supo hacerse un lugar importante dentro del fútbol italiano, cuando a comienzos de este siglo fue consolidándose como uno de los principales protagonistas en la Serie A.
El equipo de la camiseta rosa y negra se caracterizó por “descubrir” jóvenes promesas que lo tuvieron como primer club europeo, para luego dar el salto a los principales del fútbol del continente.
Fue, sin ir más lejos, el caso de Mariano González. Racing Club de Avellaneda transfirió al tandilense a Palermo en 2004, cuando recién había cumplido 23 años. Estuvo durante dos temporadas en el club de Sicilia, hasta que fue cedido a préstamo al Inter de Milán, donde se coronó campeón italiano en 2006/2007.
Para el siguiente torneo, Palermo transfirió a González a Porto, donde el mediocampista formaría parte de un ciclo histórico. En cuatro temporadas, ganó tres veces el campeonato de liga, tres Copa de Portugal, dos Supercopa de ese país y la Liga Europa de 2011, año en que se produjo su regreso a Argentina para jugar en Estudiantes de La Plata.
A mediados de la década del 2000, era común encontrar a Palermo en ubicaciones expectantes en la tabla de posiciones del campeonato italiano e incursionando en competencias europeas. Como así también de ahí en adelante ver sudamericanos con la casaca rosa y negra: el uruguayo Edinson Cavani y los argentinos Javier Pastore, Franco Vázquez y Paulo Dybala, entre los más destacados.
Cuando Italia fue campeón del mundo en 2006, con Mauro Camoranesi en su formación, había cuatro jugadores del “rosanero” en la plantilla que comandaba Marcello Lippi: Andrea Barzagli, Cristian Zaccardo, Fabio Grosso y Simone Barone.
Otro tandilense que jugó en Palermo fue Pablo “Puchi” González, hermano de Mariano, quien llegó cedido por Novara en 2011.
En los últimos años, el club siciliano perdió el brillo de entonces. Problemas económicos y financieros lo llevaron a la deriva, hasta que fue declarado en bancarrota y las autoridades italianas decidieron que no podrá seguir compitiendo con su nombre original ni hacerlo de manera profesional, por lo cual deberá retroceder hasta la Serie D, de carácter amateur. La compañía Hera Hora se adjudicó la licitación para comandar los destinos de la nueva institución, que buscará escalar categorías desde lo más bajo y con nueva denominación: Societá Sportiva Dilettantistica Palermo.
“Siamo aquile e siamo fatti volare” (somos águilas y estamos hechos para volar) reza el nuevo slogan, aludiendo al ave que adornaba el histórico escudo palermitano. El orgullo siciliano deberá aflorar para afrontar la etapa de la reconstrucción.