El italiano y número 1 del mundo, Jannik Sinner y el español número 2, Carlos Alcaraz, disputarán la final del Masters 1000 de Cincinnati, tras haber ganado en sus respectivos duelos de semifinales.

Sinner, que está teniendo un 2025 prácticamente perfecto, se quedó con el triunfo por 7-6(4) y 6-2, luego de una hora y 26 minutos de juego, terminando con el sueño del francés Térence Atmane.

El primer set fue muy parejo, con ambos jugadores manteniendo sus turnos de saque hasta el tie-break, aunque allí fue donde el italiano impuso toda su jerarquía para imponerse por 7-4 y tomar una ventaja clave.

Ya en el segundo set, Sinner estuvo mucho más confiado, mientras que Atmane comenzó a cometer más errores no forzados y poco a poco veía cómo se le escapaba el partido. Así fue como el italiano consiguió quedarse con el triunfo gracias al 6-2 definitivo tras quebrarle el saque a su oponente en dos ocasiones.

Sinner, que se perdió tres meses del calendario por dar positivo en un control antidoping, irá en busca de su tercer título en la temporada, luego de los conseguidos en el Abierto de Australia y en Wimbledon. Además, llegó a la final en el Masters 1000 de Roma y Roland Garros, cayendo en ambas ocasiones con Alcaraz.

Alcaraz por su parte, dio una nueva muestra de solidez y jerarquía al vencer al alemán Alexander Zverev con parciales de 6-4 y 6-3 en una hora y 45 minutos.

El encuentro comenzó con un clima de tensión, tras rumores sobre molestias físicas del alemán y un retraso por lluvia que demoró la salida de los jugadores a la pista. En ese contexto, tanto Alcaraz como Zverev ofrecieron un inicio parejo, con puntos largos y de gran intensidad.

Sin embargo, el español logró imponer su tenis con valentía en la red, variedad de golpes y firmeza con el saque para quedarse con el primer set.

En la segunda manga, Alcaraz intentó escaparse con un quiebre temprano, aunque Zverev reaccionó y llegó a incomodar al murciano. Pero en el mejor momento del germano, las altas temperaturas lo obligaron a llamar al médico tras sufrir mareos y dificultades físicas.

Con hielo en el cuerpo y notoriamente disminuido, el alemán luchó para sostenerse en cancha, aunque poco pudo hacer ante la concentración y agresividad del español.

De esta manera, Alcaraz se metió en su segunda final de Cincinnati y buscará el título frente a Sinner, el actual número uno del mundo.

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