Murió Criscilla Anderson: bailarina, madre y figura de Alvin y las ardillas
La bailarina y figura de reality shows dejó un mensaje emotivo a sus hijos y seguidores antes de morir tras una lucha contra el cáncer de colon.
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Este miércoles se confirmó la muerte de Criscilla Anderson, bailarina, figura de reality shows en Estados Unidos y una de las voces de una de las ardillas de la película Alvin y las ardillas. Tenía 45 años.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailLa noticia fue anunciada en su cuenta de Instagram, donde se publicó un mensaje que la artista había escrito antes de su muerte, en el que comunicaba a sus seguidores que se había “deslizado a los brazos de Jesús”. Allí también agradecía el apoyo recibido y recordaba la dura lucha que mantuvo durante todo su tratamiento contra el cáncer de colon.
El cantante de country Coffey Anderson, su exesposo, le dedicó un homenaje público. Ambos se habían casado en 2009, tuvieron cuatro hijos —incluida una hijastra— y él solicitó el divorcio en 2022. Coffey expresó que los corazones de los seres queridos están “destrozados” por la pérdida y afirmó que Criscilla “definía la fuerza” como nadie.
A lo largo de su trayectoria, Criscilla Anderson trabajó como bailarina de fondo en películas como Fat Albert y luego se desempeñó como coreógrafa del equipo de animadoras de los Dallas Cowboys. Su popularidad creció aún más con el estreno del reality Country Ever After, centrado en su relación con el cantante.
El mensaje de despedida: “No me he ido… estoy en casa”
En el conmovedor texto publicado en sus redes, Criscilla dejó una despedida dirigida a sus hijos, familiares, amigas y seguidores.
“Si estás leyendo esto, significa que finalmente me he recostado en los brazos de Jesús, en paz y rodeada de amor”, comienza el mensaje. A sus hijos les dedicó palabras personalizadas y aseguró que seguirá acompañándolos: “Mis bebés… los estoy cuidando. Cuando sientan un momento cálido, familiar o demasiado hermoso para ser una coincidencia, soy yo”.
También agradeció a su “círculo de mujeres” por sostenerla, a su familia por el amor incondicional y a su fotógrafa de confianza por acompañarla durante años.
El texto cierra con un mensaje final para su comunidad: “Sean amables entre ustedes. Mantengan a mis hijos cerca. Y recuerden: el cielo no está tan lejos como a veces parece. Los amo a todos. Siempre.— Criscilla.”