Cómo determina el Gobierno las zonas por su riesgo
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Para definir el riesgo de un distrito y, como consecuencia, las restricciones que se aplicarán a la circulación de su población, el Gobierno analiza tres parámetros: la incidencia, razón y ocupación del sistema sanitario.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailCon estos datos las autoridades conforman un mapa para tener una visualización global de la situación en todo el país y es el plano que expuso el presidente Alberto Fernández el jueves pasado durante el anuncio de las medidas.
En el mismo se califica a cada una de las jurisdicciones en cuatro categorías sanitarias: bajo riesgo, medio riesgo, alto riesgo y alerta epidemiológica.
La incidencia de casos contempla a los registrados en las últimas dos semanas y se utiliza la fecha de inicio de los síntomas o fecha mínima.
El denominador estará compuesto por la población proyectada del INDEC del área geográfica y se utilizará como factor de ampliación 100.000 habitantes, explicó el Ministerio de Salud.
En tanto que la razón de los casos incluye el número de casos confirmados en las dos últimas semanas epidemiológicas cerradas pero el denominador está compuesto por el número de casos confirmados acumulados en las dos semanas previas.
En este caso, indicó la cartera sanitaria, se utiliza la fecha de inicio de los síntomas o fecha mínima.
De esta forma, cada nivel evaluado queda definido en su categoría de acuerdo a los siguientes parámetros:
* Bajo riesgo epidemiológico y sanitario: RAZON menor a 0.8 e INCIDENCIA menor a 50
* Mediano riesgo epidemiológico y sanitario: RAZON entre 0.8 y 1.2 e INCIDENCIA: entre 50 y 150 (indicadores medios) o un indicador ALTO y uno MEDIO.
* Alto riesgo epidemiológico y sanitario: RAZON superior a 1.2 e INCIDENCIA: mayor a 150 (indicadores altos) o RAZON ESTABILIZADA (disminución a 1.20 o a una razón menor hasta de 0.8) e INCIDENCIA: mayor a 250
* Alarma epidemiológico y sanitario: INCIDENCIA: igual o mayor a 500 y PORCENTAJE DE OCUPACION CAMAS UTI: mayor al 80 por ciento
El factor de la terapia intensiva
En las últimas semanas los casos de Covid-19 crecieron de forma exponencial en la Argentina, elevando la ocupación de camas en las unidades de terapia intensiva (UTI). En este contexto, la segunda ola del coronavirus generó un nuevo dato preocupante: el incremento del porcentaje de personas menores de 60 años que requirieron internación en cuidados intensivos.
Según los últimos datos informados por el Ministerio de Salud de la Nación, el 56,3 por ciento de las personas con Covid-19 internadas en las UTIs de los hospitales nacionales de la Argentina eran menores de 60 años: el 44,8 por ciento tiene entre 40 y 60 y el 11,5 por ciento entre 15 y 40 años.
En terapia intermedia la situación se repite, con un 40 por ciento de ocupación de camas por parte de mayores de 60; un 50,7 por ciento correspondiente al grupo etario de entre 40 y 60 años y un 9,3 por ciento al grupo entre 15 y 40 años.
La Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI) indicó en su último informe que el promedio de edad de las personas internadas con coronavirus es de 54 años.
De acuerdo con el relevamiento de la entidad -que aclara que se trata de una muestra elaborada en base a datos de 171 UTIs-, la ocupación de las terapias intensivas era del 87,4 por ciento (60,6 por ciento correspondientes a pacientes con Covid-19).
En la Provincia de Buenos Aires también se evidencia un incremento en la proporción de personas jóvenes internadas, junto con una caída de los mayores. Según el último reporte del Gobierno bonaerense, la cantidad de personas de más de 80 años en UTI cayó del 15 por ciento en diciembre de 2020 al 5 por ciento a fines de abril último, mientras que el número de internados de entre 70 y 79 años descendió por debajo del 20 por ciento en el mismo período. En contraposición, el ingreso a terapia de las personas de entre 50 y 59 años pasó del 15 por ciento a fines de 2020 a estar por encima del 20 por ciento en abril último.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió recientemente un alerta epidemiológica por el aumento en las internaciones y muertes de personas menores de 60 años en la región, y advirtió que “a nivel global se observa un cambio del perfil de la edad de los casos hospitalizados en UTI, con una mayor tasa de hospitalización en población más joven”.
El organismo realizó un análisis de 4 países latinoamericanos -Brasil, Chile, Paraguay y Perú- y concluyó que allí existe un “incremento en la severidad de la enfermedad en la población menor de 60 años”.
Hasta el momento, en la Argentina el aumento de casos de internaciones de personas jóvenes no se refleja en un incremento de la mortalidad en ese grupo etario. “Casi el 60 por ciento de los internados en terapia son menores de 60 años, pero en los fallecidos vemos que siguen siendo los mayores de 60 años”, precisó la directora nacional de Epidemiología del ministerio de Salud, Analía Rearte. En efecto, según datos oficiales, el 83,3 por ciento de los fallecidos en 2021 corresponde a mayores de 60 años.