Afip dice que la imprenta quebrada pertenece a un fondo buitre
El pedido de quiebra de esa industria amaga con dejar en la calle a unos 400 operarios.
El funcionario informó que la AFIP remitió antecedentes del caso a la Comisión Nacional de Valores para que realice una denuncia ante su par de Estados Unidos, la SEC, que se efectuará esta semana.
Echegaray recordó que el 14 de agosto último reclamó ante la justicia comercial revocar la quiebra por ser “fraudulenta” y sostuvo que “el objetivo fundamental es el mantenimiento de los 406 puestos de trabajo y la continuidad de la empresa”.
En línea con lo que ya había denunciado la presidenta Cristina Kirchner, recordó que la empresa presentó el pedido de quiebra el lunes 11 de agosto en el juzgado 19 de Gerardo Santicchia y “ese mismo día el juez decreta la quiebra”.
“En el mismo día se decidió la quiebra y todavía estamos esperando que decida sobre la continuidad productiva de la empresa, pedida por la AFIP, los gremios y los trabajadores”, se quejó el funcionario, y rechazó de plano que el Estado pueda “hacerse cargo de la empresa”.
Informó que, según datos públicos, este año se tramitaron en el juzgado 1.189 pedidos de quiebra y el tiempo mínimo en que concedió una fue de 25 días “cuando en este caso lo hizo en el mismo día”.
El funcionario sostuvo que la quiebra presentada por la empresa “obedece a otros motivos que no son los propios del negocio”, que dijo desconocer, y opinó que puede ser comprada por un operador privado.
“La empresa hizo trampa presentando de manera fraudulenta una quiebra intempestiva y esperamos que la justicia tome decisiones cuanto antes sobre su continuidad porque la compañía goza de buena salud”, añadió.
Echegaray informó que en el momento de pedir la quiebra, según datos del balance de la empresa, tenía un activo de 183,8 millones de pesos, y un pasivo de 145,2 millones, con lo cual contaba con un patrimonio neto de 38,5 millones de pesos.
Señaló también que el balance “registra ganancias reservadas para una futura distribución de dividendos de 20,2 millones de pesos, y que no tenía deudas impositivas”.
El titular de la AFIP indicó también que la empresa había recibido en abril último “un aporte de 3,04 millones de pesos y que en el balance se indicó que eso significó la confianza de nuestros accionistas en la continuidad del negocio”.
Agregó que la AFIP le había pagado a la empresa en el último año por reintegros de exportación 6,04 millones de pesos y tiene pendiente de cobro otros reintegros por 1,1 millones de dólares que están en proceso de pago, dijo Echegaray.
Denunció el funcionario que en octubre último había registrado un préstamo ficticio con la casa matriz por 26,8 millones de pesos, que después fue capitalizado para la empresa.
Echegaray informó que según el balance la empresa esperaba cobrar otros 40 millones de dólares durante el 2014, de los saldos disponibles en el extranjero al 30 de junio pasado.
El funcionario señaló que según la SEC, la casa matriz de la imprenta quebrada es la sociedad estadounidense RR Donnelley & Sons Company.
La información de la AFIP agrega que esa sociedad tiene como principales propietarios a los fondos de inversión Blackrock, Capital World Investors, Tehe Vanguard Group INC y State Street Corpatión.
A su vez, estos grupos inversores son socios del fondo de inversión Elliott Management Corporation, perteneciente a Singer, y además participan en negocios energéticos. NA
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