Cuando por hacer la tarea periodística te señalan desde el poder: "Un periodista de la calle Yrigoyen se apuró"
Una primicia, un domingo al mediodía en plena pandemia, cambió la dinámica del aislamiento en Tandil: el Municipio salía del sistema de fases y proponía su propio esquema. Rápidamente, la Provincia, respondió. El comienzo de una tensión que duró muchos meses.

Por José Di Bártolo
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailDomingo 6 de septiembre de 2020. Pandemia. En plena restricción de toda actividad, el Municipio de Tandil, a cargo del intendente Miguel Lunghi, decidió romper con el sistema de fases que la Provincia de Buenos Aires mantenía para poder administrar la pandemia generada por el coronavirus.
La historia de ese día fue muy sencilla: desde el Municipio venían teniendo filtraciones en relación a la comunicación y la pandemia. Es más, jornadas atrás, se había conocido a través de un mensaje que se expandió rápidamente -en la época donde un caso positivo era noticia-, que el hijo del intendente, Miguel Lunghi (h), se había infectado de Covid-19 y eso preocupaba al entorno del mandatario. Pero ese domingo, antes de hacerse público, comenzó a saberse a través de un mensaje de WhatsApp, que el Municipio saldría del sistema de fases y generaría su propio criterio, que se conocería como semáforo sanitario.