Desde Obras Sanitarias admitieron que la fuga de gas se produjo accidentalmente
Luego del importante escape de gas y consecuente explosión en la esquina de Linstow y Aristegui ocurrido el viernes alrededor de las 21, desde Obras Sanitarias lamentaron lo sucedido y pidieron disculpas a la población porque accidentalmente perforaron la cañería de gas cuando intentaban solucionar un problema de falta de agua en el barrio Golf.
En diálogo con El Eco de Tandil, el gerente operativo del área de Agua Corriente de Obras Sanitarias, Jorge Mathiasen, explicó que “estábamos trabajando buscando una válvula de un sector del barrio Golf bastante afectado por la falta de agua, que desde fin de año a la fecha no podemos resolver un problema. Entonces iniciamos una tarea de búsqueda de válvulas y reparación de las mismas, como para ver si realmente podíamos mejorar el sistema”.
En ese marco, afirmó que “les estábamos llevando agua con un camión, y nos parecía bastante ilógico. Entonces nos pusimos con el grupo de tareas de reparación a buscar esa válvula para reparar la posible causa de los problemas, y en un momento tocamos un caño de gas que pasaba por debajo del caño de agua”.
“Asumo la responsabilidad de eso, fuimos nosotros los que rompimos el caño, y después se inició un incendio no sé por qué motivo que generó todo lo que pasó después”, admitió.
El responsable de Agua Corriente detalló que la perforación se produjo con una retroexcavadora y que “es una zona con mucho relleno, mucha piedra. Entonces, contratamos una máquina para tratar de buscar la válvula y poder repararla. Justamente con la máquina tocamos el caño”.
“Fue un
accidente”
Mathiasen aseguró que tienen documentado el lugar por donde van las redes de gas pero que se encontraban “trabajando sobre el caño de agua y, al excavar como para dar lugar para cambiar la pieza, fue que tocamos el caño de gas. Fue un accidente, fue algo involuntario, en el afán de lograr la solución provocamos ese problema”.
En tanto, destacó “la maravillosa tarea de Camuzzi que vino con todo su equipo inmediatamente, llamaron a los Bomberos. Me quedé admirado por la eficiencia con la que trabajaron. Fue un trabajo muy delicado y los Bomberos, la Policía, la Usina, trabajaron en forma extraordinaria”.
“A veces ocurren estos accidentes, nos ha sucedido hasta con una herramienta de mano que hemos golpeado algún caño. Debajo de la vereda pasan tantos servicios que a veces pueden ocurrir estos accidentes. Son cosas que a veces inevitablemente ocurren, no deseábamos que nos pasara, pero sucedió”, argumentó.
A su vez indicó que “en el afán de darle una solución lo más inmediata posible, recurrimos a una máquina porque son zonas con relleno, con piedras. Obviamente que lleva mucho tiempo hacer un pozo en el lugar con elementos tradicionales como pala, pico. Fue un hecho lamentable del cual me hago cargo, pero ocurrió”.
Por otra parte, sostuvo que pensaban continuar con las tareas para solucionar el problema de agua ayer en horas del mediodía pero “dado el factor climático tuvimos que postergarlo para el lunes. La situación del agua no está resuelta todavía. Tengo un grave problema que aún no hemos localizado”.
Finalmente, se disculpó con la población y afirmó que “lamentamos mucho los problemas que les ocasionamos al barrio pero son hechos accidentales que a veces no se pueden evitar”.
Una ardua
tarea
Según pudo conocer este Diario, el personal de Camuzzi tuvo que llevar adelante una ardua tarea para solucionar el inconveniente. Tal es así que trabajaron hasta las 5.30.
Cuando la retroexcavadora perforó el caño, provocó una pérdida importante de gas y la explosión y consecuente incendio se produjo por la corriente estática que genera la velocidad de la salida del gas.
El inconveniente con el cual se encontraron los trabajadores de Camuzzi al llegar al lugar fue que tuvieron que hacer tres pozos porque no lograban divisar el dado de cemento que indica el lugar preciso donde están las válvulas que permiten cortar el suministro de gas.
La dificultad se presentó porque últimamente se han desarrollado diversas obras en el lugar, tales como la rotonda y la obra de cloacas y la tierra que se movió para esas tareas, progresivamente ha ido tapando los dados de cemento. Eso complicó mucho el trabajo ya que no era posible a simple vista detectar las válvulas, sobre todo teniendo en cuenta la oscuridad porque el hecho sucedió en horas de la noche.
Como no lograron localizar las válvulas, prensaron la cañería maestra, pero esa tarea llevó mucho tiempo ya que en varios lugares el caño se encontraba a dos metros de profundidad y los pozos debieron efectuarse a pala. Un condimento extra que dificultó la labor fue que había piedras en el terreno.
De ese modo, se prensó la cañería, se cortó la parte del caño que estaba dañada y finalmente lograron repararla.
Se cortó el servicio sólo a unos pocos usuarios sólo por un rato y a las 5.30 quedaron finalizadas las tareas. U
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Uno de los vecinos consideró “inconcebible”
que no pudieran encontrar la llave de gas
Angel Ponce de León, uno de los principales referentes del barrio Golf, consideró “un espanto” que Camuzzi no supiera “dónde está la llave de gas de una red troncal, ese es el comentario que hay entre los vecinos”.
Sostuvo que es “inconcebible que Obras Sanitarias trabaje sobre planos que no son fidedignos o están desactualizados, y que Camuzzi no sepa dónde está la llave de corte de gas”.
“Si vas por caminos en el campo, donde pasan caños que vienen de los gasoductos, en el medio de la nada hay un corralito con un cartel, una llave de paso, dicen peligro, gasoducto. Acá en zona urbana no hay nada”, cuestionó.
Y argumentó que “Obras Sanitarias debiera estar informado si hay algún caño en el lugar que va a trabajar y debiera ser una prioridad absoluta que estuviera marcado dónde está la llave de gas para cortar, por la peligrosidad que reviste”.
“Si eso hubiera ocurrido con casas alrededor o dentro del barrio, o en la mano de enfrente que hay un monte de eucaliptos bastante alto, podría haber sido un verdadero desastre”, señaló.
“A las 24 recién Camuzzi pudo controlar la situación, cortar el gas y reparar. Yo justo no estaba, hay un baldío en la esquina y el siguiente vecino que podría haber sido el más perjudicado no estaba. No hay gente que viva justo donde estaban las llamaradas. Se quemaron los cables de teléfono, internet y han sido reparados en un tramo”, indicó.
Y sostuvo que “es algo que se nos escapó a todos los vecinos porque no hace tantos años que tenemos gas. Diez años como máximo. Y no se me ocurrió que en ningún lugar está marcado donde están las válvulas de corte”. u
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