Docentes cuestionan que el gobierno quiere “poner techo” a las paritarias
Docentes bonaerenses
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criticaron ayer que el gobierno provincial busca “poner un techo a
las paritarias” y subrayaron que esperan recibir en los próximos
días una “propuesta viable”.
A tres semanas del inicio de las clases, los maestros no llegaron a un acuerdo con la administración macrista y el viernes
se volverán a reunir para intentar acercar posiciones, que hasta
el momento están alejadas ya que los gremios pretenden subas de un
40%, mientras la última oferta fue del 23,6%.
El secretario general del Sindicato Unificado de Trabajadores
de la Educación (SUTEBA) Rodolfo Baradel, criticó: “Por un lado,
dicen que no quieren poner un techo a las paritarias, pero
después nos dicen que el aumento no puede superar el 25%.
Entonces, sí le quieren poner un techo”.
“Eso es un error. Es una estrategia para enfriar la economía,
que tiene como consecuencia caída de consumo, freno de
producción, suspensiones y despidos en la actividad privada. En
realidad, es algo que ya está pasando”, alertó el gremialista.
Por ello, consideró: “Se contradicen con lo que han planteado
públicamente en cuanto a priorizar a la educación”, mientras
sostuvo: “Aspiro a que el viernes próximo haya un cambio de
parecer en las autoridades provinciales”.
En declaraciones a radio Rivadavia, el jefe del SUTEBA confió
en que esta semana el Gobierno de María Eugenia Vidal “haga
una propuesta viable”.
A su criterio, el Gobierno “tiene que darle a los trabajadores
la posibilidad de recuperar lo que se perdió” del salario.
“Nos han hecho una propuesta del 23,6% que es insuficiente e
inconsistente. Nos han ofrecido 234 pesos retroactivos a enero y
200 pesos más en marzo. Y recién en agosto 610 pesos más y la
modificación de algunos plus, que llevaría el básico de maestro
de grado a 9 mil pesos”, subrayó.
“Con el aumento de tarifas y con la suba de precios, este
porcentaje queda superado. Entonces, pedimos al gobierno que el
aumento lo queremos ahora, para recuperar poder adquisitivo, y
que en mayo y junio volvamos a negociar”, enfatizó.
Por su parte, el secretario general de la Unión de Docentes
de la provincia de Buenos Aires (UDocBA), Miguel Díaz, en
declaraciones radiales, evaluó: “Hay muchas cosas por discutir”.
“El jueves próximo esperemos que cierren las paritarias en
Ciudad, mientras el viernes se retoman en la provincia, cuando
escucharemos una nueva oferta”, señaló.
El sindicalista puntualizó: “En la Ciudad de Buenos Aires los
gremios están pidiendo entre 11 y 12 mil pesos. El mismo salario
que nosotros en la provincia. Es una cifra racional y evitaría
conflictos durante todo el año”.
“Nosotros rechazamos la oferta. Es un 21% sobre un salario de
7 mil pesos, llegando a 9 mil pesos recién en agosto. Es
inaceptable”, indicó el sindicalista.
“Cifras por fuera de la realidad”
El secretario general de la
Central de Trabajadores Argentinos (CTA), Hugo Yasky, aseguró ayer
que no negociará “cifras por fuera de la realidad” en las
paritarias.
Así lo sostuvo luego de que el ministro del Interior, Rogelio
Frigerio, ratificara la expectativa inflacionaria de un 25% e
insistiera en que el Gobierno no iba a poner “techo” a las
negociaciones salariales.
Yasky salió al cruce y consideró: “La cifra del 25% que el
Gobierno quiere vendernos no sé de dónde la saca porque ninguna
consultora la tiene”.
“Hoy hay una inflación que hace estragos”, cuestionó el
gremialista, en diálogo con Radio 10.
Frigerio había garantizado, además, la voluntad del Gobierno
para llevar a cabo una revisión en las paritarias, si la
expectativa indicada por el ministro de Hacienda y Finanzas,
Alfonso de Prat Gay no se cumple en unos meses.
“Si nosotros vemos que, pasada la mitad del año, no llegamos a
esta pauta del 25%, tenemos que revisar la paritaria porque no
queremos que haya una pérdida del poder de compra del salario”,
resaltó el funcionario.
Yasky, por su parte, evaluó que “es razonable pensar en una
paritaria de seis meses y luego una reapertura”, aunque aclaró
que ello se debe llevar a cabo con “un compromiso de discutir
salarios razonables”.
El gremialista también se refirió a la suba del mínimo no
imponible del impuesto a las Ganancias que el Gobierno anunciaría
en las próximas semanas y analizó: “Para gremios numerosos, que no
tienen grandes porcentajes de asalariados que pagan el impuesto,
ese tributo no tiene mucha significación”.
Es que el Gobierno pretende que los sindicatos bajen las
cifras en las negociaciones salariales por la modificación del
piso de Ganancias, lo cual fue parte de la promesa de campaña del
macrismo.
“Queremos que se tomen en cuenta los esfuerzos fiscales que
hace este gobierno”, había destacado Prat Gay.
Mientras tanto, el presidente Mauricio Macri se prepara para
recibir esta semana a los referentes de distintos sectores
de la CGT con la idea de contener las demandas salariales.
En ese marco, algunos sindicatos, con posturas más duras,
incrementan la presión contra el Gobierno, como ATE, Camioneros y
Bancarios, que ya comenzaron a implementar medidas de fuerza por
los despidos tanto en el sector público como privado.
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