Edu Schmidt estuvo en Tandil con su Fábrica de Canciones
Recibí las noticias en tu email
El cantante, compositor y violinista de rock argentino, editó con la agrupación cinco discos. Es reconocido por haber sido líder de la agrupación Arbol. Tras su salida de la banda a comienzos a principio de 2006 emprendió su carrera como solista, con lo que lleva editados dos materiales grabados de forma independiente. Además de cantante, es también multi instrumentista, productor artístico, compositor de música incidental, arreglador, pedagogo y actor. Estuvo en el Centro Polivalente de Arte dando una clínica a los alumnos de sexto año con orientación musical en el marco de su proyecto Fábrica de canciones.
Alumnos súper creativos
La vicedirectora de la institución Silvana Castro habló con El Eco Multimedios acerca de la presencia del músico en la ciudad: “Estamos felices. Esto surgió el año pasado y por otras causas no lo pudimos hacer. Es la primera escuela que visita Edu este año con su proyecto que se llama Fábrica de Canciones en la Dirección artística y recorre diferentes escuelas. Y nosotros que somos una escuela especializada en arte se ha encontrado con un grupo súper creativo: chicos de sexto año, especialidad música y también con cuarto y quinto año de música. Por la tarde se hizo el armado de sonido y la presentación de las producciones”, comenzó contando Silvana.
“El tiene una llegada muy importante a los chicos porque habla su mismo idioma en cuanto a las temáticas de las canciones. No solamente les enseñó toda la parte de composición, letra y música sino que les habló de la llegada al público. Y es muy rico que nos cuente su experiencia. El ha tenido una gran trayectoria, ahora está como solista y ha lanzado un disco hace poco. La experiencia de encontrarse con este artista en vivo es impagable”, finalizó Castro.
“Quiero muchos músicos”
Por su parte Edu se mostró contento: “Esta idea que tenía desde hace varios años, felizmente hace dos que la vengo desarrollando en las escuelas de toda la provincia. Es medio complicado pero muy contento porque es un espacio para que los pibes hablen, un taller que habla de que todo porque siempre tenemos algo para decir y la posibilidad de decirlo”.
-¿La experiencia trata de cómo se le pone música a lo que se dice?
-Sí y también tenemos la presión de que en tres horas hay que hacer una canción, es un poco demostrarnos a ambos que se puede. El año pasado estaba preparando un disco mío y llegué a mi casa y estaba enroscado porque no tenía un estribillo y decía: ¡vengo de una escuela donde hice dos temas en ocho horas! En nuestras vidas se complica hablar, es como que con nuestras familias, parejas, amigos a veces se nos quedan cosas atragantadas y este espacio es para aprender a soltar lo que uno quiere decir.
-Y estos son chicos muy creativos…
-Porque por ahora lo estoy haciendo en escuelas orientadas al arte, la música les interesa. El año pasado me llevé una sorpresa rara en una escuela de Mar del Plata, unos pibes que eran unos genios musicalmente y me atreví a decirles: el año que viene los voy a escuchar con su banda. Me respondieron que estudiarían abogacía, ingeniería… entonces como que es una lástima que no se aproveche el talento. Entonces si desde mi incentivo logro que termine alguno siendo músico, no porque abogado o ingeniero esté mal, podríamos romper con el prejuicio de que al músico no le alcanza para vivir o esas cosas que son mentiras. De modo que mi interés es hacer músicos por toda la provincia.
Este contenido no está abierto a comentarios