El vivo vive del sonso…
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Accedé a las últimas noticias desde tu email El vivo vive del sonso y el sonso de su trabajo. Si el vivo no tiene la viveza de cuidar al sonso, no puede cumplir con sus funciones vitales fisiológicas; desde el desayuno hasta la cena, no tiene con que satisfacer sus requerimientos alimenticios.
Quien siembra, cosecha, acarrea y arriesga, dependemos del clima: el sonso. En este país el sonso vive en el campo y su entorno. Produce el 40 por ciento de las riquezas que el vivo trata de redistribuir entre obsecuentes. El propietario de la tierra que vive en ella, es un ser comprensible porque está dominado por la naturaleza y sus avatares.
El éxito del vivo es efímero, la gloria es eterna. Esa gloria quiero para nuestro país, nuestra tierra, que será, si nos dejan trabajar.
Carlos B. Leeson
L.E. 5.347.465
Sobre el autor
Más de 142 años escribiendo la historia de TandilEste contenido no está abierto a comentarios