Elichiribehety renegó de la alianza con el PRO y dijo que la UCR deberá “mantener su identidad”
El ex secretario de Desarrollo Social y responsable de las campañas electorales del radicalismo en Tandil, Julio Elichiribehety, analizó la actualidad política nacional, provincial y local y el acuerdo con el PRO de Mauricio Macri. En ese marco sostuvo que la coalición Cambiemos “no fue con un acuerdo previo” sino que se trató de una “alianza electoral” y puso el foco en los “rebotes negativos” que podrían tener las decisiones en los gobiernos locales.
En diálogo con El Eco Multimedios aseguró que independientemente de las diferencias el radicalismo “es parte de un frente común y en él seguirá trabajando”.
En ese esquema opinó que el desafío de la UCR será “mantener su identidad” y ser la “luz de alarma frente a determinadas situaciones del PRO que no nos gusten”.
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“Tensiones y turbulencias”
Como invitado del espacio del desayuno, en el ciclo televisivo “Tandil despierta” (Eco TV), Elichiribehety compartió un primer análisis general al señalar que “se está viviendo una situación con algunas tensiones y turbulencias; una elección en la que un porcentaje de la comunidad importante votó alternativas determinadas no por convencimiento sino en una postura de oposición”.
Esta circunstancia conforma un escenario particular en función de un porcentaje que no resulta menor, alrededor del 25 por ciento que eligió “en contra de” un determinado modelo. Y en ese sentido consideró que se generó una situación de tensión que aún continúa y que “no escapa a los gobiernos locales”.
Recordó la postura que llevó el radicalismo local a la convención de Gualeguaychú, que apuntó a continuar en el Frente Amplio Unen (Socialismo y GEN), la cual finalmente quedó desestimada al imponerse por mayoría el acuerdo que gestó la alianza Cambiemos. “La situación con el PRO es de extrema complejidad a nivel nacional”, y en la que además “tenemos dificultades para saber cuál es el rol como partido político”.
En su repaso del contexto el ex funcionario aseguró que este esquema se traslada a los gobiernos municipales “sin ninguna duda” y aclaró que en el caso del Gobierno local, que integra la alianza con el macrismo, “obviamente también sos copartícipe de los rebotes que se producen a nivel nacional y provincial y eso conforma un nuevo escenario”.
Y expuso que si bien establece un camino “mucho más directo” también genera “rebotes negativos desde el colectivo social”, en especial “porque no hubo un trabajo programático con el PRO”, sino que fue “meramente una alianza electoral”.
Además renegó de la “muy escasa” participación en el Gobierno nacional y provincial del radicalismo, un partido que “tiene representación territorial en toda la Argentina”, replicó.
“Un gobierno de transformación”
En otro pasaje de la entrevista se refirió a la compleja situación económica que atraviesa la administración local y reconoció que el Gobierno local que “vive algunas turbulencias” producto de la situación de la Provincia, gobernada por el peronismo durante 28 años, pero también “es cierto que ha sido ratificado con el 57 por ciento de los votos y tiene un pasado para exhibir de 12 años de transformaciones”.
“El gobierno de Lunghi es bastante más que un modelo de gestión, es de transformación”, enfatizó y marcó, con vistas al bicentenario de la ciudad, que “Miguel es el intendente que más años ha gobernado democráticamente en los 200 años de Tandil”.
En efecto, remarcó que frente a situaciones pasajeras de turbulencias, que no son ajenas a otros distritos y responden a una realidad provincial y nacional, “este Gobierno tiene mucho para mirar hacia adelante y para exhibir hacia atrás”.
El “error” del acampe
El planteo abrió el análisis hacia el reclamo salarial que encabeza el Sindicato de Trabajadores Municipales de Tandil, que derivó en un paro progresivo de actividades, suspendido después por el dictado de la conciliación obligatoria, y en un acampe frente a la sede de gobierno en vísperas a Semana Santa.
Calificó a la última parte de la protesta, que se endureció el viernes tras la llegada de la procesión al Santísimo Sacramento, como un “error gravísimo”, que además “no aporta al diálogo y aleja”, por lo que sugirió “mesura y equilibrio”.
“La dirigencia política, sindical y judicial debe transmitir mensajes de cordura y diálogo sobre todo en esta época”, resaltó, independientemente de las políticas que impulse quien gobierna.
En esa línea ratificó: “No soy del PRO ni tengo afinidad con el PRO” y agregó que “hubiera preferido un acuerdo con Unen”.
A propósito de las manifestaciones también analizó a la medida impulsada por la agrupación I de Octubre, liderada por Griselda Altamirano y Jorge Lezica, en pos de recuperar los alimentos que el Municipio otorgaba para el cumplimiento de programas sociales. “Me parece bien que se haya resuelto el tema”, opinó.
Y sobre la toma de terrenos en cerro El Granito, en Villa Cordobita, defendió la postura adoptada por la comuna: “el Municipio hizo el camino de la Justicia, que era lo que correspondía”, en relación a la denuncia por desalojo impuesta oportunamente. u
El ex secretario no visualiza un retorno a la gestión
En el cierre de la extensa entrevista televisiva Elichiribehety repasó cuestiones vinculadas al escenario político que se viene en relación a las elecciones legislativas del año entrante, que dará un parámetro con vistas a las generales de 2019.
También se refirió a la oposición en la ciudad, la cual cumplió un rol “obstruccionista”, es decir, “no sé de qué se trata pero me opongo”, durante una parte de la gestión de Miguel Lunghi, perfil que “no se da tanto en los últimos tiempos”.
Para finalizar, y frente a un eventual regreso al gabinete, expresó: “Tengo por Miguel un enorme reconocimiento y afecto. No me ha ofrecido (un cargo en su equipo de gestión) y tampoco visualizo un retorno”. u
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