Falleció la niña que sufrió un accidente
A pesar del esfuerzo de los facultativos y el rezo de los familiares y allegados, nada se pudo hacer para evitar lo que se presentaba médicamente como un cuadro irreversible. Ayer a la tarde se confirmó el deceso de la pequeña que iba con su padre en moto, cuando chocó en Aeronáutica Argentina, entre Labarden y Casacuberta.
A pesar de los esfuerzos de los facultativos, ayer por la tarde la niña Juana García, que se encontraba internada en el área de terapia intensiva del Hospital Materno Infantil Tetamanti de Mar del Plata falleció, según confirmaron con consternación los familiares de la víctima.
Recibí las noticias en tu email
Al cierre de esta edición, la policía también se anoticiaba del triste deceso, en lo que se presentaba como un cuadro irreversible frente a las heridas que presentaba y la fuerza espiritual que familiares y comunidad toda se unió en pos de brindar esperanzas para lo que se aguardaba por un milagro
Como se había detallado en la edición pasada, la mamá de la niña, Valeria Conforti se encontraba desde el sábado, junto a su hija en el Hospital Tetamanti de Mar del Plata, mientras que desde aquí la familia llevaba adelante una colecta para ayudarlas. Anoche, esa misma madre desgarrada junto a allegados recibía la indeseable confirmación de los médicos, para luego realizar los pasos burocráticos de rigor en el centro asistencial para oficiar el traslado del cuerpo.
La niña había sido trasladada de urgencia a Mar del Plata, el último sábado, dos horas después del choque, debido a la gravedad de las lesiones y a la imposibilidad de darle tratamiento al diagnóstico de fractura de cráneo con hematoma subdural.
Ya en el centro asistencial, la nena tuvo dos paros (cardiorrespiratorios) y no pudieron operarla, por lo que los médicos seguían de cerca su evolución antes de decidir avanzar con la intervención quirúrgica. “Ahora hay que esperar, si sigue teniendo esa pequeña evolución, puede que la operen. Es todo muy crítico. Hay que ir paso a paso”, habían expresado con angustia para lo que lamentablemente no pudo suceder frente al delicado cuadro que presentaba.
El accidente
Según confió la tía de la víctima, Érica Cordero en declaraciones a este Diario, el sábado el padre retiró a Juana y a su hermano de 5 años de la casa de la mamá, para asistir a la fiesta de cumpleaños que le habían organizado en una quinta ubicada en la zona de la rotonda de la Curva de Marchini.
“Él los había ido a buscar porque hacía unos días había sido el cumpleaños y lo iban a festejar”, relató y afirmó que no se los llevó en moto de la casa de su hermana.
En cuanto a las circunstancias del choque, detalló que “él está en pareja, obviamente cada uno tiene derecho a hacer su vida. Había ido a llevar a su novia a la parada del colectivo rojo, en Estrada, y como no venía el micro, decidió llevarla hasta la casa. Cuando la dejó a ella, la pasa a Juana adelante, y ahí es cuando ocurre el accidente”.
La tía indicó que el padre cruzó la ciudad con su nena en la moto y sin casco.
El incidente vial ocurrió en Aeronáutica Argentina, entre Labarden y Casacuberta. Impactaron una moto Zanella Sapucai, con patente 153JYQ, y un Renault Symbol, dominio KPX486, afectado a la agencia de Remis Tandil, que circulaban en el mismo sentido.
Según trascendió, la moto habría intentado sobrepasar al automóvil, maniobra en la que chocó por alcance al Renault.
El conductor de la moto, Juan Alberto García de 24 años, y su hija Juana García, de 3, cayeron contra la acera y debieron ser trasladados al Hospital Ramón Santamarina.
De acuerdo al primer parte médico, el paciente adulto presentó traumatismo encefalocraneano y politraumatismos en miembros, además de pérdida de conocimiento, por lo que fue asistido en Servicio de Emergencias. En tanto, la menor presentó una fractura de cráneo con hematoma subdural, cuadro que determinó su traslado urgente a Mar del Plata.
En tanto, el remisero Sergio Marcelo Maugere resultó ileso, pero al momento del accidente también fue trasladado al nosocomio local por entrar en estado de shock ante la magnitud de las lesiones, principalmente de la niña.