Homenajearon a los picapedreros montenegrinos en Cerro Leones
Ayer, en horas de la tarde, se llevó adelante un acto para homenajear a los picapedreros montenegrinos que se radicaron en su momento en Tandil. El encuentro se concretó en la Plaza de la Democracia de Cerro Leones, ya que en ese barrio se instalaron en su momento muchas familias provenientes del país europeo y se desempeñaron laboralmente en las canteras.
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Estuvieron presentes en el acto el embajador de Montenegro en Argentina, Brasil y Chile, Gordan Stojovich, el consejero de la embajada de Montenegro, Miljan Mugosa, y el cónsul honorario de Montenegro en la provincia, Juan Carlos Lakovich.
También participaron del encuentro la presidenta de la colectividad montenegrina de Tandil, Karina Orahovac, el director de la Escuela Secundaria 16 de Cerro Leones Federico Martínez, la directora de la Primaria 4 Alejandra Kluga, el intendente Miguel Lunghi, el jefe de Gabinete Marcos Nicolini, la subsecretaria de coordinación Florencia Benavente, la coordinadora del área de Vinculaciones Internacionales Marcela Petrantonio, el presidente de la Unión de Colectividades Silvio Battaia, concejales y consejeros escolares.
Los primeros montenegrinos comenzaron a migrar desde el sur y zonas costeras en la primera mitad del siglo XIX y en la actualidad se estima que hay 50 mil descendientes en nuestro país. En Tandil, el 6 de noviembre de 2013 se formó la colectividad montenegrina.
El acto
Alrededor de las 15 se congregaron las autoridades municipales y educativas, además de varias familias de la zona en la Plaza de la Democracia.
En primer lugar, se cantaron los himnos de Montenegro y el nacional, para luego dar lugar a los discursos.
El primero en tomar la palabra fue el Intendente, quien afirmó que “hoy para nosotros es un día de memoria y reconocimiento. Somos una hoja más de ese gran árbol del inmigrante con el que se formó nuestro país y nuestra comunidad tandilense”.
“La pujante colonia que formaron los montenegrinos en Tandil se sumó a lo que se llamó nuestro crisol de razas. Llegaron a Tandil en la última década del siglo XIX, y primera del siglo XX y en su gran mayoría se incorporaron a las canteras. Fueron extraordinarios picapedreros, que hicieron de esa cultura laboral una verdadera epopeya en la cantera de Cerro Leones, como en otras de la ciudad”, subrayó.
Y destacó que su identidad estuvo basada en el trabajo. “Fueron gente de laburo y de trabajo duro, de sol a sol, de ponerle el cuerpo a la piedra en Tandil como le pusieron el cuerpo al mar y la pesca en otras colonias montenegrinas de la Argentina”.
“De ese trabajo duro y crudo en las canteras hicieron algo mágico. Con una labor completamente artesanal, transformaron al granito de nuestras sierras en una pequeña obra maestra. Fueron los que hicieron lo que hemos dado en llamar ‘el mundo de las canteras’”, remarcó.
Luego, Lunghi le hizo entrega de un cuchillo al embajador, que le devolvió la atención con un vino.
Recuperar la historia
A continuación, el director de la Escuela Secundaria 16, Federico Martínez, destacó la “recuperación de la historia” y a partir de eso “crear pertenencia”.
“A partir de hoy queremos empezar a trabajar con una posibilidad de apertura a la historia, a las raíces. Estuve hablando con el embajador y parte de la comitiva, personas muy simples, con idea de hacer pie en Tandil importante”, explicó.
Pioneros desconocidos
La presidente de la colectividad montenegrina en Tandil, Karina Orahovac, manifestó que “hoy pensé en ese ejército de inmigrantes avanzando hacia una nueva vida. Este día es un homenaje a estos pioneros desconocidos, a aquellos montenegrinos que al igual que tantos inmigrantes se lanzaron a poblar las ricas tierras de Argentina, dejando atrás su aldea querida y muchas veces a su familia”.
“Pensé en nuestros inmigrantes que se ensamblaron en el nudo vital del pueblo de Tandil, dándole color, contenido y fuerza, que llevaron una vida agitada llena de esfuerzos con el que amasaron su pan. A ellos, a mis abuelos, a los abuelos de todos, esos hombres humildes y a su vez orgullosos obreros de la piedra, a nuestros antiguos picapedreros, va este modesto homenaje. Festejo en este día los ideales con los que vivieron en estas tierras generosas en el seno de un macizo de piedra, Tandil, Cerro Leones y sus canteras”, sostuvo.
Finalmente, deseó que “los gobiernos que Dios depare a mi patria recojan el guante arrojado por el más humilde de los inmigrantes, que sus hijos y descendientes templen la gran raza del mañana, y que vivan en las próximas generaciones las tradiciones y costumbres legadas de aquella tierra lejana de Montenegro”.
“Como en casa”
Por último, dirigió sus palabras al público el embajador Gordan Stojovic, quien sostuvo que “es un gran honor estar nuevamente en Tandil, ya en ocasión de mi primera visita a la ciudad durante la filmación de la serie ´Montenegrinos en América Latina´, nos encontramos con la agradable y cálida recepción brindada por el Intendente municipal y otros funcionarios. Hoy hemos sido recibidos con la misma cordialidad. Por eso realmente me siento como en casa. Este es un importante momento para las relaciones entre nuestros países”.
“Montenegro es conocido como el mar de piedra, en el pasado todas las casas eran de piedra y aún hoy con frecuencia se siguen construyendo de ese modo. No es casual que muchos de los primeros montenegrinos que viajaron a Argentina, muchos de ellos hayan llegado justamente a Tandil a trabajar en las canteras, continuando con la tradición familiar traída desde la tierra de sus ancestros”, sostuvo.
En tanto, en nombre de su país natal expresó un “profundo y sincero agradecimiento por este maravilloso gesto en la memoria de nuestros compatriotas. Que esta placa constituya un homenaje permanente en memoria de todos aquellos que con su trabajo contribuyeron a hacer aún más poderoso a este hermoso país”.
Luego de que las autoridades descubrieron una placa en homenaje a los montenegrinos por su aporte al desarrollo de Tandil, se proyectó un video en el interior de la Escuela Secundaria 16 y el público presente pudo degustar pastelería artesanal típica.
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