Hoy, Mano a mano con Humberto Atilio Espinosa
Tandilense y de profesión “muñeco”, Humberto Atilio Espinosa pasó por infinidad de oficios para subsistir. Supo ganarse la vida como cantante de tangos -la mayoría de su autoría- en diversos bares del Conurbano bonaerense. También trabajó como mozo y durante algunos meses unió estos dos oficios creando lo que él denominó servicio de “CantaMarero”, hasta que fue despedido. En busca de un público que no lo conozca y con ganas de hacer la “Gran San Martín” (textuales palabras), cruzó a dedo la cordillera desde Mendoza y así arribó al país vecino.
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En mayo del año pasado conoció a Eugenio Deoseffe. “Fue en Valparaíso, mientras cantaba unos tangos en el Jota Cruz, un legendario bar. El me propuso trabajar en su espectáculo. Al principio pensé que era una broma que él quisiera que yo trabaje haciendo teatro para niños, pero luego me explicó que era un show para toda la familia y que quería que haga la presentación”. Desde esa misma noche, Humberto se incorporó a la compañía de muñecos Lupa que Deoseffe dirige. “Para mi sorpresa, la respuesta de los pequeños es muy buena. Hasta me piden fotos con ellos al salir. Empecé presentando, ahora hago un número también. Y pronto estrenaré algo para adultos”.
Luego de su incorporación al elenco comenzaron los viajes. En lo que va de 2016 ya visitaron seis países juntos. “Además de Argentina y Chile, estuvimos en Colombia, Ecuador, Cuba y México. Aunque Deoseffe no lo quiera reconocer, le salvé las papas. Antes de que yo llegara no conocía ni Mar del Plata”.
Humberto es parte de Lupa, Mundos para Mirar de Cerca. Y este espectáculo para toda la familia, a su vez es parte de La Bufanda, el tercer Ciclo de Espectáculos para Chicos que estará todas las vacaciones de invierno en El Club de Teatro y La Fábrica. En un alto de los ensayos, Humberto se prestó al juego y respondió el cuestionario de El Eco de Tandil.
1) El mejor café: El que se comparte con amigos o algún amor.
2) El mejor consejo que le han dado: Hay que desensillar hasta que aclare.
3) La banda de sonido de una película: Buscando a Rodríguez.
4) La reunión ideal: Con amigos. Y una picada con muchos platitos. Calentitos y fríos.
5) Tiempo perdido: La cola del banco. La cola del supermercado. La cola de la jubilación.
6) Tiempo valioso: Los viajes.
7) Un actor: Julio Lester.
8) Un amigo: Hipólito.
9) Un amor: Magdalena.
10) Un animal: El Caballo.
11) Un artista plástico: Natacha Belova.
12) Un auto: El Citroën 3CV.
13) Un color: El verde.
14) Un conductor de televisión: Cacho Fontana.
15) Un disco: Los elegidos de Zumuva Tropical.
16) Un enemigo: El casino.
17) Un escritor: José Hernández.
18) Un ideal: La dignidad.
19) Un juego o juguete: Un muñeco.
20) Un legado: La mente abierta.
21) Un libro: El Martín Fierro.
22) Un lugar: Tandil.
23) Un proyecto: Viajar a algún lugar en donde no entienda nada lo que digan.
24) Un recuerdo: Mis amigos del laboratorio.
25) Un referente: Patch Adams
26) Un sabor: Una buena empanada de carne.
27) Un sueño: Recorrer el mundo.
28) Un viaje: Adonde sea. ¡Vamos!
29) Una actriz: Isabel Sarli.
30) Una banda extranjera: Celso Piña.
31) Una banda nacional: Los Palmeras.
32) Una bebida: Fernet con Soda.
33) Una cábala: Hablarle al titiritero antes de salir.
34) Una canción: “Infancia”. Un tango mío. Y “Por una cabeza”. Sino van a decir que me hago propaganda.
35) Una causa: La Risa.
36) Una cuenta pendiente: El trapecio.
37) Una época: Esta.
38) Una estación: El verano (si se puede pedir, en la playa)
39) Una fecha: 12/12/12. No pasó nada.
40) Una flor: Mi vecina.
41) Una fragancia: Palo Santo.
42) Una fruta: La Mandarina (si le dio la helada mejor)
43) Una obligación: Peinarme.
44) Una obra de teatro: Gringo Golondro.
45) Una película: Laberinto.
46) Una posibilidad: Teñirme el pelo de rubio.
47) Una pregunta: ¿Quién maneja a quién?
48) Una prenda de vestir: La corbata.
49) Una tradición: El fernet de Horacio en el Boca.
50) Una utopía: Un mundo con más muñecos y menos violencia.
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