La Justicia declaró al asesinato de un militar como crimen de lesa humanidad
La determinación, adoptada por el juez federal de Rosario Marcelo Bailaque, ratificó un dictamen del fiscal General Claudio Palacín, y volvió a instalar el debate sobre los secuestros y asesinatos perpetrados por organizaciones terroristas durante la década del `70.
Esta decisión judicial contrasta con la adoptada por la Cámara Federal porteña, que el año pasado confirmó que los delitos cometidos por la agrupación “Montoneros” en la misma época que actuó el ERP no podían ser catalogados como de lesa humanidad.
Por esa razón, esos juicios prescribieron y fue sobreseído uno de los principales líderes de Montoneros, Mario Firmenich, además de Marcelo Kurlat, Horacio Verbitsky, Laura Silvia Sofovich, Miguel Lauletta, Norberto Habegger y Lila Pastoriza.
En esa oportunidad, la Cámara citó jurisprudencia del derecho penal internacional y de la Corte Suprema, donde se establece que los crímenes de lesa humanidad “son cometidos por agente estatal en ejecución de acción gubernamental o por un grupo con capacidad de ejercer un dominio y ejecución análogos al estatal”.
Sin embargo, para el fiscal Palacín, “la violación de los derechos humanos de Larrabure tuvo lugar en ocasión de un conflicto armado, conforme los lineamientos de la jurisprudencia internacional”.
Agregó que “el desarrollo de las organizaciones guerrilleras en la Argentina escapa a tipificaciones simplistas; el ERP-PRT no era una fuerza progresista, sino una organización revolucionaria que pretendía instaurar una sociedad marxista a través de una guerra revolucionaria”.
“Sus ataques fueron sistemáticos, pues estuvieron organizados de acuerdo con una política y un plan nítidamente delineados”, enfatizó Palacín. La causa había sido iniciada por Arturo Larrabure, hijo del militar, quien en las últimas horas también denunció que las personas acusadas por el crimen de su padre son homenajeadas en el Parque de la Memoria, emplazado en la Ciudad de Buenos Aires.
En el expediente radicado en Rosario se indicó que Larrabure fue secuestrado por el ERP y que fue mantenido en cautiverio por 372 días, lapso durante el cual habría sido sometido a torturas y luego ahorcado. Según consideró el hijo de Larrabure, la presencia de los nombres de integrantes del ERP que participaron del secuestro en el monumento emplazado sobre la costanera de la Capital Federal significa una “falta de Justicia”.
“Es una falta de justicia que los terroristas tengan un monumento; pero es lo que estamos viviendo”, afirmó Arturo Larrabure, quien denunció que en el monumento figuran los nombres de Amorosa Brunet de González, sus hijas Ruth y Estrella y Héctor Vitantonio.
Según publicó un matutino porteño, esos militantes del ERP fueron señalados como carceleros de Larrabure cuando fue secuestrado por esa organización.
También figuran en el monumento los nombres de Eugenio Pettigiani, quien para la Justicia fue el entregador que facilitó al ERP la toma de la fábrica militar de Villa María, donde fue secuestrado el militar.
Recibí las noticias en tu email
Este contenido no está abierto a comentarios