La UOM central pedirá el “empoderamiento” de Cinpal para que continúe en manos de los obreros
En medio de las promesas incumplidas, la UOM y los 24 operarios de Cinpal volvieron ayer a cortar el acceso vehicular al Parque Industrial. “No nos queda otra”, había dicho temprano por la mañana el secretario general del gremio Carlos Romano, para justificar la acción. Mientras transcurrían horas decisivas en torno al conflicto, la medida de fuerza concluyó alrededor de las 16 ante el retiro voluntario de los trabajadores.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailEn paralelo al desarrollo del esquema local, en las instalaciones del Ministerio de Trabajo de Nación, en Capital Federal, las partes involucradas se dieron cita para cerrar las actuaciones iniciadas a partir de la primera audiencia, que se celebró a comienzo de este mes.
El acta que resultó de aquel encuentro, a la que tuvo acceso este Diario, marcó el inicio de un nuevo capítulo que buscará que la fábrica quede en manos de los trabajadores, en el marco de un proceso que se desencadenó ante el incumplimiento de pago de los salarios desde junio más aguinaldos a los cerca de 40 empleados ante la decisión de la firma de suspender la actividad.
Por un lado el escrito establece que la entidad sindical denunció el incumplimiento del compromiso de pago por parte de los representantes de la firma, situación que coloca a los trabajadores en un estado de “abandono de persona” y que “en pos de mantener la fuente de trabajo la asamblea y la entidad gremial han decidido organizarse jurídicamente para continuar con la explotación del establecimiento”.
Por lo cual, en primer término “se formularán las denuncias penales por delitos tributarios, por delitos al fisco, y por abandono de persona, en la titularidad de los trabajadores o sus familiares”.
En tanto, la organización sindical impulsará ante los organismos correspondientes “el desapoderamiento y confiscación del establecimiento para poder continuar en mano de los trabajadores con la faceta productiva”, reza el documento que se rubricó ayer por la tarde.
La decisión
de la central
Ante la novedad, El Eco de Tandil contactó a Carlos Romano, quien confirmó la determinación al señalar que “la UOM se va a hacer cargo de la empresa con un proyecto nuevo”, para lo cual “se va a pedir su empoderamiento”.
La decisión se tomó no solo ante la falta de solución del conflicto sino en función de la importancia de la planta en cuanto a su perfil y capacidad productiva.
“Lo habíamos hablado con los abogados del secretariado nacional y se tomó esta determinación. Hoy (por ayer) se lo comuniqué a los trabajadores. De cualquier manera tienen la otra vida, la demanda civil, en caso que no quieran trabajar”, resumió el dirigente.
En ese tren, Romano ratificó ayer la denuncia por “evasión simple” ante la Justicia penal que presentó semanas atrás bajo el asesoramiento legal de Gustavo Ballent, y con el respaldo de Mauricio D’Alessandro.
El bloqueo al
Parque Industrial
La extensa jornada comenzó alrededor de las 6 con una medida de fuerza que inicialmente se planteó por tiempo indeterminado ante el hartazgo por los reiterados incumplimientos a los compromisos asumidos.
Así lo aseguró el dirigente gremial acompañado por los trabajadores en medio de la humareda negra, producto de la combustión de los neumáticos que ardían desde la mañana temprano.
El escenario en el Parque Industrial volvió a ser desalentador. Es que los operarios, una vez más, estaban esperando que las autoridades de la empresa efectivizaran el pago del dinero que les adeudan, tal como se habían comprometido este martes en la audiencia mantenida en las instalaciones del Ministerio de Trabajo de Nación, en Capital Federal.
Allí, se había resuelto un plazo de 24 horas para el pago de los haberes adeudados, situación que finalmente no se concretó y reeditó el conflicto.
La escena
Los trabajadores continúan resistiendo, juntos, acompañados por el sindicato de los metalúrgicos, pero agotados de tantas idas y vueltas. “Ni crédito en el celular tengo ya”, comentaba uno de ellos en el marco de la nueva medida de fuerza que estaban llevando adelante.
Junto a él, los compañeros tomaban un mate, vestidos con sus mamelucos gastados ya de tanto andar. A escasos metros suyos, una extensa fila de camiones aguardaba a la vera de la ruta, mientras efectivos policiales custodiaban la escena.
Los operarios, acompañados por la comisión directiva y el cuerpo de delegados del gremio, se organizaron en dos grupos para ocupar ambos accesos al predio.
Si bien bloquearon con gomas el ingreso vehicular, desde el sindicato se aclaró que sí se dejó que los trabajadores que debían ingresar a trabajar lo hicieran a pie. “Las empresas acá están todas trabajando con normalidad”, remarcó Romano.
“Sin salida”
Por su parte, en diálogo con el ciclo radial “Dulce o Amargo” (104.1 Tandil FM), el delegado gremial Jorge Conforti confirmó que estaban a la espera de novedades. Mientras tanto admitió que no les quedó otra que volver a bloquear el acceso de los vehículos al Parque Industrial porque no saben qué más hacer. “No encontramos una salida a esto”, dijo el delegado gremial. “No tenemos nada en contra de ellos, por el contrario, son todos trabajadores”, expresó.
Valoró que inclusive las personas que trabajan en el Parque Industrial los apoyan y entienden por la compleja situación que están pasando.
“Queremos
cobrar”
A más de tres meses de iniciado el conflicto, reconoció entonces que tanto él como el resto de sus compañeros lo único que quieren es cobrar lo que se les debe e irse a sus casas. “Ya está, esto no da para más. Es desgastante”, sostuvo.
Afirmó que “algunos ya no quieren venir más al piquete o estar quemando gomas, quieren estar en su casa y buscar otro trabajo. Queremos irnos a nuestros hogares y dejar de molestar acá, pero queremos lo nuestro”.
En lo personal contó que toda esta situación le trajo problemas con el banco porque tenía que “pagar créditos que había sacado y, al no poder hacerlo, me cobran todos juntos y no tengo de dónde sacar la plata”.
El intento
de desalojo
Por la tarde, todo estaba listo para cumplir con la orden de desalojo ante el incumplimiento de la manda judicial que el Juzgado Civil y Comercial 3 había dispuesto ante la primera protesta.
Lo cierto es que, desatado el conflicto frente a las puertas del PIT, el Ejecutivo insistió con la medida judicial tendiente a garantizar la libre circulación en el lugar, en función de las acciones en trámite que se iniciaron en agosto durante el primer bloqueo.
En aquella oportunidad la Justicia hizo lugar al planteo y ordenó despejar el ingreso, con ciertos apercibimientos ante su incumplimiento, acción que no se hizo efectiva ya que la protesta se levantó en forma voluntaria, incluso ante la intervención del secretariado nacional de la UOM.
Así, en las primeras horas de la mañana de ayer, al configurarse un incumplimiento de la resolución, desde la Secretaría de Legal y Técnica se impulsó una denuncia advirtieron la situación y la resolución del Juzgado fue ratificar la acción, ordenando así el desalojo de la protesta sobre la Ruta 30, frente a las puertas de ingreso al predio.
El intento de desalojo llegó en medio del análisis de una propuesta que el interesado en adquirir la planta presentó a los dirigentes sindicales. Según pudo saber este Diario, el empresario ofreció una suma equivalente a la que el directivo brasileño había comprometido oportunamente para cancelar parte de los sueldos caídos.
El eventual acuerdo contemplaba que, en caso de que Brasil no restituyera el dinero, alrededor de 80 mil dólares, el empresario se llevaba unas 500 tapas de cilindro que se encuentran en la planta.
El ofrecimiento fue aceptado por los trabajadores y cuando las partes se encaminaban a sellar el acuerdo, el empresario advirtió que el dinero estaría disponible recién el 6 de octubre.
“Nos habíamos puesto muy contentos”, confesó uno de los obreros ante la posibilidad de pago.
Concluida la medida los 24 operarios afiliados a la UOM regresaron a la fábrica. Puertas adentro, y con el descontento en aumento por la falta de certezas que persiste desde hace casi cuatro meses, se reunieron en una improvisada asamblea en pos de definir las próximas acciones ante un escenario poco claro.
“Hay gente que la quiere prender fuego la fábrica”, advirtieron como una de las posibles acciones.
icto.
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