?Lo único que nos queda es esperar que Dios se acuerde de él y lo ayude?, dijo el padre de Jano
Adrián Burelle, el padre de Jano, el nene de cuatro años que padece cáncer, explicó que todavía no regresan a Tandil porque están muy preocupados porque Jano desmejoró en este último tiempo, entonces prefieren quedarse en Buenos Aires hasta que lo vean mejor. “Lo único que nos queda es esperar que Dios se acuerde de él y lo ayude”, expresó el padre del pequeño.
“Jano está medio mal, anda complicado, no levanta. No nos vamos para Tandil porque estamos preocupados por el nene y acá tengo el hospital. Estamos en la casa de mi mamá y de mi suegra”, contó Adrián Burelle.
Cabe recordar que la familia de Jano viajó a Cuba para realizarle un tratamiento alternativo para el cáncer con Escozul, que está hecho a base de veneno de escorpión azul, luego de que los médicos oncólogos de Buenos Aires les dijeran que ya no podían hacer más nada. El primer tiempo Jano evolucionaba, pero los últimos días que pasaron en Cuba empezó a desmejorar y desde entonces no lograron que se sintiera bien.
“Está caído, anda con dolor de panza, de cabeza. Ahora le estamos dando una medicina homeopática. Le cuesta tragar y respirar y le salió un tumor por atrás de la oreja. Hasta sin ánimo está”, detalló.
Mientras tanto, Jano continúa con el tratamiento con Escozul y también le están aplicando crotoxina.
“El médico cubano me dice que le siga dando el Escozul. Ellos están experimentando un poco con eso, él es un paciente que está complicado ya desde el principio. Nosotros teníamos la esperanza del Escozul, pero a mí los médicos ya me habían dicho que estaba complicado”, explicó.
Esperar a que
esté mejor
Y agregó que “lo único que nos queda es esperar que Dios se acuerde de él y lo ayude, está en sus manos; si lo va a curar, lo va a curar Dios, la medicina ya con Jano no puede; está muy avanzado el tumor, estamos complicados”.
“Yo tengo ganas de ir a Tandil pero tengo miedo, acá lo están viendo los médicos que le dan la crotoxina, algo para los dolores de panza, de cabeza. Si estoy en Tandil ¿qué hago? Yo quiero estar cerca de la gente que lo atiende, día por medio voy al médico, acá hay muchos tratamientos, muchos casos, allá en Tandil, no”, señaló.
Y aseguró que “hasta que no se mejore un poco no vamos a ir para Tandil, vamos a esperar a que esté mejor, sin dolores; si empieza a mejorar y lo veo bien, nos vamos a Tandil, después si desmejora volveremos, porque queremos estar en nuestra casa, pero no podemos ir hasta que no mejore”. *
Sobre el autor
Más de 142 años escribiendo la historia de TandilEste contenido no está abierto a comentarios