Más de 60 mil argentinos emigraron a España en el último año
La mayoría son jóvenes profesionales altamente calificados, que buscan mejores condiciones laborales y calidad de vida.
Según los registros de la Comunidad de Madrid, en 2024 se registraron más de 60 mil residentes argentinos en la capital de España. En total fueron 60.865 personas, entre hombres y mujeres, lo que significa un salto significativo respecto a los 42.806 que habían emigrado en 2020.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailLos reportes sostienen que la mayoría de los migrantes argentinos son jóvenes profesionales altamente calificados, que buscan mejores condiciones laborales y calidad de vida. Si bien puede ser calificado como una "fuga de cerebros", que representaría una pérdida para el país, desde otro ángulo también se vislumbra como una oportunidad para que los migrantes adquieran experiencias que puedan revertir en beneficios para Argentina en el futuro.
La actual camada migratoria revirtió el ciclo precedente. Tiempo atrás, el país fue receptor de ciudadanos europeos, en especial españoles e italianos, que llegaron en oleadas durante las guerras mundiales y la persecución política y racial en Europa. Actualmente, pasó a ser un emisor de talentos, impulsados por desafíos económicos y sociales.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) español, en Argentina hay 477.465 residentes nacidos en España.
Los argentinos aportaron al mercado laboral europeo su espíritu emprendedor. Varios de ellos han realizado la apertura de restaurantes y cafés que ofrecen sabores latinoamericanos, como así también la creación de startups tecnológicas. Además, dinamizaron las economías locales y enriquecieron la diversidad cultural de las ciudades europeas.
De igual manera, más allá de las estadísticas, el incremento de la presencia de argentinos en Madrid transformó la identidad cultural y económica de la capital española. Quienes emigraron del país se volvieron influyentes aportes de estilo criollo en gastronomía, arte y emprendimiento.
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Ley de nietos en España
Desde que en 2022 se promulgó la ley de memoria democrática, también conocida como “ley de nietos”, el Consulado Español emitió 8.500 documentos que acreditan la nacionalidad de padres o abuelos que “originariamente hubieran sido españoles, y que, como consecuencia de haber sufrido exilio por razones políticas, ideológicas o de creencia o de orientación e identidad sexual, hubieran perdido o renunciado a la nacionalidad española”.
España concedió la nacionalidad por residencia a 221.805 personas extranjeras durante 2024, una cifra un 8,9 % menor que la de 2023 (243.481). Aun así, es el tercer dato más alto de toda la serie histórica desde 2009.
Los datos fueron brindados por el Observatorio Permanente de la Inmigración (OPI) del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Se confirma una tendencia al alza en las concesiones de nacionalidad española que tuvo su punto más alto el año pasado, gracias a una mejora tecnológica en la revisión de expedientes llevada a cabo por Justicia para paliar un atasco histórico en las solicitudes.
El mayor dato alcanzado desde que se tienen registros corresponde a 2013, cuando España reconoció este vínculo jurídico con el país a 261.295 personas. Desde entonces ha habido otros picos como en 2019 o 2021, resultado de algunos planes de choque temporales llevados a cabo por el Gobierno para impulsar las concesiones.
Por origen, la mayoría de las personas son iberoamericanos, región a la que pertenecen los 15 países con más nacionalizados en 2024. Argentina cuenta con 9.165 nacionalizadas.
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La reversa migratoria
Los latinoamericanos se erigieron en los principales inmigrantes, de menor a mayor, desde la guerra fría. El último Censo detectó que, de 1.941.862 extranjeros en Argentina, el 27% son paraguayos, pese a que esa participación cayó tres puntos con respecto a 2010.
De todos modos, Paraguay sigue liderando el ranking de los venidos y quedados. En segundo lugar se ubican los ciudadanos de Bolivia que vinieron al país con un 17,5%, dos puntos porcentuales menos que en 2010. Venezuela se convirtió en el tercer país que más migrantes le aportó a la Argentina en la última década.