Otra vez Lunghi, cómodo, pero sin mayoría
El reconocido consultor Oscar Nigro considera que si las elecciones fueran hoy la reelección del Intendente estaría asegurada, aunque perdería la mayoría. Consejo a la oposición: internas muy competitivas en las paso
por Guillermo Gentile
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Si el Intendente decidiera que ésta es su última participación, probablemente se retire invicto desde que se hizo del sillón de Duffau: de acuerdo al análisis y proyección del consultor Oscar Nigro, Miguel Angel Lunghi volverá a imponerse en 2015. Y aunque al parecer lo hará otra vez con cierta comodidad, asumirá su cuarto mandato en diciembre sin la mayoría en el Concejo Deliberante.
“La gestión local sigue siendo bien evaluada” señaló Nigro en un diálogo con El Eco en el que, con las aclaraciones debidas, se animó a trazar un panorama para 2015: “Y si Lunghi se presenta a un nuevo período es probable que esa buena gestión pese en favor de otra reelección”.
El ingeniero remarcó varias veces que es “imposible” hablar de resultados puestos -mucho menos a tantos meses de las elecciones- no obstante, algunas tendencias se presentan difíciles de revertir.
Y en ese sentido el oficialismo tiene una grande a favor: “Sin dudas el primer lugar está para el radicalismo, centrado en la figura de Lunghi”, pero al mismo tiempo el año electoral se trae una sorpresa y es que el lunghismo se quedaría sin la mayoría en el cuerpo deliberativo.
“No hablamos de una mala elección de la UCR, por supuesto, sino de un escenario diferente”, explicó. “Se renuevan diez concejales y el Gobierno pone en juego seis. Un partido puede sacar seis concejales cuando polariza con otro en el reparto, pero este año es muy probable que haya tres o cuatro fuerzas arriba del diez por ciento y todas conseguirán meter concejales”.
-¿Cómo se ubican esas fuerzas hoy en las tendencias?
-En primer lugar tenemos al radicalismo, luego al Frente Para la Victoria, sin dudas, y después hay que ver el arrastre que puedan lograr el Frente Renovador y el Pro, más aún si tienen un buen candidato en Tandil. Estas dos fuerzas tienen probabilidades, serias, de superar el diez por ciento. Y una buena elección de Massa o Macri a nivel local empujará arriba a sus candidatos al Concejo.
La clave está en las PASO
La gran batalla en las urnas locales estará centrada en la lucha por el Concejo. Y al respecto Nigro no esquiva su consejo. “La estrategia de la oposición está dada por la forma en que encaren las PASO. Una estrategia inteligente sería que se presenten con una oferta atractiva para la gente teniendo dos o tres candidatos, es decir, que logren hacer una verdadera interna en cada fuerza”.
-¿Qué sucede cuando se da esa competencia interna?
-Si un candidato de esas fuerzas va solo a las PASO y saca -por ejemplo- el diez por ciento, después le cuesta muchísimo retener ese porcentaje ante la polarización que se da arriba en la elección general: la gente va a votar a favor o en contra de un proyecto municipal, se polariza, y aquella fuerza corre serios riesgos de no tener la misma cantidad de votos que sacó antes.
Está comprobado que lo más inteligente es unas PASO competitivas, porque después suma y ya no juegan a la defensiva en la elección general.
-¿Un ejemplo?
-Lo que sucedió entre el Frente Renovador y el PRO en 2013, aun con la aclaración de que fue una elección legislativa, que es diferente. Se presentaron en la misma interna Ersinger (Claudio), Mansilla (Carlos) y López (Daniel) y eso vino muy bien luego, en la general, a la misma fuerza, que sumó puntos. Eso, además, vale en todos los niveles: en la medida que exista una interna importante a nivel nacional o provincial se potencia esa fuerza a nivel local.
Scioli, Macri, Massa
Si en lugar de enero ya corriera agosto y Tandil fuese una réplica en escala de la Argentina, Daniel Scioli se sentiría más cerca de la presidencia, porque con 30 por ciento de intención lidera la carrera, seguido por Macri con 22 y Massa en el tercero, con 20.
Pero estamos en verano. Falta mucho y tratándose de fenómenos que exceden la voluntad de una sola ciudad, Nigro, que ama las tendencias pero sólo cree a la realidad de los hechos consumados, no pone el mismo énfasis que demuestra en la elección local.
“Puede haber muchos cambios. Hay muchas cosas, sobre todo cosas pendientes de solución, como por ejemplo en el caso de Scioli cuál va a ser la participación del kirchnerismo y el Gobierno nacional en su campaña y en su gestión. También es central la marcha de la economía, que define a favor o en contra del candidato oficialista. La marcha de la economía en el fondo es decisiva para todos”.
-En el macrismo se ilusionan con una remontada que alcance para llegar al ballotage y ganar, ¿tiene algo de sustento esa visión de acuerdo a lo que se ve en nuestra ciudad?
-Sí. Puede ser. Ha habido un aumento de Macri en estos meses. Habría que ver si se mantiene.
-Entonces Massa también tiene sus chances, aunque en Tandil esté tercero.
-Sí, claro. En el caso de él depende de cómo reencamine su campaña. Va a ser complicado para los tres. Pero sobre todo para nosotros, los encuestadores, porque 2015 se presenta como 2003, cuando el primero rondaba solamente los 25 puntos. Puede haber muchos cambios. A nivel local, no tanto.
Mitos, verdades e incógnitas
A casi 12 años de kirchnerismo y poco menos de ocho de Cristina al frente del Ejecutivo, la Presidente mantiene una aprobación que ronda entre el 45 y el 47 por ciento en Tandil. La cifra es de por sí llamativa, pero a Oscar Nigro no le sorprende.
“Hicimos dos mediciones y Cristina se ubica en esos porcentajes. ¿Demasiado alto? Nosotros no tenemos ‘regular’ como opción, o sea la respuesta puede “muy bueno”, “bueno”, “malo” o “muy malo” por lo tanto es una cosa u otra y a lo mejor resulta una cierta inflación del ‘bueno…’, dice no muy convencido respecto a un posible desvío en el sondeo.
Es que en realidad el consultor tiene datos históricos que refuerzan ese estudio. “Menem después de una década tenía casi 40 por ciento, no se fue mal. Duhalde tampoco. Sólo De la Rúa se fue mal, con 15 puntos. Y la verdad es que no veo una fatiga social respecto a Cristina, Scioli ni Lunghi aunque que los tres llevan muchos años”.
-Al término de un liderazgo muy fuerte, ¿se fortalecen las posibilidades de los candidatos del principal partido opositor? Por ejemplo, el día que se retire Lunghi: ¿el peronismo tiene más chances que la UCR?
-No me queda tan claro eso. Depende de las figuras que tenga la oposición. En realidad lo que sucede es que cuando se va una figura predominante todos largan de nuevo con la mismas perspectivas, de cero, va a ser un barajar y dar de nuevo. Sí estoy seguro que cuando se termine el ciclo de Lunghi necesariamente va a haber una renovación de figuras -no estoy hablando de jóvenes o viejos- como ocurrió cuando se retiró Zanatelli.
-Hablando de Zanatelli. ¿Qué pasa con el vecinalismo que prácticamente ha desaparecido?
-Es un espacio que está cubierto por Lunghi y el PRO. Y habría que ver si el mismo Frente Renovador no tiene algo de eso. Todos tienen algún espacio vecinalista sin necesidad de que haya un partido específico.
-¿Hay alguna tendencia clara para la Gobernación de la provincia de Buenos Aires ?
-No. Porque Tandil está sesgado por la presencia de Bossio (Diego), un dirigente local importante con buena intención de voto para gobernador aquí, por eso no podría hacer una proyección, porque si bien en la quinta sección también anda bien, no sé en el resto de la provincia.
-¿Insaurralde?
-Sospecho que tiene su porcentaje, pero no lo sé. Y hay que ver si juegan nuevas figuras. Si entra Randazzo habrá que ver. A nivel provincial aún no están definidos los candidatos, así que falta una eternidad.
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