Ponen el foco en las multas educativas por tenencia irresponsable de mascotas
El director de Bromatología, Federico Sánchez Chopa, habló del ataque que sufrió este sábado un joven de 14 años de dos perros pitbull. Según explicó, frente a cualquier denuncia, su equipo realiza la respectiva inspección, labra un acta y luego lo eleva al Juzgado de Faltas. Sin embargo, aclaró que desconocen “qué ocurre después”, por lo que deslizó que impulsará una modificación de la ordenanza 7028 para que las sanciones sean cobradas a través de la Tasa Retributiva de Servicios.
El director de Bromatología, Federico Sánchez Chopa, se refirió al ataque que sufrió este sábado por la mañana un joven de 14 años de dos perros de raza pitbull, en calle Independencia al 700, en el barrio Palermo. El funcionario comunal explicó cuál es el procedimiento que realizan desde el área frente a estos casos, que lamentablemente se repiten y preocupan a la comunidad.
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Aclaró que frente a una denuncia de este tipo, el equipo de Bromatología se dirige al domicilio en cuestión para verificar la situación y labrar el acta de inspección correspondiente, que luego es elevado al Juzgado de Faltas.
Sin embargo, y pese a las reuniones mantenidas hasta el momento con las autoridades judiciales, criticó que desconocen si las sanciones que le caben al responsable del animal son efectivamente aplicadas y, de aplicarse, muchas veces la persona ni siquiera concurre.
Por lo tanto, dijo que entiende la preocupación de los vecinos por la irresponsabilidad de quienes tienen mascotas y las dejan sueltas en la vía pública, pero aclaró que desde la Dirección de Bromatología realizan el correspondiente procedimiento, dentro de la competencia que le cabe al Municipio.
No obstante, y con miras a encontrar alternativas de solución a la problemática, anticipó que buscará avanzar con la Comisión de Salud del Concejo Deliberante en una modificación de la ordenanza 7028 para que esas multas puedan ser incluidas dentro de la Tasa Retributiva de Servicios.
En diálogo con El Eco de Tandil, Sánchez Chopa aclaró que tras tomar conocimiento del caso, se puso en contacto con el equipo del puesto sanitario de Bromatología, que le transmitió que “no había recibido ningún tipo de denuncia”, por lo que se comunicó con la persona que estaba a cargo del área de Zoonosis, quien sí había recibido una denuncia telefónica por “perro suelto en la vía pública; ninguna de mordida. Por lo cual, a esta persona no le pareció necesario informarme de lo que había sucedido”.
Luego de haber tomado estado público el caso, contó que se puso en contacto con el coordinador de Zoonosis para empezar a actuar de oficio. Concretamente, solicitó información del Hospital de Niños “Dr. Debilio Blanco Villegas” sobre el estado de salud del joven atacado, como así también del lugar donde ocurrió el hecho.
Asimismo, pidió a “las personas encargadas de las observaciones antirrábicas y denuncias por mordidas, maltratos, etc., que hagan un informe de todas las veces que hayan ido a este lugar”.
Señaló que “muchas veces recibimos denuncias, trabajamos como corresponde, vamos al lugar, labramos las infracciones y las mismas van al Juzgado de Faltas. Cuando los animales están sueltos en la vía pública, el dueño tiene que hacerse responsable y muchas veces la manera en que se haga responsable es a través del concepto de multa educativa, pero después nosotros no sabemos qué es lo que sucede”.
Sánchez Chopa expuso que “si el perro sigue estando suelto y nos siguen denunciando, seguimos yendo y vamos a labrar todas las infracciones que sean necesarias, pero no tenemos la patria potestad para poder continuar con ese proceso, es decir, no le podemos retirar el perro a esa persona porque no corresponde, es una propiedad privada, como tampoco la posibilidad de cobrar una multa”.
Reforzar la cobrabilidad
Frente a ello, deslizó que desde la Dirección de Bromatología están analizando la posibilidad de impulsar una modificación de la Ordenanza 7028, que data de 1996, para que la respectiva multa pueda incorporarse a la Tasa Retributiva de Servicios.
“Una de las ideas dentro de la modificación que debería llevar adelante el Concejo Deliberante de la 7028 sería inclusive pensar en que las multas sean cobradas a partir de la Tasa Retributiva de Servicios y no de un Juzgado de Faltas, que la gente tal vez no las paga nunca. De esta manera, quedaría registrada como una deuda de un contribuyente”, explicó.
En ese sentido, expuso que “muchas veces pasa que por los caminos lógicos que toman estas situaciones, la culpa la tiene Bromatología, que es entendible, pero nosotros muchas veces actuamos y no vemos el resultado final de qué es lo que sucedió con esos dueños”.
El acompañamiento judicial
Frente a estos casos, lamentó que “el sistema toma un circuito que muchas veces es burocrático y las decisiones finales no las tomamos nosotros, pero pagamos los platos rotos, por así decirlo”. Sánchez Chopa contó que cuando inició su gestión, se reunió en dos oportunidades con los jueces de Faltas y les pidió un acompañamiento porque necesita tener información sobre qué sucede luego de labrar las infracciones. Sin embargo, aclaró que hasta ahora solo ha recibido la respuesta de uno de los dos jueces de Faltas.
Por su parte, en lo que compete a Bromatología, precisó que “hoy estamos labrando aproximadamente unas diez infracciones por semana, entre perros sueltos en la vía pública y denuncias de mordidas, y no tengo información de qué es lo que sucede una vez que llega al Juzgado de Faltas”.
Insistió en que ya ha mantenido las reuniones pertinentes, ha solicitado los informes y no se los han enviado, pero “llegada esta situación, que no tenemos ganas de estar viviendo como ciudadanos, posiblemente tenga una nueva reunión para tener información y ver qué sucede”.
El caso
El ataque que sufrió el joven de 14 años ocurrió el sábado por la mañana, en calle Independencia al 700, en el barrio Palermo. Según la información oficial, los canes le propiciaron mordeduras de diferente índole en varias partes del cuerpo, por lo que la víctima fue trasladada por sus propios padres al Hospital Municipal Ramón Santamarina.
Tras una serie de estudios y controles para determinar la gravedad de las heridas, el paciente fue vacunado con las aplicaciones correspondientes y luego recibió el alta médica.
De acuerdo a la descripción que brindaron desde el nosocomio local a este Diario, el chico fue evaluado por un pediatra, un traumatólogo y un cirujano. Los especialistas determinaron que las mordeduras le ocasionaron “heridas en cuero cabelludo, en rodilla izquierda, en muslo derecho y escoriaciones en brazo izquierdo”, además de otras superficiales en distintas partes del cuerpo.
Las fuentes oficiales del centro municipal de atención médica indicaron que los padres del joven realizaron la correspondiente denuncia en la Dirección de Bromatología.
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