?Rexistir, mujeres que existen resistiendo?
Yamile Amad y Jésica Montagna son dos jóvenes que se formaron en la Facultad de Arte y desde hace dos años comenzaron a averiguar sobre la resistencia de las mujeres; de modo que la obra surgió precisamente de esa investigación, de todas las historias que fueron recolectando imprimiéndole un concepto artístico.
?Para nosotras fue todo un proceso de aprendizaje ?comenzó diciendo Yamile Amad- de saber escuchar, empezar a ver qué queríamos transmitir con esta obra y también poner en nuestro cuerpo y nuestra voz todo lo que estaba pasando a través de las historias que íbamos recolectando y en base a ellas tomamos una cartonera, una manzanera, pero en realidad trabajamos con muchas historias?.
-Cuando finalizó la obra, algunas mujeres se atrevieron a contar un pedacito de su historia, fue muy conmovedor.
Jésica Montagna: -Es cierto, en este lugar, tal vez por ser al aire libre, fue un poco diferente de lo que son las presentaciones de nuestra obra. Siempre hacemos algo más y hay una comunicación permanente con el público.
-Finalizada la obra, pasaron ustedes un cuenco ¿cuál es su significado?
-Reúne las historias y los cuatro elementos que nosotras utilizamos, el agua, la tierra, el aire y el fuego… es como que en ese cuenco están contenidas todas las historias que contamos y que nos cuentan. Es un nexo para poder acercarnos y que el público llegue a nosotros.
-¿Cuánto hace que están presentando este espectáculo?
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Y. A.: -Dos años y medio, hemos estado en varios espacios de la ciudad como El club de Teatro, La Fábrica, distintos barrios y comedores.
-¿Quién las dirige?
-Martín Rosso. También tenemos intervenciones de otras actrices como Soledad Gargiullo, por ejemplo, y la ayuda de la dramaturga Adriana Genta.
-¿Cómo resumen la presentación que hicieron durante la inauguración?
-Muy positiva, tanto los hombres como las mujeres estaban muy receptivos y el mensaje llegó.
La obra fue largamente aplaudida por el auditorio, compuesto por un público heterogéneo en el que se destacaba la presencia de mujeres, niños, representantes, militantes y personas relacionadas con organizaciones que trabajan sobre la violencia de género.
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