Vidal pintó de amarillo casi toda la provincia, gracias al corte de boleta
El triunfo electoral de María Eugenia Vidal se extendió a casi todo el territorio de la Provincia de Buenos Aires, impulsado por un abundante corte de boleta en perjuicio del postulante del Frente para la Victoria, Aníbal Fernández.
En una definición sorpresiva, los comicios en el principal distrito tuvieron a la vicejefa de Gobierno porteño traccionando al postulante presidencial de Cambiemos, Mauricio Macri, quien logró meterse en el balotaje contra su rival del oficialismo, Daniel Scioli.
Forjando una extrema polarización con el jefe de Gabinete, Vidal, primera gobernadora electa en la historia de la provincia, logró aumentar diez puntos su desempeño con respecto al resultado de las PASO: del 29,95 que sacó en agosto saltó al 39,49, lo que le dio la victoria.
Conquistar a una parte de los que votaron en blanco en las primarias, así como lograr que la tijera sea utilizada a su favor fueron dos puntos claves que permiten explicar el triunfo por poco más de cuatro puntos de la referente del PRO, quien estará acompañada en el Ejecutivo provincial por el dirigente radical Daniel Salvador.
Aníbal Fernández que obtuvo el 35,18 por ciento de los votos, no logró contener todo el caudal que el Frente para la Victoria había cosechado en las PASO: cayó cinco puntos en su rendimiento en las urnas.
El corte de boleta fue evidente en las ocho secciones electorales, ya que en seis de ellas el jefe de ministros sacó diez por ciento menos que Scioli y en las dos restantes (la cuarta y en la octava) la diferencia con el postulante presidencial del kirchnerismo fue de cinco puntos.
De todos modos, en porcentaje Scioli perdió 2,9% respecto a las PASO y Macri creció 3,9%, lo que indicaría que hubo electores que antes votaron al FPV y que ahora escogieron la boleta completa de Cambiemos, favoreciendo al líder del PRO.
Solamente en los partidos de Monte Hermoso, Roque Pérez y Saavedra, Aníbal Fernández pudo superar los votos que obtuvo el actual mandatario bonaerense, mientras que Tordillo fue el único lugar en el que se registró cero corte de boleta y ambos dirigentes oficialistas obtuvieron 559 sufragios.
El cimbronazo trajo además aparejado otras sorpresas en la provincia, como las derrotas de algunos barones del conurbano bonaerense, como Hugo Curto (Tres de Febrero), Humberto Zúccaro (Pilar), Jesús Cariglino (Malvinas Argentinas), Luis Acuña (Hurlingham) y Francisco “Barba” Gutiérrez (Quilmes), entre otros, que se suman a las derrotas de Pablo Bruera en La Plata y Julián Álvarez en Lanús.
Finalmente, el candidato de UNA, Felipe Solá, se quedó con el tercer puesto gracias a los 19 puntos que cosechó el pasado domingo (bajó 0,4% respecto de las PASO), a la vez que los postulantes del Frente de Izquierda, Néstor Pitrola, y de Progresistas, Jaime Linares, quedaron en el cuarto y quinto lugar, respectivamente.
.”Tractorcito” Vidal.
El desempeño de Vidal en las elecciones del domingo no sólo llevaron al PRO a obtener el primer triunfo a nivel ejecutivo por fuera de la Ciudad, sino que también traccionó al candidato presidencial de Cambiemos, Mauricio Macri, y lo ayudó a meterse en el balotaje del 22 de noviembre.
Si se comparan los resultados de las PASO con los de las generales, el espacio opositor integrado por el PRO, la UCR y la Coalición Cívica-ARI obtuvo en la categoría Presidente 520.870 votos más en la Provincia de Buenos Aires, es decir cinco puntos porcentuales.
En la vereda de enfrente, el postulante del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, quedó técnicamente estancado en el mismo caudal de agosto: sólo incrementó su cosecha en 865 votos, pero en porcentaje cayó 2,4% (de 39,5% a 37,1%).
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