A un año del Bicentenario, las obras hechas para el histórico festejo se consolidan como paseos en la ciudad

“Es lo que más vienen a ver. Y cuando falta la bandera, enseguida vienen a preguntar dónde está. Porque llama la atención, se ve desde toda la ciudad y enseguida vienen a sacarse fotos”, contaron en la oficina de turismo de la cima del Parque Independencia. 

El mástil del bicentenario es una de las atracciones que se realizaron hace exactamente 12 meses atrás, con motivo de las celebraciones por los 200 años de la ciudad, y que se instaló como uno de los paseos más visitados por locales y turistas.

Del mismo modo que sucedió con la enorme bandera junto al Castillo Morisco, el Bicentenario motivó otras obras en Tandil, como el hito de avenida Espora, el dinosaurio gigante del Parque del Origen y los reconocimientos a vecinos ilustres en el Paseo de las Personalidades.