Alertan a la población sobre un estafador que se presenta como vendedor de alarmas
Una familia que resultó víctima lo atendió y le pidió el número, fecha de vencimiento y código de la tarjeta de crédito para “realizar la operación de contratación del servicio”. Desde la empresa con oficinas en Mar del Plata negaron la existencia de vendedores zonales.
Un vecino se acercó hasta El Eco Multimedios para narrar una situación delictiva de la que su familia estuvo a punto de ser víctima y, al mismo tiempo, alertar a la población sobre la modalidad utilizada para cometer el ilícito. Así como los delincuentes se las ingenian para realizar el famoso “Cuento del Tío”, ingresar a los domicilios, distraer a quien los atiende y llevarse el dinero o alhajas que encuentran, también existe otra gama de delincuentes y son aquellos que intentan apoderarse del número de tarjeta de crédito.
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Todo se desencadenó cuando a un domicilio de la ciudad llegó una persona, bien presentada, alta, con un maletín, aduciendo que era de Mar del Plata y que está trabajando en Tandil vendiendo alarmas para la empresa ADT. Este hombre dijo llamarse Santiago Costa y con un relato muy seductor, logró ingresar a la casa y “explicarles” los beneficios de la contratación y colocación de la alarma mencionada.
El hombre, tras ganarse la simpatía de quienes habitan en el lugar, hablando sobre la inseguridad reinante y la necesidad de estar protegidos, recorrió la casa buscando en qué sitios colocar sensores, la central de la alarma y el teclado. Armó en una hoja borrador lo que se necesitaba en el domicilio y antes de retirarse del lugar, les solicitó la tarjeta de crédito, fecha de vencimiento y la clave de la misma para poder él hacer la operación ante sus jefes de ADT.
Luego pidió un remis, ya que “se le había pasado el tiempo y si no se apuraba iba a perder el micro que lo regresaba a Mar del Plata”. En ningún momento el libreto estudiado generó dudas, y el matrimonio creyó que era un empleado de una empresa de alarmas. Lo único que les llamó la atención es que pidió un remis cuando el domicilio está ubicado a cien metros de la Terminal de Ómnibus.
Un estafador
Uno de los hijos, al enterarse de lo que había pasado, comenzó a investigar si la persona que había estado durante mucho tiempo en la casa de sus padres era un empleado de ADT o un farsante. Al llamar a la empresa con oficinas en la vecina ciudad de Mar del Plata le indicaron que “no tienen vendedores en la zona y que ellos se manejan con personal debidamente identificado, que se moviliza en vehículos que están ploteados”.
También mencionaron que “en la plantilla de empleados en funciones en ADT no existe ninguno que se llame Santiago Costa”.
A lo que hay que sumarle que al número que les dejó con característica 0223 jamás se pudieron comunicar, al igual que con un 0-800.
Miedo
De inmediato se dio de baja la tarjeta de crédito y la familia pudo constatar en el banco que no se había producido ningún tipo de movimiento financiero, fuera de las compras que ya se habían realizado.
Enterados de que habían sufrido un intento de estafa, ahora temen que puedan llegar a sufrir algún tipo de robo, teniendo en cuenta que quien dijo ser vendedor recorrió la casa y no pertenece a la empresa de alarmas.
“Mi familia zafó con lo justo -dijo el hijo-, no sabemos qué fue lo que pasó, pero por suerte teniendo número y código de la tarjeta de crédito no realizaron ninguna compra. Lo que pretendemos es alertar a la ciudadanía de este tipo de maniobras que realiza un delincuente que sólo busca estafar a gente. Que por favor una persona antes de atenderlo llame a la policía, porque como le sucedió a mis padres, confiaron en lo que supuestamente estaba vendiendo y eran todas mentiras”.
Características
Buscando que la policía pueda dar con este delincuente, que a su vez tiene un apoyo extra de una mujer que es la responsable de llamar por teléfono para “corroborar” los datos de la tarjeta de crédito, la familia realizó una presentación en la comisaría Primera.
En ese sitio y con la descripción dada sobre el sujeto, personal de la dependencia dijo que las características eran de mucha similitud con lo declarado por Alfredo Martínez Goya, quien sufrió un “Cuento del Tío” y le sustrajeron 22 mil dólares, la semana pasada.
La investigación no sólo deberá concientizar a la población sobre las medidas a adoptar en caso de recibir alguna llamada en donde se hacen pasar por un familiar, sino que también tendrá que trabajar con esta clase de ardides que utilizan los maleantes que pretenden estafar a la gente tomándole todos los datos de la tarjeta de crédito, para luego poder realizar operaciones vía internet.