Con más de 80 propuestas artísticas, abre el telón una nueva edición del Mayo Teatral
El ciclo, organizado por la Subsecretaría de Cultura y Educación municipal con el apoyo de la Unicen, vuelve a subir a escena en cinco salas de la ciudad y diversos espacios comunitarios. La apertura de la propuesta será este viernes, en el Teatro de la Confraternidad, y culminará el domingo 26 de mayo. Apuntan a revalorizar las producciones locales y que cada vez más personas puedan convertirse en espectadores.
Palpitando lo que serán los 20 años de la consolidada propuesta cultural y artística, este viernes comenzará la 19na. edición del tradicional Mayo Teatral, ciclo impulsado por la Subsecretaría de Cultura y Educación de Tandil en conjunto con la Coordinación de Cultura y la Facultad de Arte de la Universidad Nacional del Centro, y las salas de teatro independientes de la ciudad.
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En esta coyuntura, la directora de Cultura del Municipio, Irina Taraborelli; la subsecretaria de Cultura y Educación, Natalia Correa; la coordinadora de Cultura de la Unicen, Sofía Cheves; las referentes del Club del Teatro, Alejandra Casanova y Marcela Juárez; el representante del Teatro La Fábrica, Franco Pomponio; y la referente de la sala Bajosuelo, Laura Ciganda, presentaron y difundieron la próspera iniciativa que crece cada año brindando mayores oportunidades tanto al público como a quienes viven del teatro.
“Tenemos la suerte de que esta propuesta ha ido creciendo y tenemos otros espacios que año a año se van sumando. Serán 20 jornadas en las que habrá una programación de más de 80 propuestas de obras y capacitaciones. La mayoría son producciones locales, pero también es un ciclo que abre sus puertas a los teatristas de la región que quieren ser parte de este mayo en la ciudad”, anunció Taraborelli.
Calentando motores
Los motores se encenderán el 3 de mayo, a las 20.30, en el Teatro de la Confraternidad con la obra “La fabulosa historia de los inolvidables Marrapodi”, y la entrada será libre y gratuita. La programación está disponible en cada una de las salas, y también a través de la web del Municipio y las redes sociales.
A partir de este fin de semana, entonces, la pasión teatral empezará a discurrir por las venas de la ciudad y habrá variadas funciones en los espacios afectados a tales efectos. Las salas principales son el Teatro del Fuerte (Fuerte Independencia 360); Teatro de la Confraternidad (4 de Abril 1371); Bajosuelo (Rodríguez 457); La Fábrica (Pinto 390); y el Club del Teatro (Chacabuco 517 y la sede de Marconi y Roca).
También funcionarán como epicentro de distintas actividades ligadas al ciclo, bajo el ala de la Unicen, la Universidad Barrial (Nigro 1620), el Centro Cultural Atrapasueños (Figueroa 2226), el Centro Cultural La Vía (Del Valle 835), el Centro Cultural y Social San Pacífico (Sáenz Peña 751), y el Centro Cultural La Compañía (Alsina 1242).
Es preciso reseñar que el Municipio financia el 30 por ciento de las butacas de cada sala, que es el porcentaje que usualmente se recauda por función del total de entradas vendidas. De este modo, cada sala puede poner en cartel la obra que quiera, más allá de los vaivenes de la taquilla, asegurándose un margen de ganancias. Así, se expanden las posibilidades para que distintas puestas suban a escena y se amplía el abanico de oportunidades para los artistas y el público. El Estado y la Universidad también contribuyen en algunos casos puntuales con el cachet de los elencos.
Teatro para todos
Franco Pomponio, del espacio La Fábrica -que funciona en el Rectorado de la casa de estudios superiores-, expresó que “estamos muy contentos de ser parte de este ciclo que ya tiene casi 20 años, es algo que perdura en el tiempo y funciona a nivel social y cultural. Este año en particular formamos un grupo muy acogedor, hay mucha camaradería entre todas las salas y siempre con muchas expectativas porque están todos los teatros llenos de funciones, lo que nos hace muy felices”.
Sofía Cheves, responsable del área cultural universitaria, destacó que “desde la universidad lo que nos propusimos para aportar a este Mayo Teatral es acompañar las funciones en espacios sociales, entendiendo que la programación de las salas de la ciudad es tan rica y se puede compartir eso en los distintos espacios. Queremos ampliarlo para que cada vez más personas accedan a las diferentes propuestas”.
Las directoras y actrices Marcela Juárez y Alejandra Casanova también se mostraron muy entusiasmadas por ser parte de la nutrida convocatoria que suscitó esta nueva edición de la propuesta y calificaron como “intenso” el camino que han transitado el último mes, tratando de organizar la logística de las funciones.
“Participamos desde el comienzo y este último año notamos un crecimiento enorme y un gran apoyo de parte del Municipio y de las salas. Es un gran trabajo ponernos de acuerdo y organizar esto que es tan grande y tiene a tanta gente interesada”, expuso Casanova, quien enfatizó que la obra de cierre está a cargo de una producción del Club del Teatro, que en este caso se trata de “La peña los abajo firmantes”, bajo su dirección.
“Es importante el trabajo en conjunto de las salas, es importante esta visibilización de lo teatral, si bien en Tandil hay mucho teatro todo el año esto de coincidir en un momento es interesante para seguir trabajando”, acotó Juárez.
Por su lado, Laura Ciganda, de Bajosuelo, una de las salas más nuevas y pujantes del circuito privado, subrayó que es su tercer año participando del ciclo y sostuvo que “se puede trabajar bien cuando hay ganas”.
Engranajes culturales
Natalia Correa, desde su rol de funcionaria, agradeció el apoyo de las salas y los elencos, crucial para dar forma a este Mayo Teatral que busca superar las expectativas de todos los involucrados.
“Este es un trabajo que nos reúne a diferentes actores a pensar la propuesta, el año pasado fue un momento bisagra para definir qué es el Mayo Teatral y a qué apunta; en ese sentido se inició un camino en la extensión a diferentes organizaciones y en un trabajo con los elencos, pensando al Estado en un rol de promotor y facilitador en el trabajo de cada uno de los espacios, es un camino que iniciamos y dio resultado”, exhibió Correa.
En esta línea, la titular de la Coordinación de Cultura de la Universidad indicó que el área se ocupa de la cobertura de las funciones que se desarrollarán en los espacios alternativos, como una manera de garantizar el salario de los trabajadores del teatro sin que eso implique un costo para las organizaciones sociales y culturales, o para los espectadores.
“En La Vía, la Universidad Barrial y el Atrapasueños las funciones son a la gorra y la gorra queda para las organizaciones sociales, que no funcionan habitualmente como salas teatrales, ese monto de dinero que cubre el Mayo Teatral lo aportamos nosotros”, aclaró Cheves.
Convencida de que el acceso a las diferentes manifestaciones artísticas debe democratizarse, bregó por un trabajo que permita establecer políticas de esta índole a largo plazo.
“Nuestra propuesta es que podamos acompañar las propuestas en todos los puntos de la ciudad, porque entendemos que es una forma de democratizar el acceso a las obras, si bien las entradas del ciclo son accesibles, a muchas personas se les complica llegar. También acompañamos el trabajo que muchos de los graduados y estudiantes de la Facultad de Arte llevan adelante, porque a veces no tienen recursos para invertir en ciertas cuestiones y desde la Unicen se acompañar esa actividad”, aseguró.