Con preocupación por la coyuntura, pero con la fortaleza intacta, la Sociedad Rural de Tandil cumple 90 años
"Son años atípicos", reconocieron los dirigentes de la entidad local, referenciando a la pandemia y a las medidas gubernamentales que han sentado a la incertidumbre del sector nuevamente a la mesa. Sin embargo, garantizaron seguir con la misma fuerza de siempre asesorando y defendiendo a los productores. El futuro en manos de las nuevas generaciones, el desafío en el cambio del predio feriante.
En tiempos donde los ánimos de los productores se encuentran aplacados, debido al escenario nacional que les tendió un manto de intranquilidad y preocupación, la Sociedad Rural de Tandil cumple hoy sus primeros 90 años.
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A sólo 10 años de llegar al siglo de vida, los referentes advirtieron que a pesar de la coyuntura la entidad está con la misma fuerza de siempre para apoyar y acompañar a los asociados como habitualmente.
Desde hace tres años, con mandato renovado recientemente, que Matías Meli preside la SR local y reflexionó que, más allá de la pandemia que impuso sus dificultades, también las decisiones políticas del último tiempo están complejizando la situación para el sector.
“Es un año atípico, con paros, con bastantes diferencias con el Gobierno nacional y con las reuniones virtuales; estamos tratando de llevarlo de la mejor manera”, indicó.
Sin dudas atravesar estos tiempos está resultando un desafío importante para la institución, que además, según anticiparon, tiene en un futuro cercano el reto de mudarse de predio feriante. Sin embargo, destacaron estar siempre vigentes y con la perspectiva de seguir forjando camino de crecimiento, con las juventudes como motor y conteniendo a los asociados.
Desde la 125 al cierre de exportaciones
Lamentando no poder festejar este nuevo aniversario como lo viene haciendo desde hace 40 años, Manuel Otero, productor, miembro de la comisión directiva y ex presidente de la SR, y actual titular de Funtala, participó de la entrevista con El Eco de Tandil, también junto a Mariana Morrone quien recientemente se incorporó a la asociación.
Tanto a él como a Meli le tocaron ciclos difíciles para dirigir la entidad, ya que mencionó que su período sucedió justo en el año del icónico episodio de “la 125”, nombre que comúnmente se le da a la Resolución Ministerial 125/8.
Vale recordar que aquella reglamentación del Ministerio de Economía establecía derechos de exportación (retenciones) móviles para girasol, maíz, trigo, soja y sus subproductos por cuatro años. De hecho fue el desencadenante del conflicto agrario de 2008, derogada en julio de ese año después de la no ratificación parlamentaria.
“Por suerte pudimos salir adelante y la Rural también siguió su curso”, expresó Otero, que a lo largo de sus reflexiones dejó en claro la fortaleza de la institución y su capacidad de permanecer vigente a pesar de las adversidades.
Sin embargo, agregó que en la época de la 125 se perdieron 10 millones de cabezas, que a lo largo de los años posteriores se habían empezado a recuperar, pero ahora con estas decisiones que ha tomado el Gobierno nacional respecto del cierre de las exportaciones se apresura la incertidumbre sobre lo que pueda ocurrir.
“Son medidas que ya se habían tomado, que nos perjudicaron y nos van a seguir perjudicando porque no son soluciones”, señaló el expresidente de la Rural de Tandil.
Al respecto, debiendo transitar al frente de la entidad en estos tiempos, Meli consideró que ha sido una secuencia de cosas que arrancó con la expropiación de Vicentín y luego siguió con el cierre de los mercados de maíz, continuó con la intervención del mercado de trigo que a la vez quiso replicarse en el de la leche, y lo último fue el cierre de las exportaciones de carne.
“Ahora de lo que se está hablando es que volveríamos a los Registros de Operaciones de Exportación (ROEs), como sucedió en 2006 y 2008, y que no funcionó”, alertó el actual dirigente.
En este sentido, Otero planteó que con estas medidas el productor ganadero va a empezar a retroceder, ya que se ha sabido que en La Pampa algunos frigoríficos ya han empezado a despedir empleados, siendo un sector donde además se están alargando los pagos de hacienda.
Asimismo, advirtieron que ha bajado mucho el precio de la vaca de exportación, entre otras complicaciones, y compartieron una estadística que avizora que este año habrán, por sequía y otros factores, 600 mil terneros menos en el país.
Años atípicos
Cumplir 90 años no es poca cosa, casi un siglo, pero sin embargo aseguraron que toda esta coyuntura hace que los ánimos estén decaídos. “Veníamos avanzando, contentos, pero surgen estas intervenciones y generan preocupación”, admitió el titular de Funtala, lamentando el retroceso en este “país maravilloso y con tanto potencial”.
Igualmente, y más allá de esto, han sabido adaptarse a los desafíos impuestos por la pandemia recurriendo a las reuniones virtuales para estar siempre en contacto con la región y las entidades nacionales.
En todos estos años han sabido sostener herramientas que favorecen a los 300 productores de Tandil asociados, grandes y pequeños, como son los remates de hacienda. Asimismo a fin de mes se estará realizando la exposición de Hereford, que es la segunda más importante del país después de Palermo, y el año pasado no se pudo realizar.
“Son años atípicos, pero hay que tratar de buscarle la vuelta para seguir en actividad”, enfatizó Meli, recordando que el predio feriante es muy grande, demanda un costo alto y no es fácil mantenerlo.
En este aspecto, reveló que de cara al futuro no muy lejano, uno de los retos que deben afrontar tiene que ver con conseguir un nuevo espacio de esas características, ya que la sede de la Sociedad Rural para las ferias está cada vez más inmersa en zona urbana y necesitarán mudarse a un sitio más alejado.
El futuro en lo jóvenes
Mariana Morrone y Virginia Palazuelos se asociaron este año a la Sociedad Rural local, siendo las primeras mujeres en formar parte de la entidad en 90 años. “Es un desafío ser parte, aprender, aseguró Morrone, que participa de las reuniones, escucha y se manifestó entusiasmada y dispuesta a brindar su aporte hacia el progreso, a fin de sostener la potencialidad de Tandil para la producción agropecuaria.
“Hay que mirar para adelante”, ratificó Matías Meli, recordando el gran compromiso que han señado desde la institución con un montón de otras organizaciones en las que participan, como el INTA, los distintos Clúster, la Escuela Agrotécnica, los apicultores, los Colegios de profesionales, entre otros.
Entre estos, puso en relevancia el ateneo de alrededor de 30 jóvenes que están forjando su camino y son “los futuros dirigentes”.
No tienen dudas de que el futuro está en seguir defendiendo al productor. “Hacemos gremialismo y sostenemos la defensa y asesoramiento del productor agropecuario, así que la entidad siempre va a estar siempre a disposición”, garantizó.
Finalmente, los tres representantes de la Sociedad Rural de Tandil, coincidieron en que la fuerza que los ha caracterizado desde los inicios “no puede decaer”. “Creo que el país se hace fuerte cuando las instituciones son fuertes, porque de ellas depende”, consignó el presidente.