Copecos y la Patrulla Rural avanzan en la detección de ilícitos vinculados a animales
El coordinador de Copecos, Santiago Romay, celebró los resultados del trabajo conjunto emprendido hace un mes con autoridades del Comando de la Patrulla Rural de Tandil para la detección de ilícitos vinculados a los animales.
Precisó que ya intervinieron en tres casos puntuales y resaltó la buena predisposición de los responsables de esa fuerza, que respondieron rápidamente ante las denuncias transmitidas desde la comisión.
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En contraposición, lamentó “la falta de voluntad política” del Departamento Ejecutivo, que hasta el momento no ha avanzado en acciones concretas en pos de resolver la problemática del maltrato animal en la ciudad.
“La reacción que ha tenido la gente de la Patrulla Rural es más que sorprendente por lo colaborativos y proactivos que son en este tema. Son un ejemplo de trabajo”, remarcó el abogado y proteccionista en diálogo con El Eco de Tandil.
Hasta el momento, detalló que intervinieron en tres casos, entre ellos, visitaron un domicilio donde se encontraba un caballo con signos de maltrato. Tal cual se informó en las páginas de este Diario, el operativo se realizó en el domicilio de Segundo Sombra y Napaleofú, donde ingresaron para examinar a un equino mestizo, de aproximadamente dos años, propiedad de Roberto Rojo.
Al lugar asistieron la proteccionista e integrante de Copecos Elsa Zalasar y la médica veterinaria Mariela Brusco, que se encargó de examinar al caballo y dio instrucciones al propietario para que realice las curaciones pertinentes. El animal presentaba problemas estomacales, por lo que le dejaron al dueño medicación para el tratamiento.
Los procedimientos
En cuanto al procedimiento establecido, Romay precisó que en todos los casos “se concurre conjuntamente con personal de la Patrulla Rural. Si al animal hay que levantarlo, se trata de conseguir algún predio y ellos nos facilitan el transporte. Además, realizan la constatación de la situación del maltrato y luego nosotros articulamos la denuncia de la misma”.
Destacó así que “tanto la Patrulla Rural como la Unidad de Prevención Local son, sin duda, las dos fuerzas que más han colaborado y que están siempre dispuestas a darnos una ayuda, que a veces es simplemente acompañar a las proteccionistas para que no vayan solas a tocar un timbre y puedan pasar un mal rato, lo que no es una ayuda menor, ya que son situaciones complejas que requieren el acompañamiento de alguna fuerza del Estado”.
Sin apoyo
del Municipio
En contraposición, lamentó la falta de avances firmes por parte del Ejecutivo local en relación a la problemática del maltrato animal en la ciudad. “El sistema de denuncias que instaló el Municipio es pésimo porque que la gente tenga que ir personalmente a hacerla a la Dirección de Bromatología es algo que impide que se efectivice”, afirmó.
Por lo tanto, confirmó que desde Copecos siguen pidiendo “algo básico, sencillo y normal en la era de comunicación, como la que estamos viviendo, que es un número de teléfono. Hace un año que lo estamos pidiendo y es vergonzoso que no lo podamos tener, como tampoco podamos avanzar en un protocolo de denuncias”.
Si bien reconoció que se está trabajando “muy bien” en otros temas con el Municipio, insistió en que “da la impresión de que salvo lo que es para cartelería, le importa poco y nada el maltrato animal. Nosotros queremos motorizar una campaña de concientización respecto a este tema y la tenencia responsable, y no hemos tenido ningún tipo de apoyo”.
“Lamentablemente -lanzó- son todas declaraciones rimbombantes, pero no se avanza absolutamente en nada. Hay que ser realistas, desde Copecos tenemos una función de contralor, que es lo que hacemos, e instamos al Municipio para que tome medidas para mejorar esta situación y no lo hace”.
“No pasa
nada”
En ese sentido, el abogado mencionó la reciente presentación del quirófano móvil y aclaró que “fue íntegramente refaccionado con fondos de Copecos, es decir, fondos que son generados por una alícuota que pagan los vecinos de Tandil, conforme a la Ordenanza 7.028 y ni siquiera tuvieron la delicadeza de manifestarlo”.
Por lo tanto, reconoció que “es un poco complicado, uno intenta trabajar y ponerle el hombro, siempre me he manifestado con absoluta predisposición, pero pasa el tiempo y no avanzamos absolutamente nada”.
Soluciones
“reales”
En definitiva, consideró que “hay una absoluta ausencia de voluntad política de solucionar ciertos temas, en torno a los cuales ni siquiera se ha empezado. Hay cuestiones que ni siquiera necesitan presupuesto y no se hacen. Entenderán que son problemas menores, que no importan, pero a nosotros como proteccionistas nos importan y mucho, y queremos que el Municipio tome la bandera en este tipo de cuestiones y busque soluciones reales que cambien una situación cultural en cuanto al maltrato animal en la ciudad”.
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