Crecen los casos de gripe y advierten sobre la importancia de la vacunación
La infectóloga Florencia Bruggesser alertó sobre el aumento de internaciones y remarcó la necesidad de vacunarse.
El descenso de las temperaturas que acompaña a la época invernal genera las llamadas enfermedades estacionales, siendo las infecciosas respiratorias muy comunes tanto en niños como en adultos.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailEn diálogo con el ciclo La Mañana (104.1 Tandil FM, EcoTV y El Eco Streaming), la infectóloga Florencia Bruggeser confirmó que observan “más cuadros respiratorios” y que en las últimas dos semanas “empezamos a tener hisopados positivos para influenza” e internados por esta patología.
A más datos, explicó que se trata de una gripe, pero aclaró que “todavía no tenemos la subtipificación”, ya que algunas muestras se enviaron para su análisis para determinar si se trata “de una gripe estacional o de una influenza H1N1”.
“Todos los años tenemos internados por influenza”, remarcó la profesional, que indicó que “la mayoría de las veces” corresponde a “grupos de riesgo o a cuadros un poco más graves”.
Así, dijo que “hay que tener en cuenta que la gripe no es ese cuadro de resfrío que uno asume que es un poco de mocos, dolor de garganta y tos”. Por el contrario, advirtió que “los cuadros gripales son cuadros fuertes con fiebre alta, cefalea, dolor de cabeza, con rinorrea, tos y a veces se pueden complicar con bronquitis o con neumonía”.
Vacunación
De acuerdo a la recomendación, el momento para aplicarse la vacuna es en la época previa a la invernal, antes de la propagación del virus de la influenza en la comunidad, mientras que el desarrollo de anticuerpos para proteger a una persona demora aproximadamente dos semanas desde la vacunación.
A propósito de esta situación, Bruggesser insistió con la importancia de la vacunación antigripal y afirmó que “lo ideal es empezar a vacunarse antes que comience a circular el virus”, de allí que el inicio de las campañas sucede hacia mediados de marzo.
En esos casos, y dependiendo de la disponibilidad, la campaña de vacunación puede “empezar en forma escalonada con algunos grupos o todos a la vez” y así, “cuando esté la circulación fuerte del virus, estar inmunizado”.
“Sabemos que cuando nos aplicamos la vacuna, para tener una respuesta protectora, deben transcurrir aproximadamente entre 10 y 14 días”, indicó.
Igualmente, la médica señaló que resulta importante que “si estamos dentro de alguno de los grupos de riesgo y aún no nos vacunamos tenemos que hacerlo”.
En ese sentido, también dijo que hay que considerar que si la persona presenta algunos síntomas relativos a “un cuadro leve, no es una contraindicación para vacunarse”.
“En este momento muchos dicen que tienen un poco de tos y esperan a que se les pase y quizás en esta época, donde no solo circulan los virus de influenza, también puede circular Covid y el virus sincicial respiratorio, circulan otros que son cuadros un poco más leves”, detalló para luego explicar que “a veces esperando a sentirse totalmente bien, la persona va posponiendo la vacunación”, cuando “la realidad es que no son contraindicaciones para vacunar”.
En cuanto a los grupos incluidos dentro del Calendario Nacional de Vacunación, Bruggesser se detuvo en la población pediátrica de entre seis meses y dos años y recordó que “la primera vez que se vacunan son dos dosis separadas por cuatro semanas”. En tanto, sostuvo que se trata de un grupo etario al que “históricamente no alcanzamos buenas coberturas y es muchas veces la que suele internarse más”.
A más datos, indicó que en este momento “estamos teniendo mucha más internación en pediatría que lo que estamos teniendo en adultos mayores”, comparó para reforzar el planteo.
Luego, se enfocó en los mayores de 65 años como población de riesgo y en el grupo entre los dos y 64 años con comorbilidades, como “enfermedades crónicas respiratorias, cardiovasculares y los inmunocomprometidos con enfermedad con baja la defensa, diabéticos y obesos”.
Para evitar contagios
Las enfermedades respiratorias son “altamente contagiosas”, definió y agregó que cuando el paciente acude a la consulta en la guardia con cuadros de este tipo “tratamos de darle un barbijo para que se cubra”, más aún a partir de los antecedentes del Covid-19.
“Sabemos que si un paciente tiene un cuadro respiratorio, eventualmente puede utilizar un barbijo, avisar si se presenta con síntomas respiratorios para que eventualmente le provean uno porque obviamente son enfermedades muy transmisibles”, puntualizó Bruggesser.
Entonces, recomendó que si una persona presenta síntomas respiratorios, pero que se siente “bien como para ir a trabajar o para circular y va a entrar en lugares cerrados, quizás usar el barbijo”.
Y repasó como principales medidas el lavado de manos, que es “muy importante”, y lo que denominó “la etiqueta respiratoria”, que es “cuando tosemos, cubrirnos con el pliegue del codo, utilizar pañuelos descartables y después higienizarnos las manos con alcohol en gel”.
Y cuando presenta síntomas respiratorios “como falta de aire o dificultad para respirar, más que nada en los adultos mayores o en los niños consultar precozmente como para tener una evaluación y ver si se requiere algún tratamiento o eventualmente alguna internación”, concluyó.