El dólar alto podría favorecer al turismo interno y la ley de accesibilidad resultar un “buen negocio”
Se llevó a cabo ayer la reunión de comisión directiva de la Cámara de Turismo de la Provincia de Buenos Aires (Catur PBA) en el Hotel Libertador. El encuentro fue encabezado por el presidente de la misma, Gustavo Hani, y la subsecretaria de Turismo de la Provincia, Martina Pikielny. Además, participaron el director de Turismo Alejandro Bonadeo; el titular de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Bares, Confiterías y Afines de Tandil Luis Cerone, y otros miembros de esta como los empresarios Graciela Silvagni y Mario Wisner, quien además es vicepresidente de la Catur por la Región Centro.
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El Consejo Provincial de Turismo se reúne cada dos meses, y con la intención de mantener una agenda federal es que van rotando por los diferentes municipios como base de los encuentros. En esta ocasión fue Tandil el núcleo elegido para dos días de trabajo. No solamente para la tertulia de comisión directiva sino también para las actividades del Consejo de Promoción del Turismo que organiza la Subsecretaría, que se realizará hoy en el Museo de Bellas Artes local.
“Siempre tratamos de que los viajes sean lo más fructíferos posible, para conocer la región, tener conversaciones con el sector privado y público”, explicó Pikielny, quien antes de arribar a esta ciudad hizo escala en la localidad de Balcarce. La funcionaria bonaerense advirtió que la articulación público-privado es la base fundamental para crear políticas de turismo sustentables. “Desde ahí es que creamos espacios para mantener un diálogo franco y fructífero acerca de lo que hay para hacer y mejorar el sector en la provincia”.
El lado positivo
del dólar alto
Si bien la incesante volatilidad de la moneda extranjera está repercutiendo negativamente en la mayoría de los sectores económicos del país, desde el ámbito turístico no lo ven como algo tan perjudicial, sino como una oportunidad para enfocarse desde otro lado.
De esta manera, la subsecretaria reveló que el dólar les hace plantear una posibilidad importantísima que es trabajar el turismo interno, “siempre y cuando el aumento de la moneda extranjera no se traslade a los precios del sector hotelero”. Según contaron los referentes, esto es algo que ya lo vienen hablando con las cámaras afines, quienes mostraron muy buena voluntad para que dicho traspaso no suceda, y a partir de ahí poder potenciar el turismo en toda la Provincia.
De hecho Gustavo Hani informó que junto a Pikielny y el ministro de Economía Hernán Lacunza, la semana pasada mantuvieron una reunión en la que el sector privado se comprometió a no trasladar el dólar a sus precios para seguir potenciando los destinos bonaerenses a lo largo de todo el año.
“Creo que vamos por muy buen camino. Se vienen un tiempo de turismo interno fuerte y lo tenemos que aprovechar”, sostuvo.
Por su parte la titular del área de Turismo de la Provincia destacó que no se trata solamente de conservar los precios, “sino de buscar una ecuación que sea de equilibrio para todos los sectores”.
El turismo interno y
el modelo Tandil
Para la cartera que encabeza Pikielny, ya está comprobado que Buenos Aires es el destino de escapada por excelencia, tanto que ya no se piensa en temporada de verano o invierno, sino en 52 fines de semana al año donde hay que crear oportunidades para que la gente se tome un micro, el auto o el avión y se vaya a algún lado. “Nuestro gran objetivo es llenar las localidades provinciales todos los fines de semana”, dijo la funcionaria.
De todas maneras, siempre estos meses pasados son la parte más difícil del año para estos lares. Generalmente mayo y junio son más débiles, pero los fines de semana largos potencian un poco y hacen que se sienta menos el período bajo. “Ahora vienen las vacaciones de invierno que también repuntan y después ya llegarán las temporadas media y alta para cerrar un año fructífero”, anheló el presidente de la Catur.
“Estamos trabajando duro, seguimos dando empleo, porque más allá de todo hoy el turismo es la mayor fuente de trabajo y a futuro se perfila igual”, añadió.
En tanto que dentro de la provincia, Tandil está calificado como uno de los distritos modelo en cuanto al desarrollo turístico que ha tenido, motivo por el cual los referentes aseguraron ver a la ciudad muy bien, con importantes oportunidades de mejora en cuanto a accesibilidad.
Este punto es algo que están trabajando de manera conjunta Municipio y Provincia, ya que desde la Subsecretaría tienen dos grandes ejes. Por un lado la sustentabilidad y por otro lo accesible, lo que quiere decir que toda la política pública que establecen debe cumplir con esos requisitos.
Un mercado
prometedor
Martina Pikielny explicó que los destinos se vuelven accesibles no solamente porque tengan rampas para discapacitados, sino que deben contar con circuitos que sean posibles para estas personas. “Mismo si dejamos de lado la cuestión moral de porqué incluir a los incapacitados, desde la Subsecretaría miramos la ecuación económica también”, entusiasmó. En este punto advirtió que la gente con discapacidad suele quedarse más noches, gastar más dinero y traer más acompañantes. “Pero, hasta que el empresario entienda que además es un buen negocio hacer un turismo accesible, estamos todavía medios verdes”, lamentó.
Aun así, Buenos Aires sigue siendo la provincia con más distinguidos en accesibilidad de la República, y dentro de los distritos Mar del Plata es la primera. Si bien hay mucho por hacer, aseguró que están encaminados y trabajando fuertemente en esta línea como política de gobierno.
Cabe recordar que la Ley de Accesibilidad fue aprobada a fines del año pasado, en tanto que ahora está en un período de reglamentación y se está trabajando en una mesa multisectorial desde la provincia de Buenos Aires con los sectores público y privado.
Es cierto que esto requiere de una inversión por parte de los hoteleros, pero por otro lado la Provincia y el Ministerio de Turismo de la Nación ha lanzado varias líneas crediticias financieras justamente para este sector. De esta manera se buscó que puedan afrontar no solamente los requisitos de accesibilidad, sino otro tipo de inversiones en infraestructura turística.
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