El Municipio inicia el sumario administrativo por sabotaje en el Hospital Ramón Santamarina
La Dirección de Legal y Técnica del Municipio de Tandil recibió las consultas pertinentes por parte de las autoridades del Sistema Integrado de Salud Pública para dar con el o los responsables del sabotaje a una de las tuberías en el Hospital Ramón Santamarina que terminaron causando pérdidas en medicamentos.

El viernes de la semana pasada desde el Sistema Integrado de Salud Pública (SISP) del Municipio se informó sobre un incidente ocurrido en el Hospital Ramón Santamarina, en concreto, de un sabotaje en una tubería de la red cloacal que afectó algunos sectores.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailLas autoridades del SISP anunciaron que iniciarían entonces un sumario para dar con los responsables del incidente que originó, entre otras cuestiones, pérdidas en medicamentos.
En diálogo con El Eco de Tandil, el secretario de Legal y Técnica, Andrés Curcio, detalló que entre martes o miércoles estaría ingresando el informe completo por parte de las autoridades del SISP para comenzar el proceso administrativo.
“Generalmente el informe puede demorar unos días, porque muchas veces se agrega información que aceleran los tiempos ya que después no la tenemos que andar pidiendo”, dijo Curcio y detalló que “cuando se habla de sumario se hace mención a un proceso por el cual se investiga un hecho cuando se conoce el presunto responsable o responsables, es decir, de tal o cual empleado municipal. En este caso, cuando no se sabe inicialmente quiénes podrían ser los responsables, se inicia lo que se conoce como pre-sumario, que la misma Ley de Empleo Público lo prevé”.
Curcio explicó que en este caso “el procedimiento es muy similar, aunque con una salvedad, que es una etapa netamente de investigación, por parte del Instructor pre sumarial, que una vez que logra arribar a las conclusiones de quiénes podrían ser los presuntos responsables da lugar a la apertura del sumario propiamente dicho”.
“El sumario investiga lo mismo y se le da traslado al presunto responsable para que haga su descargo y ahí se avanza. El Instructor sumarial luego realiza su conclusión, que es la opinión fundada y con eso más el expediente se va a la Junta de Disciplina, integrada por funcionarios municipales y miembros del Sindicato de Trabajadores, y lo que hacen es dar su opinión sobre el expediente”, enumeró Curcio sobre los pasos.
El funcionario municipal destacó luego que “con este dictamen final pasa a una resolución del intendente que a través de un decreto puede resolver lo que él considere, incluso apartándose de cualquiera de los informes previos”.
Posibilidades
“Si la sanción ameritaba una cesantía del trabajador municipal, hay un paso previo a la decisión del intendente, que es que el expediente vuelve a la Secretaria de Legal y Técnica para que otro asesor letrado haga un dictamen jurídico diferente y recién ahí pasa al intendente. Esto es una garantía legal extra que contempla la nueva Ley de Empleo Público que ya estaba en la anterior normativa”, afirmó Curcio y subrayó: “La decisión final siempre es el intendente, como un acto administrativo”.
En relación al tiempo que llevará el procedimiento, el responsable municipal de Legal y Técnica dijo que “depende mucho de cada sumario. Hay distintas situaciones que van apareciendo. Muchas depende también de los testigos que se cita y lo que pueden decir. O de alguna confesión. O de las cámaras de seguridad si tomaron algún movimiento sospechoso. Hay una serie de cuestiones a tener en cuenta que hacen lento el proceso. Es verdad que es muy difícil dar con el presunto responsable en éstos casos si no hay capturas de imágenes o confesiones de trabajadores. Pero bueno, hay que investigarlo”.
Para Curcio, no se descarta “que pueda haber sido un acto de descuido. Es decir, que quizás pasó algo con los trapos que no se dieron cuenta de que se les fue o se pudieron dar cuenta y no dijeron nada por miedo a sanciones. El descuido puede terminar en una cuestión, pero sin dudas será menores”.
El sabotaje
A más precisiones, se detectó el bloqueo en un codo del caño de cloacas. Como no se podía desatascar manualmente, se tuvo que utilizar aire a presión y allí salieron dos trapos de piso que habían sido arrojados allí.
Los inconvenientes provocados por esta obstrucción afectaron a diversos sectores, algunos de ellos sensibles, como la cámara frigorífica de la cocina, donde afortunadamente “no se produjo la contaminación de ningún alimento”. De todos modos se llevará adelante una limpieza “muy a fondo” para volver al grado de asepsia que debe tener una institución sanitaria.
A su vez también afectó la Umaad (Unidad Municipal de Adquisición y Almacenamiento de Medicamentos) y la Farmacia, que tuvo que cerrar y restringir sus actividades durante algunas horas. Por el ingreso de aguas servidas a ese sector se perdieron medicamentos y guantes estériles.