El recuento de los votos
Esta tarde, cuando a las 18 cierren las urnas, las autoridades de mesa comenzarán con el escrutinio. De esta manera, el presidente de mesa, con la supervisión de los fiscales acreditados, realizará el recuento de los votos, para lo que deberá abrir cada sobre y clasificar los sufragios según sean válidos, blancos, nulos o recurridos.
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De acuerdo a la distinción que plantea la Cámara Nacional Electoral (CNE) los válidos son aquellos votos emitidos a través de una boleta oficializada, aún si poseen tachaduras de candidatos, agregados o sustituciones (salvo en el encabezado). Si un mismo sobre contiene dos o más boletas oficializadas del mismo partido y categoría de candidatos, sólo se computa una. Dentro de esta categoría, entran los afirmativos y los blancos.
En tanto que los sufragios nulos son los emitidos mediante una boleta no oficializada, papeles con inscripciones o imágenes de cualquier naturaleza, boletas oficializadas con objetos extraños o leyendas, roturas o tachaduras sobre el nombre del partido o la categoría de candidato. También lo son aquellos sobres que contengan dos o más boletas de la misma categoría de candidatos, pero de diferente agrupación política.
Por su parte, se consideran en blanco aquellos sobres vacíos o con papel de cualquier color, sin inscripciones ni imágenes. Según la CNE, son válidos porque representan “una manifestación de la voluntad del elector de abstenerse de elegir entre las diversas propuestas formuladas” y sirven como “una herramienta para manifestar su disconformidad con todos los candidatos y con las propuestas formuladas por los partidos políticos”.
Finalmente, cuando la validez o nulidad de un voto es cuestionada por algún fiscal de la mesa, se lo considera recurrido y será la Junta la encargada de definir su condición. Los votos impugnados serán los emitidos por un elector cuya identidad ha sido cuestionada por las autoridades de mesa o los fiscales.
¿Cómo se cuentan?
En esta instancia de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) los porcentajes que se obtienen resultan del total de los votos válidos, ya sean afirmativos y blancos. Sin embargo, en las generales y de balotaje se cuentan sólo los afirmativos, ya que los blancos quedan afuera. Los nulos, en tanto, no cuentan en ninguna de las instancias.
Vale destacar que el sufragio en blanco favorece al que va primero, porque al quedar fuera del cómputo final, los porcentajes aumentan frente a un total menor de votos y hacen que la fuerza principal pueda alcanzar más fácilmente el 45 por ciento (o 40 por ciento más 10 puntos de diferencia) que necesita para ganar en primera vuelta.