En el Día Internacional del ambiente, la Asamblea por la Preservación de las Sierras pide parar “antes que sea tarde”

Desde la Asamblea por la preservación de las Sierras hicieron llegar a esta Redacción un comunicado a propósito de celebrarse hoy el Día Internacional del Ambiente, insistiendo en su mirada crítica para lo que denuncian como faltas de políticas públicas para proteger el patrimonio serrano.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailLos asambleístas señalaron que “siempre fue necesario pensar la relación entre la sociedad y la naturaleza de la que formamos parte. Pero en los últimos años la multiplicidad y gravedad de los problemas lo ha vuelto urgente. ¿Qué mundo estamos viviendo? ¿Qué dejaremos a las futuras generaciones? No son preguntas retóricas. Son la diferencia entre la vida y la muerte. La pandemia es un grito que debemos interpretar como una manifestación del desequilibrio ecológico”.
“De lo global a lo local –siguieron-, del lugar al mundo, lo que hacemos y dejamos hacer altera los procesos que sustentan la vida del planeta y la nuestra en particular. ¿Por qué?”.
Añadieron que “las palabras economía y ecología tienen la misma raíz: Oikos, casa. Economía debiera ser” la organización de la casa”. Pero lo que avanza desde la revolución industrial es una desorganización, que se ha vuelto cada día más veloz, más intensa y más injusta. Poner la mercantilización y el lucro por encima de todo y considerar a la naturaleza y a otros seres humanos como instrumentos al servicio de la ganancia y de un progreso mal entendido, está dejando a este mundo insalubre, degradado, cada vez más impredecible”.
Ya traído a la ciudad, se dijo que “un lugar donde convivimos cotidianamente con la maravilla, siguen realizando las explosiones que saquean los cerros, siguen fumigando con agrotóxicos, siguen destruyendo los suelos, organismos vivos de los cuales dependen nuestra alimentación y la de tantos seres vivos, siguen degradando la biodiversidad, destruyendo el hábitat de las especies con las que convivimos y el de nuestros hijos. Siguen negándose a hacer una política integral de residuos basada en la separación en origen, y por lo tanto, utilizando recursos de todos para enterrar gran parte de los residuos domiciliarios para beneficio de los concesionarios. Siguen buscando aparentes soluciones con maquillaje verde pero preservando el corazón de los negocios”.
Denunciaron que “siguen llevando servicios a zonas elitistas y se hacen obras a paso de tortuga en los barrios donde sería adecuado orientar el crecimiento de la ciudad. El plan de ordenamiento dice que hay que contener el avance urbano sobre las Sierras, pero es exactamente lo contrario a lo que se promueve aprobando o dejando hacer”.
Subrayaron que “las sierras de Tandil son pequeñas, valiosísimas, islas de biodiversidad, las rocas más antiguas de la Argentina, nacimiento de las cuencas hídricas, principal área de recarga del acuífero del que se abastece Tandil, muy vulnerable a la contaminación. Y como si esto fuera poco, ya desde hace varias décadas la ley de ordenamiento provincial dice que no se puede construir donde no hay agua o posibilidad de gestionar adecuadamente efluentes, pero todos vemos como se multiplican las casas cada vez más alto. Siguen promoviendo una ciudad para vender, una marca, un intangible del negocio inmobiliario y no la ciudad donde vivimos y donde es necesario garantizar el acceso justo al hábitat”.
Al celebrarse el día señalado, acotaron que “siguen incendiando, haciendo caminos y construyendo sobre las sierras. Que las generaciones futuras no tengan que decir alguna vez: aquí hubo un paraíso y lo perdimos. Es hora de parar, antes de que sea demasiado tarde. Y de que todas las personas hagamos el esfuerzo de repensarnos y repensar lo que hacemos como seres supuestamente inteligentes con nuestra única casa común”, cerraron.