En un año el consumo de carne vacuna cayó entre un 15 y un 20 por ciento y hay preocupación del sector
El titular de Punto Carne Osvaldo Barquin, aseguró que después de la baja de consumo que se registró meses atrás, nunca volvió a incrementarse la venta de carne vacuna, a pesar de que en los últimos 60 días el precio disminuyó un 10 por ciento. Además, aseguró que los cortes finos prácticamente no tienen salida y la gente sólo lleva los más económicos y que les permitan realizan comidas de elaboración, que rinden más.
.jpg)
El precio de la carne vacuna disminuyó un 10 por ciento en los últimos 60 días pero eso no repuntó el consumo y en lo que va de un año el consumo disminuyó entre un 15 y un 20 por ciento.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailEn diálogo con El Eco de Tandil, el titular de Punto Carne Osvaldo Barquin indicó que “el precio de la carne vacuna ha bajado un 10 por ciento en el transcurso de 45, 60 días pero eso no se notó en el consumo de la gente”.
“El consumo ya había bajado anteriormente y se mantuvo así, la gente sigue eligiendo el cerdo, el pollo, y eso que hubo un incremento en los últimos 10, 15 días”, señaló.

Cortes más económicos
Además, explicó que la gente elige cortes más económicos y que sirven para comidas de elaboración.
“Creo que es un tema de poder adquisitivo, es preocupante que realmente no alcanza el dinero. Y es un problema porque los cortes finos no tienen salida, el peceto, lomo, vacío, matambre se llevan en vacaciones de invierno, o fines de semana largos que hay más demanda de gastronomía”, expuso.
Eso les trae todo un problema porque “hay que regularlos porque la media res tiene todos los cotes iguales y si el consumo va para cortes más económicos cuesta muchísimo emparejar. Nos complica mucho eso”.
Hay que tener en cuenta que un corte de lomo o peceto por ejemplo está entre 750 y 800 pesos el kilo.
Barquin señaló que si bien el último año el precio de la carne vacuna fue aumentando, se dio en forma paulatina y al principio no se notaba tanto en el consumo pero con el tiempo fue bajando.
A su vez, la gente prefiere llevar carne de cerdo y pollo, cuyo precio es menor. “La carne vacuna quedó en un segundo plano, porque aún bajando seguimos sin demanda. De hecho todo el aumento del último año no se volcó todo al mostrador, porque estaba este problema de que el consumo no estaba y entonces hemos trabajado con un margen muy fino, hemos absorbido gran parte de los aumentos”.
“La carne vacuna ha subido de a poco y ahora viene subiendo el cerdo y el pollo. El tema es que hay un ciclo de crecimiento, el cerdo y el pollo son más rápidos que la carne vacuna, por eso son más económicos”, indicó.
Y planteó que “el otro tema que va a ser un problema es que el productor al estar trabada la exportación ha achicado su rodeo. Cuando en algún momento la exportación se vuelva a destrabar va a haber menos hacienda, y la carne va a subir el triple de lo que bajó, porque la exportación va a generar una demanda que se va a reflejar en el mercado interno, creo que va a ser un problema a corto plazo”.
Respecto al tradicional asado, aseguró que la venta también disminuyó considerablemente porque “la gente le esquiva al hueso, que no rinde, ahí también se generó un cuello de botella porque la gente busca todo lo que rinde. Llevan carne para milanesas y carne picada, paleta, roast beef, esquivan el hueso y corte fino”.
“La gran demanda está concentrada en los cortes para elaboración”, resaltó.
A su vez, explicó que “en el último mes ya lleva un 10 por ciento de aumento cerdo y pollo y esta semana hubo otro 5 por ciento”, pero sin embargo, la gente sigue eligiendo esa carne hoy en día.
En tanto, detalló que entre agosto del 2020 y agosto del 2021 el consumo en kilo cayó entre un 15 y un 20 por ciento. “Es muchísimo, y es preocupante. Entre los mismos clientes en el año disminuyó entre un 15 y un 20 por ciento el consumo pero el gasto en pesos ha subido un 10, osea les ha costado un 10 por ciento más en dinero, es decir, comieron menos y gastaron más”, finalizó.