En un nuevo aniversario, Lunghi planteó que Tandil afronta la tragedia más dolorosa de su historia
El jefe comunal habló de las consecuencias de la pandemia a nivel local y buscó ser esperanzador con su mensaje, en el acto oficial por el 198vo aniversario de la ciudad, en la cima del Parque Independencia. "En el peor año de nuestra historia, sacamos lo mejor de nosotros", remarcó.
En la cima del Parque Independencia, al pie del monumento al Brigadier General Martín Rodriguez, se celebró un nuevo aniversario, el 198vo., de la fundación de Tandil. Hace un año, con motivo de la pandemia por el coronavirus Covid-19 y en pleno aislamiento social, se había suspendido el tradicional acto. En la ocasión, con protocolo mediante y un acotado número de participantes, se retomó la celebración tradicional.
Recibí las noticias en tu email
Los accesos a la zona del pie al Monumento a Rodríguez estaban custodiados por el personal de la Guardia Civil Urbana, que se apostaron en los dos lugares hasta los cuales se permitía llegar. Una treinta personas participó del encuentro, encabezado por el intendente Miguel Lunghi. Estuvieron el presidente del Concejo Deliberante Juan Pablo Frolik, el diputado nacional de Juntos por el Cambio Carlos Fernández, la diputada provincial Melisa Greco, el jefe de gabinete Oscar Teruggi, el secretario de Protección Ciudadana Atilio Della Maggiora, la concejal Juana Echezarreta, la edil Nilda Fernández y autoridades militares, además de la agrupación Criollos del Tandil.
El único orador del acto fue el intendente Lunghi, que luego de izar la Bandera junto a las autoridades presentes, comenzó su alocución. “La pandemia nos privó el año pasado, por una de esas duras excepciones que nos presenta la historia, de compartir la ceremonia del aniversario de Tandil al pie del monumento de su fundador. Algo nos faltó entonces y algo hoy, con las limitaciones propias del caso, volvimos a recuperar este presente”.
El jefe comunal planteó que “la realidad es que en el devenir hacia el Bicentenario, Tandil afronta su tragedia más dolorosa. Nos duele cada vida que perdemos, nos duelen los embates a nuestra economía, nos duele no poder dar las respuestas en los tiempos de vacunación que quisiéramos y que no dependen de nosotros. Nos duele todo, pero aquí estamos. Cada fotografía del pasado reciente va con nosotros, en cada paso que damos”.
Esperanza
Lunghi intentó mostrarse esperanzador sobre lo que viene para Tandil y su comunidad: “Al presente le doy el nombre de la esperanza. Aunque parezca un contrasentido, aunque el Covid-19 se haya instalado en la conciencia y en el registro de la vida cotidiana como una verdadera desgracia, es el presente, aún golpeado, maltrecho, dolorido y rasgado por las pérdidas, es también una esperanza”.
“Cuando se habla del futuro y se lo asocia a la esperanza es porque verdaderamente estamos llevando las cuestiones al plano de la distancia, que al estar lejos, necesita del optimismo como suele invocarse desde una tribuna. Yo quiero hablar de la esperanza en tiempo presente, de aquí y ahora, existen sobradas razones para hacerlo. Tengo esperanza porque en medio de una pandemia que nos devastó, que arrasó nuestra economía y que cambió nuestras vidas para siempre, nuestra ciudad se reveló así misma para recibir la tormenta. Tengo esperanza en el presente porque nadie se dio por vencido, ni aún vencido. Porque el nombre Tandil trascendió a la marca Tandil. Es decir que la importancia de la historia sostuvo con su combustible a lo que es Tandil”.
“Acá estamos, a un año, con varios sectores de la economía golpeados por la pandemia, con un cambio dramático en las costumbres sociales de la familia y los niños. Aquí estamos dando batalla de pie, yendo a trabajar cada día, honrando la memoria emprendedora de nuestros pioneros”, remarcó.
Capacidad emprendedora
En otro tramo de su discurso, el Intendente habló del potencial emprendedor como una salida a la crisis. “Mientras que el Covid-19 no da tregua, tampoco Tandil da tregua en su formidable capacidad emprendedora. Su polea productiva, su gestión para producir e invertir. Lo vemos a diario en la construcción, en el comercio que vuelve a tomar impulso. También en la actividad agrícolaganadera, en la industria, en el turismo que logró sobrevivir a uno de sus años más negros. Tengo esperanzas porque crecen los centros comerciales fuera de las cuatro avenidas como también crecen las obras en los paseos comerciales del viejo centro de la ciudad. Este desarrollo lo vemos a diario en la primera construcción de un edificio inteligente, de Globant, que ha invertido 10 millones de dólares en Tandil. Lo vemos en el Parque Industrial cuando estamos a días de comenzar la radicación de una nueva industria, Bioceres, con una inversión de 7 millones de dólares. Tengo esperanza porque este año, se presentaron 9 proyectos solicitando radicación en el Parque Industrial”, destacó.
“Tengo esperanza en la recuperación y resurgimiento de la planta de la empresa Cagnoli, luego del devastador incendio que sufrió hace pocos días, y que será ayudada por el Estado nacional, provincial y municipal”, dijo y agregó: “Tandil sigue desarrollando su infraestructura con obras de magnitud que buscan la integración social y urbana. Más de 360 millones de pesos, entre recursos nacionales, provinciales y locales, para ejecutar trabajos viales y de provisión de servicios básicos”.
Para Lunghi, “nos da esperanza el presente porque seguimos consolidando las energías renovables para el futuro, haciendo realidad un viejo proyecto de la Usina de Tandil, como lo es el de las comunidades solares, que ya se encuentra totalmente vendido. Tengo esperanza porque aprendimos a caer y levantarnos. Trabajar en las diferencias. De los aciertos y errores. No somos una casualidad en el torbellino de la historia. Somos el legado de nuestros precursores, a quienes nada les apareció servido en bandeja. En el peor año de nuestra historia sacamos lo mejor de nosotros”.
“Paren de fumigarnos”
Como en otras ocasiones cuando ha tenido que dar mensajes ante la ciudadanía, que en este contexto son escasas, un cartel con la inscripción “Paren de fumigarnos” se montó frente al Monumento de Martín Rodríguez, a la vista de todos los presentes en el acotado acto aniversario.
Las personas que lo sostenían mantuvieron su respeto por el acto y no emitieron ninguna palabra. Ni el Intendente ni sus funcionarios se acercaron a dialogar con los que protestaban por las fumigaciones. Fue un reclamo pacífico y una nota de color en el aniversario de la ciudad.