La Asamblea de Mujeres reafirmó el desafío de “contagiar y multiplicar nuestras voces”
El próximo 8 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, y en Tandil, como en el resto del país y el mundo, comenzaron a desarrollarse asambleas de mujeres para debatir cómo pararán y cuáles serán las consignas.
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De esta manera, el pasado 8 de febrero la glorieta de la Plaza Independencia se vistió de violeta con la presencia de más de cien mujeres, que durante más de dos horas alzaron sus voces para denunciar las situaciones de opresión, violencia y maltrato a las que están expuestas, y manifestaron: “Mujeres sueltas y en bandada, organizadas, movilizadas y decididas a exigir la parte del banquete que nos corresponde”.
Mediante un comunicado, sostuvieron que “asumimos nuestra voz y comenzamos a compartir las razones por las que pararemos el próximo 8M”, entre las que se destacan los pedidos para que “se reconozca nuestro trabajo doméstico y de cuidado que hacemos las veinticuatro horas dentro y fuera de nuestras casas; se apruebe el Proyecto de Ordenanza de la Economía Popular, que permitirá que las mujeres excluidas cuenten con un trabajo digno; porque no queremos más despedidas, ni trabajos precarizados, ni acoso laboral; porque queremos igual salario por igual tarea; porque estamos cansadas de que se nos nieguen nuestros derechos: no queremos maternidades impuestas ni que se nos niegue la posibilidad de estudiar; y porque no queremos más víctimas de violencia patriarcal”.
Destacaron también que “paramos por las que no pueden parar; porque a nivel local queremos la reapertura de los consultorios de ILE, el reconocimiento de las promotoras de género y una mejor atención a las víctimas de violencia; porque sabemos el valor de nuestro trabajo; porque queremos disfrutar de nuestra vida y elegir cómo vivirla”.
“Junto a mujeres de más de sesenta países, paramos porque sabemos la enorme batalla material y cultural que tenemos por delante. Paramos y nos organizamos”.
Coincidieron en “la necesidad de replicar las asambleas que se dieron en distintas plazas y lugares de trabajo el 8M de 2017, y en culminar la jornada con una marcha”. Además, surgieron otras propuestas para este año: intervenir plazas y fábricas recuperadas, realizar una jornada artística y cultural, cuantificar y visibilizar a las mujeres despedidas este último tiempo, reunirse con los sindicatos, el Poder Ejecutivo y el Concejo Deliberante. También propusieron “multiplicar áreas de género en los sindicatos, sumarnos al proyecto ‘bancos rojos’, acompañar a las madres de chicos presos, pintar la ciudad de violeta”.
Tras lo expuesto, concluyeron que “tenemos un mes para seguir pensando y encontrándonos, para crear tantas formas de participar en el Paro Internacional de Mujeres como mujeres y situaciones existan”, y reafirmaron el desafío de “contagiar y multiplicar nuestras voces”.
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