La Facultad de Ciencias Exactas sale a la calle a mostrar sus propuestas y trabajos
Organizaron una muestra de ciencia, extensión y tecnología que se realizará mañana de 17 a 20 en la Plaza de los Troncos. Habrá juegos, experimentos, divulgación científica y exhibición de proyectos. Apuntan a achicar la brecha entre la ciudadanía y la universidad.
Con el objetivo de vincular a la ciudadanía con la ciencia y la tecnología, la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional del Centro organizó una muestra que tendrá lugar este domingo de 17 a 20 en la Plaza de los Troncos, Maipú y Santamarina.
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La propuesta, denominada Exatec, contará con variadas actividades y ofertas para que personas de todas las edades puedan sumergirse en el mundo de la ciencia y conocer de qué manera se trabaja en la casa de estudios.
José Marone y César Tynik, titulares de la Secretaría de Extensión de la unidad académica, detallaron que el año pasado se animaron a salir a la calle con una feria que se realizó en la peatonal 9 de julio para empezar a mostrar el abanico de proyectos que se articulan con la comunidad. En esta ocasión la muestra será más grande y reunirá también a todos los proyectos de tecnología y ciencia que se asocian al sector socioproductivo, para compartirlos con el público que se acerque.
Además, se hará divulgación científica con una pequeña muestra de ciencia en la que se abordarán de manera lúdica diferentes aspectos de la robótica, la programación, experimentos de física, simuladores, juegos interactivos y problemáticas ambientales, entre otros.
“Lo importante es que se sume la comunidad, que vean lo que estamos haciendo desde la facultad para achicar la brecha entre el ciudadano y la universidad”, consideraron.
La universidad al servicio de la comunidad
Una de las principales funciones de las universidades es la de generación y transmisión de conocimiento, fundamentalmente la transferencia de esos saberes en acciones concretas para la comunidad. De este modo, desde Exactas han aportado a diferentes proyectos de impacto social como la generación de ladrillos cementicios con residuos electrónicos y las tareas desarrolladas en el arroyo Langueyú.
En este sentido, César Tynik explicó que se comenzaron a fabricar ladrillos con carcasas y demás elementos triturados que se incorporaron al ámbito de la construcción. El trabajo implicó a diferentes institutos de la facultad y a la asociación civil Pachacamac, con una inserción positiva en la ciudad. De hecho, el punto limpio del Hipódromo se levantó con esos ladrillos, que aprovecha lo que de otra forma hubiese sido un desecho.
En el arroyo Langueyú se planteó un proyecto de extensión para comprender la problemática del curso de agua que atraviesa Tandil y afecta de diversas maneras a los vecinos.
“Hace un mes y medio se propuso hacer un foro con todos los actores sociales para entender la problemática, es salir de hacer ciencia para involucrarse con los actores locales y entre todos llevar una propuesta de transformación social. Hay que escuchar las problemáticas y poner a la universidad a resolver esas injusticias”, manifestó Tynik.
“Se rompe una bolsa de basura en el centro, eso va al pluvial, de ahí al arroyo que está entubado y esa bolsa rota sale en villa Aguirre, ir y escuchar a los vecinos nos hace replantearnos las cosas”, ejemplificó Marone.
También aludieron al Centro de Innovación Ciudadana, una herramienta que sirve como una forma de traccionar a los ciudadanos para que tengan una puerta de entrada a la universidad. “Es un lugar para ir sin prejuicios, charlar, plantear problemáticas y soluciones. Son todos bien recibidos. El objetivo es investigar para la transformación del país, hacer tecnología y extensión”, sentenciaron.