La importancia de reconocer la fauna autóctona para mantener el equilibrio ambiental
Es necesario que nosotros, y sobre todo las nuevas generaciones, conozcan y aprendan de la fauna autóctona que nos rodea

En nuestra región, cuando las temperaturas comienzan a ser un poco más elevadas, es más frecuente que nos encontremos con reptiles que salen de su estado de bruma. Por ello, desde el Centro de Rescate de Granja Los Pibes compartieron un comunicado en el que detallaron el importante rol que cumple cada animal en el ecosistema.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailLa brumación en reptiles es un periodo de dormancia en el que los animales ectotermos (de sangre fría) se vuelven fisiológicamente menos activos.
Entre los reptiles que habitan en Tandil podemos encontrar lagartos, lagartijas y serpientes: “Estos escamosos dependen de la temperatura del ambiente para poder realizar sus actividades, la mayoría se alimenta de insectos, anfibios, aves pequeñas y pequeños mamíferos, especies que podemos considerar como plagas”.
Asimismo, resaltaron que para la sociedad este “servicio ecosistemo” es fundamental ya que muchos de los insectos y roedores son los portadores de enfermedades riesgosas para la vida humana.

Actualmente, de acuerdo a lo expuesto, el principal problema que atraviesan estos animales en nuestro ambiente es la fragmentación de los espacios naturales, la incrementación de la frontera agrícola-ganadera, y la construcción en las sierras, junto las aperturas de calles: “Esta modificación de sus espacios naturales ha logrado que escasee el alimento agua y refugios”.
"La escasez de alimento en zona rurales se debe a la utilización de insecticidas. El problema del agua, se lo adjudica a la utilización desmedida de riegos, piletas, la contaminación, y el cambio climático. Y por último la carencia de refugio se debe a la devastación de la flora autóctona", explicaron.
Como consecuencia de ello, la construcción en las sierras ha llevado a estos reptiles a un conflicto constante con el ser humano y sus actividades. De hecho, el atropellamiento y el enfrentamiento con las mascotas es una de las causas de muerte más frecuentes.

En nuestras sierras existen varias especies de serpientes, la mayoría culebras de distintos colores y tamaños, que se alimentan de insectos, anfibios, y algunos roedores. Y solo hay una serpiente que posee veneno, la Yarará grande, que también se alimenta de roedores.
“Es necesario que nosotros, y sobre todo las nuevas generaciones, conozcan y aprendan de la fauna autóctona que nos rodea que, además de ser magnífica, cumple un rol fundamental para mantener el equilibrio ambiental”, remarcaron.