Localidades rurales
La Sociedad de Fomento de Azucena recibió su personería jurídica y continúa sus actividades para la comunidad
Buscarán establecer convenios que les permitan avanzar con los proyectos productivos e históricos para la localidad.
La Sociedad de Fomento de Azucena obtuvo su personería jurídica. Tras poco más de 9 meses de gestión, el grupo de vecinos de la localidad logró consolidar su estatuto legal a partir del cual buscarán generar convenios que les permitan avanzar con sus diferentes propuestas para la comunidad.
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La entrega formal de la personería se llevó a cabo durante el mediodía del miércoles, en la sede local de la Anses, con la presencia de parte del grupo de la localidad y una abogada de la Defensoría del Pueblo de la Provincia.
La Sociedad de Fomento de Azucena se conformó a instancias de un grupo de vecinos, hace aproximadamente un año. Actualmente 9 personas integran su Comisión Directiva presidida por Juan Carlos Di Giano.
“Es una noticia positiva”, expresó el vecino Jorge Garra, quien estuvo durante el acto de entrega de la personería. “Además de todo lo que significa tener una constitución formal y legal, vamos a poder empezar a gestionar mejor algunos trámites oficiales. Queremos que nos permita establecer convenios con instituciones y organismos nacionales, provinciales y municipales para avanzar con los proyectos productivos y una serie de iniciativas que queremos desarrollar”, precisó.
La obtención de la personería, agregó Garra, contribuirá a avanzar en la concreción de convenios con el Ministerio de Trabajo a partir de los cuales continuarán fortaleciendo iniciativas como la que actualmente llevan a cabo con gran éxito, entre las que se encuentra el taller de panadería.
Producir y poner en valor histórico
El pasado 12 de abril comenzó la instancia formativa que había sido anunciada como parte de las actividades propuestas por la localidad en el marco de la agenda del Bicentenario. El espacio se lleva a cabo durante los días miércoles y jueves por la mañana en el edificio de la histórica panadería que funcionó en Azucena hasta los primeros años de la década del 2000.
Con alrededor de 40 inscriptos, superó las expectativas de los organizadores. Concurrieron tanto estudiantes de 5to y 6to año de la Escuela Secundaria 12, como vecinos de la comunidad. Incluso una participante se movilizó 25 kilómetros desde La Numancia, mientras que otro lo hizo desde Barker.
El responsable de dictar el taller es un ex panadero del establecimiento, Rodolfo Goñi, quien desde los 12 años trabajó en el lugar. “No sólo comparte su oficio sino también la historia”, destacó Garra en referencia a que el proyecto supone tanto una recuperación productiva del espacio como una puesta en valor del edificio centenario. Del mismo se encuentra en pie el sector de la cuadra, mientras que el horno se derrumbó.
“El objetivo del taller además de la capacitación, es que se desprenda de allí un taller de producción, y que se constituya como una mini empresa”, señaló Garra. El anhelo de la comunidad es el de recuperar también la histórica “torta negra” que fuera un símbolo de la localidad.
Por la gran convocatoria de la instancia formativa que se desarrollará durante todo el año, debieron dividir en dos grupos a los asistentes.
Además, la Sociedad de Fomento prepara otras acciones para el transcurso del año. El próximo lunes 1 de mayo realizarán un locro comunitario. A su vez, el 7 de mayo llevarán a cabo el 1er Encuentro de Productores de las Zonas Rurales. Para el mismo, señalaron, tomaron la idea de la Feria del Chapaleofú, espacio de intercambio entre comunidades originarias e hispano criollos durante los años previos a la fundación del Fuerte de la Independencia.
Mientras tanto continúan a la espera de avances con respecto al proyecto de puesta en valor de la costa del Arroyo Chapaleofú. Luego de que a comienzos de marzo se iniciaran las tareas de limpieza y alisado del terreno, desde la Sociedad de Fomento expresaron a través de un comunicado que “después de tanta demora en diversos aspectos, es necesario que se vuelquen mayor cantidad de recursos para que este Paseo del Bicentenario se transforme en una realidad palpable: iluminación, parrillas, forestación, sanitarios, por qué no, juegos tradicionales o para hacer ejercicios”.
En el marco del mismo texto, señalaron también la “falta de transporte público” por lo cual continúan “reclamando su ingreso diario y tres veces por día”.