Las tarifas y la baja en las ventas impactaron fuertemente en la cooperativa Cerámica Blanca
Las ventas disminuyeron al menos un 30 por ciento. La última boleta de gas fue de 75 mil pesos y 14 mil de luz. Desde la cooperativa aseguran que la situación es “bastante crítica”.
La crisis económica, el incremento de las tarifas y la baja en las ventas golpearon fuertemente a Cerámica Blanca, que al igual que otras cooperativas, encuentran muy difícil seguir adelante en este contexto adverso.
Recibí las noticias en tu email
Nina Pochettino, una de las integrantes de la cooperativa, explicó que las ventas bajaron al menos un 30 por ciento. Además, el impacto de aumento de las tarifas los golpeó con fuerza: la última factura de gas fue de 75 mil pesos y de luz de 14 mil. Para tener un punto de comparación, en 2016 la factura de gas en la misma época era de 15 mil pesos y la de luz de mil.
Por tal motivo, resumió que la situación es “bastante crítica”.
Estancados
Nina Pochettino aseguró que están “como todo el mundo aguantando, tratando de ver como paliar el tema del aumento de las tarifas con la baja del trabajo, remándola como siempre, pero en este caso con un plus que es el aumento de los servicios y la falta de trabajo”.
Recordó que el año pasado se habían empezado a estabilizar y pensaban en “crecer en cuanto a lo salarial, a la producción, a la mercadería que podíamos entregar y producir. Nos acomodamos bastante en eso para abrir a otros mercados”.
Sin embargo, “con el tema de las tarifas y el hecho de que no acompaña el trabajo para paliar el aumento, volvimos a estancarnos. Estaba todo en marcha pero esto nos puso un freno”.
En cuanto al impacto de las tarifas, estimó que fue del 400 por ciento en el transcurso de poco más de un año.
Y aclaró que “por ser cooperativa no tenemos ningún beneficio de nada, en ningún aspecto, no deja de ser una empresa organizada bajo la forma de cooperativa”.
Recordó que antes “cada asociado recibía una ayuda, como un salario complementario y eso también se cortó, que eran alrededor de 4 mil pesos peor ya no está”.
“Hoy somos como cualquier empresa. La única forma de acomodar todo esto fue bajar la rentabilidad que teníamos, y eso cae directamente en los retiros que podemos hacer nosotros como socios, es la única forma de ir achicando los gastos para compensar todo el lío que hay”, afirmó.
En tanto, aseguró que “bajó muchísimo la venta. Sumado a eso, todos piden mucho plazo de pago, está quien realmente lo necesita y está quien se aprovecha. Es muy difícil, hay que ir buscando el punto de equilibrio para tener trabajo, porque el gasto fijo lo seguimos teniendo, pero también hay que buscar no pasarnos para el otro lado”.
“Ahora hay que mantenerse hasta que Dios quiera el país vuelva a remontar. No aparecen nuevos clientes porque todos están a la expectativa de ver que pasa en el país, así que se mantienen con lo que tienen, compran lo justo y necesario, está todo muy parado”, indicó.
No obstante, contó que siempre tiene gente nueva que se acerca a comprar, además de los que clientes que ya tienen. Y recordó que venden durante la semana de 8 a 14 y los sábados de 10 a 18.
“Trasladamos los costos lo mínimo posible al precio de los artículos porque si los trasladamos por completo vendemos menos todavía”, sostuvo.
Y agregó que “sumado al aumento de las tarifas tenemos en contra que nuestros insumos y el gas son a valor dólar así que doble aumento”. u
Este contenido no está abierto a comentarios