Los obreros decidieron aceptar las indemnizaciones y se acerca el final de la fábrica Metalúrgica Tandil
Con dolor y resignación, los operarios aseguraron que dieron todo por recuperar los puestos de trabajo, pero que ya no se podía “hacer más nada”. “Creo que hicimos lo correcto, no quisimos quemar gomas, ni nada, decidimos aceptar porque no había nada más para hacer. La verdad es que estamos muy tristes”, expresó Daniel Mendieta, uno de los trabajadores despedidos.
Con las miradas llenas de tristeza y un profundo dolor, se retiraron de la asamblea de ayer tras haber tomado la difícil decisión, esa a la cual fueron impulsados una y otra vez y que claramente ninguno quería adoptar. “Decidimos aceptar porque ya no había nada más para hacer”, supo definir uno de los trabajadores con desazón.
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Tras esa ardua lucha por recuperar los puestos de trabajo que llevaron adelante desde el 11 de octubre cuando Renault les comunicó que estaban despedidos por el cierre definitivo de la emblemática fábrica, ayer decidieron finalmente aceptar la última oferta de los empresarios. Ya no habría más, si no la aceptaban igualmente el cierre iba a ser un hecho y los despidos se iban a concretar en pocos días más.
Los empresarios se mantuvieron firmes en su postura de cerrar la planta y solamente mejoraron las ofertas económicas en cuanto a los despidos.
Y ahora sí, el final de Metalúrgica Tandil, la planta que supo ser un ícono de la ciudad, se convierte en un hecho.
“Es muy triste”
Cabe recordar que el miércoles, la firma Renault presentó ante el Ministerio de Trabajo una nueva oferta de indemnización dirigida a los trabajadores de Metalúrgica Tandil y ratificó su voluntad de cerrar la planta. Por otra parte, presionó a los empleados a optar por la propuesta “definitiva” que contempla los montos fijados por la ley más algunos beneficios adicionales que manifestó iba a otorgar siempre que cerraran en el marco de la negociación mediada por la cartera laboral bonaerense. Asimismo, habían advertido que vencido el plazo de la conciliación obligatoria, el próximo martes, procederían con los despidos y los indemnizarían conforme a la ley, sin el plus ofrecido.
Ayer en asamblea, los trabajadores decidieron aceptar la propuesta de Renault y el lunes esa determinación será comunicada a los empresarios en la última audiencia que se desarrollará en el Ministerio de Trabajo.
Daniel Mendieta, uno de los operarios, contó en diálogo con El Eco de Tandil que “como siempre todo se decide en asamblea con (el secretario general de la UOM) Carlos Romano y los tres delegados, y lamentablemente se llegó a un fin”.
“La verdad es que yo esperaba tener los puestos de trabajo, pero no se pudo conseguir. Confío totalmente que dieron una batalla increíble los delegados y nosotros también acá, en el acampe, tomando la fábrica, y entiendo que no se pudo. Es que es muy triste para todos”, expresó con resignación.
Y admitió que “estamos conmocionados, sabemos que cada uno dio lo que pudo. De mi parte, en lo personal, creo que di lo mejor que tenía, no pude hacer más nada. No me reprocho nada a mí mismo”.
“Queríamos los puestos de trabajo”
Adelantó que van a aceptar las indemnizaciones que les ofrecieron, además de 160 mil pesos para la obra social (la primera oferta habían sido 60 mil pesos y la segunda 100 mil), el fondo de desempleo en una sola cuota, capacitaciones de plomería, electricidad e instalación de aire acondicionados a cargo de la empresa y tres salarios.
“Dicen que se podría mejorar un poco más la oferta, así que bienvenido sea”, afirmó.
En tanto, evaluó que “creo que hicimos lo correcto, no quisimos quemar gomas, ni nada, decidimos aceptar porque no había nada más para hacer”.
“Hicimos todo lo que se pudo hacer. Es un día atípico para todos nosotros, la verdad que queríamos los puestos de trabajo. La plata no me interesa, no me interesaban las indemnizaciones, yo quería trabajar porque la mayoría somos jóvenes, y también por lo que significa Metalúrgica para Tandil”, expuso.
Y añadió que “estoy seguro de que hubiera sido viable y que podríamos haber estado bien. Cuando dicen que no es viable, no lo creo para nada”.
El apoyo de la gente
Si bien Daniel Mendieta trabajaba en Metalúrgica Tandil hacía 4 años, confió que se lleva “grandes cosas, me llevo la lucha, me llevo los compañeros. La verdad que este último tiempo nos afianzamos un montón”.
“No alcanzan las palabras para agradecer a la gente que vino a la movilización, a las marchas, a toda la gente que siempre estuvo con nosotros, que nos apoyaron, que se acercaron a tomar un mate. Nos hizo muy bien en el día a día, una de las cosas que me llevo es el acompañamiento de la gente, organizaciones políticas, los gremios que vinieron a dar una mano”, aseguró.
Recalcó que “tomamos la fábrica, pero no prendimos gomas, no insultamos a nadie, no le faltamos el respeto a nadie. Juntamos firmas, creo que todo sumó. La gente nos apoya, pasa por acá y nos saluda, nos deja un paquete de yerba, todas esas cosas nos dejaron algo muy lindo para nosotros”.
Volver a empezar
“Lo único que queríamos era trabajar, no pedíamos nada extraordinario”, manifestó.
Adelantó que van a permanecer en el acampe hasta el lunes, cuando se realizará la última audiencia en el Ministerio de Trabajo a las 11 y a las 17 será la última asamblea frente a la fábrica.
“Cerraremos este ciclo, cerraremos las puertas y no queda nada más por hacer”, sostuvo.
Y concluyó que “desde lo personal me voy sabiendo que hice todo lo que pude. Empezar de nuevo siempre es triste, más allá de las indemnizaciones, sabiendo cómo está el país es difícil. Vamos a salir a trabajar y salir adelante, somos jóvenes, tenemos fuerzas y ganas”.