Un comercio sufrió un importante robo y el propietario denunció el mal desempeño de los efectivos
En la madrugada del viernes, en alrededor de media hora, un delincuente logró sustraer mercadería y dinero en efectivo conformando un botín cercano al millón de pesos. Gracias a las cámaras de seguridad, no solo registró el robo sino también la actitud socarrona que tuvieron los efectivos policiales que asistieron al local. El damnificado denunció el hecho en comisaría y luego fue contra la policía en la fiscalía.

Otra vez un hecho de inseguridad golpea a un trabajador tandilense. En esta ocasión le tocó a Exequiel Crevecoeur, propietario del local “Zona de quesos”, que en la madrugada del viernes sufrió un robo protagonizado por una persona que se trasladaba en bicicleta. El delincuente contó con el tiempo y tranquilidad necesaria para realizar un par de viajes y llevarse la mayor cantidad de mercadería posible.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailEl hecho tuvo lugar el pasado viernes, entre las 2 y las 3 de la madrugada, en un comercio ubicado en Balbín 1370. Una persona que se movilizaba en una bicicleta rompió la vidriera del local y dispuso de total libertad para realizar un par de viajes y sustraer varios productos y dinero en efectivo. Si bien el comercio disponía de rejas que evitaron el ingreso del delincuente, gran parte de lo que estaba a mano fue robado.
“Lo vi todo por las cámaras, estuvo casi media hora. Rompió un vidrio, se fue y volvió. Llevó unas botellas de vino, se fue y volvió. Y después llevó mercadería, quesos y salamines, y plata de la caja que justo la teníamos cerca”, detalló Exequiel Crevecoeur, responsable del negocio, en diálogo con El Eco Multimedios.
Más allá de la impotencia y el enojo que puede generar ser víctima de la inseguridad, la mayor indignación del comerciante estuvo dirigida a la actitud de los efectivos policiales. “Estuvieron diez minutos en el local, hicieron chistes, se rieron de lo que había pasado. Está todo grabado”, describió y luego añadió: “De un chorro te esperás que venga y te robe, pero que la policía venga y se ría del hecho es muy triste”.

El robo y las denuncias
Las cámaras de seguridad tuvieron un papel determinante para aportar la mayor cantidad de datos sobre el robo. Por un lado, las del Centro de Monitoreo de Tandil (CMT) sirvieron para alertar a la policía del hecho y lograr la presencia de los efectivos para evitar más pérdidas, mientras que las cámaras privadas del local le dieron fundamentos a la indignación de Crevecoeur por el desempeño policial.
Según lo que dejó el registro de imágenes, el delincuente rompió dos de los vidrios y sustrajo todo lo que estaba a mano en varios viajes que realizó en bicicleta. “Se llevó vinos, salamines y quesos. Por desgracia teníamos la caja cerca de la vidriera, entonces pudo abrirla y sacar el efectivo. No hicimos cuentas, pero el aproximado de las pérdidas es entre 800 y 900 mil pesos”, describió la víctima.
Si bien las cámaras del CMT, que hay una en cada esquina de la cuadra donde está ubicado el local, lograron alertar a la policía sobre el hecho, la víctima se lamentó porque cuando llegaron los efectivos, cerca de las 4 de la madrugada, según el registro de las cámaras internas, ya era tarde.
El accionar de los dos efectivos que se hicieron presentes despertó la gran indignación del propietario del local. Estuvieron apenas unos minutos y mostraron una actitud socarrona ante el hecho de inseguridad. “Lo más indignante es cómo reaccionó la policía y verlo por las cámaras. Es muy feo ver el video de cómo están diez minutos, se van y queda el negocio al descubierto”, describió.
Al mismo tiempo, supo por el audio captado por el sistema de video vigilancia que los efectivos en ese lapso que estuvieron se rieron e hicieron chistes con la situación. “Decían que se había llevado una tablita, había un maple de huevo que faltaban algunos y bromeaban con eso. También dijeron que estaba para agarrar una cerveza y unas papitas”, expresó indignado.
Toda esta situación llevó al vecino a realizar dos denuncias. Una correspondiente al robo en la comisaría Segunda y la otra en Fiscalía por el accionar de los oficiales. “Vi todo por las cámaras y es muy frustrante ir enterándote de a poco como pasó. Está todo grabado, se ve cómo se ríen, así que espero que hagan algo”, comentó, al mismo tiempo que confirmó que envió todas las pruebas por mail.
El comercio lleva abierto alrededor de seis meses y este fue el primer robo que les tocó sufrir. A pesar de preguntar e insistir todos los días, Crevecoeur todavía no recibió respuestas de la policía respecto a dar con el delincuente. Al mismo tiempo aguarda novedades desde la Fiscalía tras la denuncia por lo que entiende un mal desempeño de los oficiales. “En la policía no hay respuestas. Nadie sabe nada, es triste”, concluyó.
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