Un importante grupo de vecinos salió a la calle a defender “las dos vidas” a tres días de la votación en el Senado
Con globos, pañuelos, vinchas y banderas celestes marcharon desde la Plaza de los Troncos hasta la Municipalidad. Allí, llamaron a la población a sumarse al viaje que realizarán el miércoles al Congreso, cuando se definirá el destino de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. Recalcaron la importancia de la participación en esa jornada ya que “es el día en el que se decide si Argentina abraza toda vida o elimina las no deseadas”.
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“Dicen que no tiene vida, dicen que no tiene voz, acá estamos los que marchamos por la vida de los dos”, eran una de las canciones que entonaron unas 500 personas que se movilizaron para decir “no” a la legalización del aborto. Ya en la recta final hacia la votación que definirá el futuro de la Ley de Interrupción Legal del Embarazo, los manifestantes hicieron oír su voz en la ciudad y gritaron con fuerza “Sí a la vida”.
La Plaza de los Troncos, en la esquina de Santamarina y Belgrano, fue el punto de encuentro donde minutos antes de las 15 comenzaron a congregarse los manifestantes. Poco después de las 15.30 se encolumnaron detrás de la leyenda “Tandil defiende la vida” y se movilizaron por Belgrano hacia el Municipio.
Mientras una inmensa bandera celeste y blanca recorría prácticamente todos los metros de largo de la columna de gente, una gran pancarta resumía la intención de la movilización: “Toda vida vale. Sí a las dos vidas”.
El color celeste fue el protagonista. Globos, pañuelos, vinchas llevaban el color que identifica a quienes luchan por las dos vidas. En tanto, en el camino que fueron recorrieron dejaron su huella, colocando cintas celestes en árboles y postes de luz.
“La vida no se debate, se defiende”, “Contención para no abortar”, “Cuidemos las dos vidas”, “Toda vida vale”, “El aborto detiene un corazón que late”, eran algunas de las frases que podían leerse en las pancartas.
“No al aborto señor Presidente, sí a la vida le dice la gente”, cantaban al avanzar hacia el Municipio personas de distintas edades entre los que había muchos niños pequeños y agregaban “Presidente y senador, pedimos por favor, elijan por la vida de los dos”.
Participaron de la manifestación el concejal de Cambiemos Marcos Nicolini, el exedil Adolfo Loreal, y la concejal del bloque Integrar Nilda Fernández.
En la explanada municipal
Al llegar a la Plaza Independencia, dieron la vuelta completa y finalizaron el recorrido en la Municipalidad, donde colocaron diversas cintas celestes.
En primer lugar, cantaron el Himno y luego expresaron a través del altavoz que “el 8 será una jornada muy importante. Hay una gran presión de muchos grupos, gente que se está organizando para decir que Argentina quiere el aborto y no es verdad. En cuanta encuesta uno ha participado, todas han dado como resultado una amplia mayoría por la vida. Por eso estamos preparando un colectivo para que la mayor cantidad de gente que pueda vaya al Congreso”.
Puntualizaron que el miércoles a las 12 saldrán uno o más micros de la Terminal de Omnibus hacia el Congreso.
“El costo es lo que pueda colaborar cada uno, pero no tiene que ser un impedimento la plata, así que el que no puede pagar no hay problema”, señalaron y agregaron que los interesados en viajar pueden contactarse a través del Facebook “Más Vida Tandil”.
“Llegaremos a las 20 al Congreso. Estaremos ahí hasta que se vote la ley y volveremos festejando enseguida a Tandil”, concluyeron, lo que desató un efusivo aplauso.
Julieta Bosch, de Más Vida Tandil, expresó que “ayer (por el sábado) al obelisco fueron 800 mil argentinos que se manifestaron. El 8 debemos duplicar la cantidad, para que los senadores nos escuchen. Es el día en el que se decide si Argentina abraza toda vida o elimina las no deseadas, así que los esperamos a todos los que puedan el 8 en el Congreso”.
Luego, cantaron un tema alusivo justamente a la defensa del niño por nacer y para finalizar el acto se realizó una suelta de palomas que concluyó con palmas y el canto de “Viva toda vida”.
“Hay una tendencia al rechazo de la ley”
En diálogo con El Eco de Tandil, Julieta Bosch explicó que “la idea es unirnos al resto del país que está haciendo marchas más chicas, más grandes, depende de la ciudad pero es mostrar nuestra disconformidad con la media sanción de esta ley, y pedir a los senadores que voten el rechazo”.
Recordó que el sábado hubo una marcha “multitudinaria en el Obelisco que fue convocada por las iglesias evangélicas y que acompañaron otras confesiones, y también de gente de buena voluntad que estamos en la misma causa, nos unimos a esa marcha y a otras que va a haber hoy (por ayer) en centenares de ciudades”.
“Hasta que no se vote no decimos nada, estamos viendo que hay una tendencia al rechazo pero hasta que no se vote, después de lo que pasó en Diputados, no queremos dar nada por hecho. El 8 vamos a viajar, van a salir de acá uno o dos colectivos, hay uno lleno y se sigue sumando gente, también autos particulares, la idea es estar en el Congreso el 8 hasta que se vote”.
“Es una ley del llegar después”, afirmó una de las manifestantes
El Eco de Tandil dialogó con algunas de las personas que se manifestaron para conocer su opinión sobre la ley con mayor profundidad.
Angeles consideró que los senadores se tomaron esto “más en serio que los diputados. Tengo bastante más fe que tomen una mejor decisión. Lo que me duele es que en mi patria el Estado diga que está bien matar a un bebé, al más inocente, es una cuestión filosófica. La ley no es la solución al problema, los países más desarrollados están yendo para atrás en este sentido”.
Por su lado, Ana expuso que “esta es una ley del llegar después. Hay que llegar antes, las mujeres no se enferman de abortos, no es sacarse un quiste, no es su cuerpo, son dos. Los argumentos son de violencia, eso significa que no hay fundamento. No dudo que hay mucha gente que está en el error, ojalá que escuchen para poder salir de él”.
“La verdad es una, cada vida vale por sí misma. Las principales víctimas son las mujeres convencidas de que se tienen que hacer un aborto, y se convierten en víctimas porque después quién las salva del vacío que les queda. No saben a lo que las empujan”, concluyó.
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